Los camioneros bloquean las calles contra las liberalizaciones de Monti
Se prevé que las movilizaciones se extiendan a otros sectores afectados por la reforma
Los camioneros se han echado este lunes a la calle para bloquear con sus vehículos algunas de las principales carreteras italianas contra las reformas liberalizadoras que ha puesto en marcha el Gobierno tecnócrata de Mario Monti. Los taxistas se han sumado a la protesta con una huelga.
Las carreteras y autopistas que conectan la localidad de Giogia Tauro, en Calabria, en el sur del país, con Turín, en el norte, se han visto afectadas por las movilizaciones de camion...
Los camioneros se han echado este lunes a la calle para bloquear con sus vehículos algunas de las principales carreteras italianas contra las reformas liberalizadoras que ha puesto en marcha el Gobierno tecnócrata de Mario Monti. Los taxistas se han sumado a la protesta con una huelga.
Las carreteras y autopistas que conectan la localidad de Giogia Tauro, en Calabria, en el sur del país, con Turín, en el norte, se han visto afectadas por las movilizaciones de camioneros, que se quejan de un aumento del precio de los carburantes que dejó sin transportes la semana pasada a Sicilia.
La previsión es que las movilizaciones contra las reformas aumenten en los próximos días, ya que las iniciativas afectan a varios sectores corporativos, como en el caso del ferroviario, de las gasolineras, las farmacias, los abogados y los notarios.
En declaraciones a la televisión pública, la ministra del Interior, Annamaria Cancellieri, ha asegurado que el Gobierno seguirá "con mucha atención" el desarrollo de las manifestaciones. "No podemos descartar que este descontento se convierta en protestas de diferente tipo", ha afirmado Cancellieri, ante la posibilidad de que las movilizaciones pasen a ser violentas.
Las manifestaciones denotan el creciente rechazo a los planes de recorte y a la liberalización del transporte aprobados por el Gobierno en la reunión del Consejo de Ministros del pasado viernes para impulsar la competitividad de la economía italiana y la creación de empleo.
La liberalización del transporte se suma a los recortes económicos y a las subidas de impuestos que fueron aprobadas por el Parlamento el pasado mes de diciembre, entre las que se incluye el alza de la gasolina en más de ocho céntimos de euro, hasta alcanzar los 1,76 euros por litro, y el gasóleo en más de once céntimos, para situarse en los 1,71 euros.
Estas reformas económicas han sido enmendadas en su trámite parlamentario y todavía deben ser aprobadas por el Parlamento, mientras crece la oposición de los grupos políticos en las cámaras, lo que complica su tramitación.
Los camioneros que han salido este lunes a la calle para protestar reclaman al Gobierno de Monti que impulse la lucha contra los transportistas ilegales.
Los taxistas también han protagonizado movilizaciones contra el aumento de licencias y este lunes han realizado una huelga que ha causado problemas en el aeropuerto de Fuimicino, en Roma, y en las estaciones de trenes.