El aeropuerto de Bruselas reabrirá parcialmente mañana tras el atentado

El aeropuerto de Bruselas-Zaventem reabre, aunque parcialmente, este domingo. El aeródromo, que permanecía cerrado desde los atentados del pasado 22 de marzo que mataron allí al menos a 14 personas. Las instalaciones contarán con nuevas medidas de seguridad y solo se podrá acceder al recinto en coche o taxi, según acordaron las autoridades, la policía y la compañía. Los vuelos, de moment...

El aeropuerto de Bruselas-Zaventem reabre, aunque parcialmente, este domingo. El aeródromo, que permanecía cerrado desde los atentados del pasado 22 de marzo que mataron allí al menos a 14 personas. Las instalaciones contarán con nuevas medidas de seguridad y solo se podrá acceder al recinto en coche o taxi, según acordaron las autoridades, la policía y la compañía. Los vuelos, de momento solo tres, serán a Turín, Faro y Atenas; todos de Brussels Airlines, como explicó el consejero delegado de Brussels Airport, la compañía estatal que gestiona el aeródromo.

Hasta este viernes, la policía aeronáutica bloqueaba la reapertura de Zaventem, por problemas de seguridad. Finalmente, sindicatos policiales y el Ministerio del Interior llegaron a un acuerdo para instalar controles adicionales. Imprescindibles, según las fuerzas de seguridad. Así, además de limitar el acceso al aeródromo en otros transportes que no sean coches, que tendrán que aparcar en la zona habilitada para ello y no podrán parar cerca de la entrada, la policía realizará un control previo sistemático para revisar los documentos de los viajeros y sus billetes antes de entrar en el recinto. Antes de pasar al área de embarque, las autoridades revisarán con un detector de metales y rayos x a los pasajeros y sus equipajes de mano, según Feist.

También se pondrá en marcha un sistema de reconocimiento automático de las matrículas de quienes acceden al recinto y un control aleatorio de los vehículos que se acerquen al aeropuerto. Las autoridades y la empresa gestora de Zaventem, Brussels Airport, revisarán a fondo los historiales del personal del aeropuerto, según informa la cadena de televisión pública RTBF.

Durante meses, el aeropuerto, por el que transitaban hasta los ataques 22 millones de viajeros al año, solo podrá funcionar al 20% de su capacidad. La zona de facturación, donde se estallaron dos yihadistas kamikazes, quedó seriamente dañada en las explosiones.