De rodillas y con la espada sobre los hombros: Carlos de Inglaterra nombra caballero a Lewis Hamilton
El corredor de Fórmula 1 fue premiado hace casi un año por sus servicios al deporte británico, y hoy ha sido nombrado oficialmente en Windsor
Hace casi 12 meses, el 31 de diciembre de 2020, como es habitual cada vez que acaba el año, la reina Isabel II hizo pública la lista de personas a las que había decidido conceder un título nobiliario. Y en esa lista, además de jefes de seguridad nacional, responsables de comercio exterior o personas dedicadas a la lucha contra la covid o a la ayuda humanitaria, destacaba un nombre: el de Lewis Hamilton. “Por sus servicios al deporte del motor” se le premiaba nada menos que con su nombramiento como caballero, la máxima distinción a la que se puede acceder.
El momento ha llegado. Hamilton...
Hace casi 12 meses, el 31 de diciembre de 2020, como es habitual cada vez que acaba el año, la reina Isabel II hizo pública la lista de personas a las que había decidido conceder un título nobiliario. Y en esa lista, además de jefes de seguridad nacional, responsables de comercio exterior o personas dedicadas a la lucha contra la covid o a la ayuda humanitaria, destacaba un nombre: el de Lewis Hamilton. “Por sus servicios al deporte del motor” se le premiaba nada menos que con su nombramiento como caballero, la máxima distinción a la que se puede acceder.
El momento ha llegado. Hamilton, de 36 años, ya era Miembro del Imperio Británico (se puede, en este orden, tener el título del imperio británico, ser miembro, ser oficial o ser comandante), una distinción que la mismísima Isabel II le colocó en la solapa en marzo de 2009. Pero esta distinción es aún más exclusiva e importante. Si a finales del año pasado se concedieron casi 150 títulos, apenas dos fueron de caballero: el del propio Hamilton y el del director de fotografía Roger Deakins, de 72 años y con más de 170 premios en su haber, entre ellos cinco premios Bafta y dos Oscar de un total de 14 candidaturas.
Casi un año después, por fin ha tenido lugar la ceremonia. El evento ha tenido lugar en un dorado salón del castillo de Windsor, donde el heptacampeón de Fórmula 1 ha recibido el honor de manos del príncipe Carlos. Aunque le haya nombrado formalmente la reina (y el Gobierno británico), la soberana ya no acude personalmente a estas entregas a causa de su salud, algo delicada a sus 95 años.
Con todo el boato, Hamilton ha apoyado la rodilla derecha sobre un escabel dorado de terciopelo rojo. Con traje oscuro, camisa blanca, zapatos negros, un broche a modo de corbata y las características trenzas que luce en los últimos tiempos recogidas en una coleta, el joven inglés se ha arrodillado ante Carlos de Inglaterra, que ha posado una espada sobre su hombro derecho para así investirle caballero del imperio británico. Tras la concesión del título, el corredor ha posado junto a su madre, Carmen Larbalestier (ahora apellidada Lockhart, por su nuevo matrimonio), en el patio del castillo, llevando al cuello una cinta roja, la orden que acredita su flamante estatus. Los padres del deportista se separaron cuando él tenía apenas 12 años, y ella decidió renunciar a vivir con su hijo para que él siguiera su carrera deportiva en Londres. También sigue manteniendo una buena relación con su madre, que fue además el iniciador e impulsor de su carrera y su manager hasta el año 2010.
Esta es la primera ocasión en que se puede ver a Hamilton tras perder, el pasado domingo contra Max Verstappen, el que habría sido su octavo título mundial como campeón mundial de Fórmula 1.