Los dos candidatos proclaman su triunfo en las elecciones indonesias

Ambos aspirantes pueden apelar los resultados oficiales, que no se conocerán hasta el día 22

Los dos principales candidatos en las elecciones indonesias de hoy se han atribuido la victoria. El gobernador de Yakarta, Joko “Jokowi” Widodo, de 53 años y el primer aspirante creíble a la presidencia que carece de vínculos con el antiguo régimen militar de Suharto, se proclamó ganador después de que varias empresas de sondeos privadas le adjudicaran el triunfo en unos comicios desarrollados sin incidentes de importancia. Pero su rival, Prabowo Subianto, de 62 años y considerado el representante de la “vieja guardia” del régimen autocrático, com...

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Los dos principales candidatos en las elecciones indonesias de hoy se han atribuido la victoria. El gobernador de Yakarta, Joko “Jokowi” Widodo, de 53 años y el primer aspirante creíble a la presidencia que carece de vínculos con el antiguo régimen militar de Suharto, se proclamó ganador después de que varias empresas de sondeos privadas le adjudicaran el triunfo en unos comicios desarrollados sin incidentes de importancia. Pero su rival, Prabowo Subianto, de 62 años y considerado el representante de la “vieja guardia” del régimen autocrático, compareció poco después para asegurar que otras compañías especializadas le dan como vencedor a él.

La Comisión Electoral no dará a conocer los resultados oficiales de los comicios, los terceros de la etapa democrática en Indonesia, hasta el próximo día 22. Ambos candidatos pueden apelar ante el Tribunal Constitucional, el árbitro final de las disputas electorales. En cualquier caso, la investidura del jefe de Estado que sustituya a Sushilo Bambang Yudhoyono no está prevista hasta el 1 de octubre.

La situación, que hace recordar a la disputa electoral entre George W Bush y Al Gore que tuvo en suspenso durante meses a EEUU en el año 2000, es completamente inédita en Indonesia, la tercera mayor democracia y el país de mayor población musulmana del mundo. En las dos elecciones previas, Yudhoyono se había impuesto con comodidad.

“Jokowi”, del Partido Democrático de Indonesia por la Lucha (PDI-P) había comenzado la campaña electoral con una cómoda ventaja. Exportador de muebles de profesión, saltó a la fama como gobernador de Yakarta, un puesto que ganó en 2012 y en el que se hizo con una gran popularidad al tratar de resolver con propuestas innovadoras los problemas de la capital indonesia, desde la superpoblación hasta el exceso de tráfico. Visto a menudo en conciertos de rock o en visitas a barrios desfavorecidos, ha transmitido una imagen de modernidad y de ruptura con la larga sombra del régimen de Suharto que le ha granjeado las simpatías de las clases medias y los más jóvenes. Pero a medida que avanzó la campaña, y con ella la polarización de los 190 millones de votantes llamados a las urnas, fue perdiendo ventaja debido a una serie de alegaciones, incluida la afirmación de que es de religión cristiana. En un país de mayoría musulmana, ese tipo de rumores puede hacer perder un buen número de votos. “Jokowi” ha negado que sea cristiano.

Prabowo, por contra, mantiene numerosos vínculos con el antiguo régimen. Estuvo casado con una hija de Suharto y ha reconocido que antes de la caída de ese gobierno, en 1998, estuvo implicado en los secuestros de activistas pro democracia.

Según el diario The Jakarta Post, una encuesta a pie de urna elaborada por el Centro de Estudios Estratégicos Internacionales (CSIS), considerada generalmente creíble, atribuye el triunfo a “Jokowi” por un estrecho margen, del 52 por ciento frente al 48 por ciento de Prabowo.

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El vencedor definitivo de las elecciones tendrá ante sí un buen número de desafíos. Tras años de crecimiento, la economía indonesia, sostenida por el consumo de una clase media emergente, comienza a dar señales de debilidad. El régimen de Yudhoyono aportó estabilidad pero no atajó una corrupción que adquiere cada vez mayores dimensiones. Y preocupan las posibles derivas hacia el extremismo religioso que puedan darse si se agravan estos problemas.

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