Miles de iraquíes protestan contra Al Yazira por difundir "difamaciones" contra un líder chií
Los manifestantes acusan a la cadena de "baazista, terrorista y enemiga del Islam"
Miles de chiíes iraquíes han salido hoy a las calles de Bagdad y Najaf para protestar contra Al Yazira, en uno de cuyos programas ser vertieron "difamaciones" contra el ayatollah Ali Sistani, el más prestigioso de sus jefes religiosos. La enfurecida turbamulta ha repetido consignas contra la cadena televisiva, con sede en Qatar, a la que ha acusado de "baazista, terrorista y enemiga del Islam".
Los manifestantes portan retratos del líder chií y grandes pancartas en las que piden el boicot a la cadena, según informa el corresponsal de AFP desde la zona. La marcha se produce en vísperas d...
Miles de chiíes iraquíes han salido hoy a las calles de Bagdad y Najaf para protestar contra Al Yazira, en uno de cuyos programas ser vertieron "difamaciones" contra el ayatollah Ali Sistani, el más prestigioso de sus jefes religiosos. La enfurecida turbamulta ha repetido consignas contra la cadena televisiva, con sede en Qatar, a la que ha acusado de "baazista, terrorista y enemiga del Islam".
Los manifestantes portan retratos del líder chií y grandes pancartas en las que piden el boicot a la cadena, según informa el corresponsal de AFP desde la zona. La marcha se produce en vísperas de las elecciones legislativas y justo cuando las diferencias sectarias entre suníes y chiíes constituyen el eje de las preocupaciones en el país.
En la ciudad santa de Nayaf, a 160 kilómetros al sur de la capital, diez camiones repletos de manifestantes han recorrido las calles, pese a la prohibición de que circulen vehículos como medida de seguridad ante los comicios de mañana. Cientos de personas se les han unido al grito de "Sayed Ali, todo el mundo está contigo", en referencia al ayatollah Sistani.
La chispa que encendió la mecha de la protesta chií fue la intervención en el programa a contra corriente del escritor iraquí residente en Londres Fadel Al Rubaye, quien acusó a los jefes religiosos chiíes de haber "favorecido la entrada de las tropas estadounidenses en Irak" y de pedir que no se las combatiera. Al Rubaye hizo estas declaraciones en el transcurso de un debate contra el político chií Fouad Samaui.
Al Yazira, acusada regularmente por las autoridades iraquíes de favorecer la insurgencia, no está autorizada, por decisión del Gobierno de Bagdad, de tener corresponsales en Irak.