La oposición sale a las calles de El Cairo en la mayor manifestación contra Mubarak
La movilización ha sido convocada por el Movimiento Egipcio por el cambio
Una manifestación de protesta contra el régimen de Hosni Mubarak ha salido este miércoles a las calles de El Cairo con velas encendidas en señal de duelo y el silencio como grito de protesta. Los activistas, entre ellos muchas mujeres, han protestado pidiendo la dimisión del ministro de Interior por la brutalidad policial sobre los manifestantes el pasado 25 de mayo, cuando se celebró el referéndum sobre la constitución.
Entre los cientos de manifestantes ha destacado la presencia de Ayman Nour, presidente del último partido opositor nacido en Egipto y uno de los principales mentores de...
Una manifestación de protesta contra el régimen de Hosni Mubarak ha salido este miércoles a las calles de El Cairo con velas encendidas en señal de duelo y el silencio como grito de protesta. Los activistas, entre ellos muchas mujeres, han protestado pidiendo la dimisión del ministro de Interior por la brutalidad policial sobre los manifestantes el pasado 25 de mayo, cuando se celebró el referéndum sobre la constitución.
Entre los cientos de manifestantes ha destacado la presencia de Ayman Nour, presidente del último partido opositor nacido en Egipto y uno de los principales mentores del Movimiento Egipcio por el Cambio. "Creo que estamos en el camino de la victoria. Al principio, el régimen intentó suprimir la plataforma, pero ahora ya no puede y tiene que comenzar a adaptarse", ha declarado un acalorado Nour, rodeado por decenas de seguidores. Los manifestantes se han congregado, caída la noche, en uno de los lugares más emblemáticos de El Cairo, la tumba de Saad Zaglul, uno de los primeros líderes del partido opositor Wafd y héroe del nacionalismo egipcio.
El único incidente durante la protesta ha sido un conato de enfrentamiento entre un grupo de jóvenes manifestantes que gritaba "libertad, Mubarak escucha al pueblo", y otros más veteranos que les recordaban que la concentración era silenciosa. Al final de la movilización, un grupo se acercó a las vallas de seguridad para increpar a los antidisturbios y sobre todo a los civiles que la fuerzas de Seguridad emplea como posible elemento de choque y coacción a los opositores.