Pekín castigará a sus habitantes críticos con las autoridades por las inundaciones
Aumentan los reproches hacia las autoridades por su gestión durante las fuertes lluvias que este sábado dejaron al menos 77 muertos en la capital El alcalde de Pekín, Guo Jinlong, presentó ayer su dimisión
Las autoridades de Pekín han anunciado este jueves que castigarán a todos aquellos que utilicen Internet para criticar al Gobierno, tras las fuertes lluvias que causaron al menos 77 muertos en Pekín este sábado.
“Desde ahora, castigaremos con firmeza a aquellos que utilicen Internet para propagar rumores políticos y atacar al partido comunista, los dirigentes del Estado y el sistema actual”, ha declarado el jefe de la policía de la capital, Fu Zhengua, citado este jueves por el diario Jinghua Shibao.
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Las autoridades de Pekín han anunciado este jueves que castigarán a todos aquellos que utilicen Internet para criticar al Gobierno, tras las fuertes lluvias que causaron al menos 77 muertos en Pekín este sábado.
“Desde ahora, castigaremos con firmeza a aquellos que utilicen Internet para propagar rumores políticos y atacar al partido comunista, los dirigentes del Estado y el sistema actual”, ha declarado el jefe de la policía de la capital, Fu Zhengua, citado este jueves por el diario Jinghua Shibao.
El municipio que llevaba cuatro días sin publicar un nuevo balance de víctimas de esas intemperies, las peores en más de 60 años, ha elevado hoy de 37 a 77 el número de fallecidos.
Tras haber visto ríos desbocados y carreteras inundadas, muchos pekineses estaban convencidos de que el balance real de víctimas de las lluvias torrenciales que duraron 20 horas era mucho más elevado que lo que el Gobierno había anunciado.
El Ayuntamiento había pedido este martes que los medios de comunicación oficiales se centraran en informaciones positivas, como las actuaciones heroicas de los servicios de emergencia o la solidaridad entre los habitantes de la zona.
Las amenazas de Zhengua no habían conseguido acabar este jueves con las críticas en el portal Sina Weibo, el principal servicio de microblogging chino, pero los censores borraban los mensajes contrarios al Gobierno con rapidez, según France Presse.
“Vivimos de nuevo una época en la que el emperador posee todos los poderes”, comentaba un bloguero. “Esta es una confrontación abierta contra el pueblo”, declaraba otro en respuesta a las palabras del jefe de la policía.
Muchos pequineses han reprochado al Ayuntamiento que no tomara medidas de prevención, pese a que las fuertes tormentas habían sido previstas por los meteorólogos. También han criticado que el sistema de alcantarillado, insuficiente para las lluvias torrenciales, no se haya mejorado mientras que se modernizaban otros aspectos de la ciudad como las redes de metro y se construían rascacielos.
Mientras las críticas a la gestión del Gobierno arreciaban en las redes sociales, las autoridades del distrito de Fangshan, el más afectado por las inundaciones al suroeste de la capital, han anunciado que habían muerto 170.000 animales y que 66.000 casas habían sido destruidas este fin de semana, según el diario de lengua inglesa Global Times.
“Esto es ridículo, el Gobierno consigue contar los animales muertos, mientras que el balance de víctimas humanas sigue en 37 muertos y no ha sido actualizado”, había criticado un habitante de Fangshan citado por el periódico. “Esto demuestra que el Gobierno se preocupa más por las pérdidas económicas que por la vida de la gente”, según él.
Dimite el alcalde de Pekín
El alcalde de Pekín, Guo Jinlong, presentó ayer su dimisión, que fue aceptada por el Comité Permanente del Congreso de la Municipalidad de Pekín. La sustitución de Jinlong estaba prevista desde que el pasado 3 de julio fue nombrado secretario general del Partido Comunista de China en Pekín, un cargo de mayor relevancia que el de la alcaldía de Pekín. Ha sorprendido, sin embargo, que dimitiera ahora, cuando las autoridades locales están siendo muy criticadas por su gestión de las inundaciones.