Al menos 130 muertos en un incendio premeditado en el metro de una ciudad de Corea del Sur

Detenido un hombre de 57 años con antecedentes psiquiátricos como responsable de la tragedia

ELPAIS.es

El incendio provocado por un perturbado mental en un vagón del metro de Daegu, a unos 200 kilómetros al sur de la capital surcoreana, adquiere tintes dantescos. Según los medios de información locales, los bomberos han descubierto en el interior de los vagones siniestrados otros cien muertos, que se suman a los 47 fallecidos oficiales de las primeras horas.

Según el último balance de la célula de crisis habilitada por el Gobierno local de Daegu por el momento hay 52 víctimas mortales confirmadas, 171 personas desaparecidas y 138 heridos, que han sido ingresados en nueve hospitales disti...

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El incendio provocado por un perturbado mental en un vagón del metro de Daegu, a unos 200 kilómetros al sur de la capital surcoreana, adquiere tintes dantescos. Según los medios de información locales, los bomberos han descubierto en el interior de los vagones siniestrados otros cien muertos, que se suman a los 47 fallecidos oficiales de las primeras horas.

Según el último balance de la célula de crisis habilitada por el Gobierno local de Daegu por el momento hay 52 víctimas mortales confirmadas, 171 personas desaparecidas y 138 heridos, que han sido ingresados en nueve hospitales distintos. Otros medios, como los diarios Korea Herald y Korea Times hablan de 130 muertos y un centenar de heridos.

Dos horas después de declararse el fuego, la policía surcoreana ha detenido al presunto autor del incendio, una persona de 57 años que también resultó con quemaduras por lo que fue trasladado a un centro hospitalario.

Las primeras investigaciones adelantadas por fuentes policiales indican que el sospechoso podría haber provocado el incendio como venganza contra una clínica de medicina oriental que le operó en 2001 tras sufrir un ataque cerebral, y que le provocó graves secuelas físicas. Al parecer, el individuo había comentado en varias ocasiones con su familia que tenía la intención de perpetrar un ataque contra la clínica.

Una botella cargada de líquido inflamable

Testigos presenciales han indicado que, hacia las diez menos cinco de la mañana (2.00 de la madrugada en España) cuando el convoy llegaba a una de las estaciones, el individuo sacó de su mochila una botella rellena de material inflamable que empezó a arrojar por el suelo. Antes de que ninguna de las personas que le rodeaban pudieran reducirle, encendió la botella y la lanzó contra el suelo, por lo que el vagón prendió fuego de inmediato.

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"Cuando el tren llegó a la estación y se abrieron las puertas, un hombre vestido con ropa deportiva encendió una botella verde de leche con un mechero, la lanzó en el interior del vagón y se escapó corriendo", ha explicado uno de los testigos. En un primer momento sólo se incendió el tren en el que viajaba el sospechoso, pero las llamas se extendieron rápidamente a un segundo convoy que llegó poco después a la estación en dirección contraria.

Kim Bok Sun ha explicado que su hija Kang Yeon Ju, de 21 años de edad, se encontraba en el tren incendiado y llamó por teléfono. "Sólo pudo decirme que había fuego y que la puerta del tren no se abría, así que le dije que rompiera alguna ventana para salir. Volví a llamarla después pero ya no cogió el teléfono".

Tras la tragedia, el servicio de metro ha sido suspendido en toda la ciudad. De hecho, las principales ciudades surcoreanas han realizado inspecciones de emergencia en sus redes de metro. Sólo en Seúl las autoridades han movilizado a un millar de funcionarios para proceder a la revisión de las 280 estaciones de la capital y buscar paquetes sospechosos.

Imagen del vagón de metro donde se ha originado el fuego, totalmente carbonizado.AP
Los bomberos sacan varios cuerpos del interior del metro.AP

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