María Pombo, José Bono Jr. o Jaime de Marichalar: ‘influencers’ y aristócratas, de boda en Galicia
El enlace de la ‘influencer’ Lucía Bárcena y el empresario Marco Juncadella reúne en Pontevedra a habituales del papel cuché junto a estrellas de las redes sociales.
El espectacular Pazo de Oca, en la localidad pontevedresa de A Estrada, fue el escenario escogido por Lucía Bárcena y Marco Juncadella para darse el “sí, quiero” en la tarde del sábado. Ella, una de las influencers más seguidas del país en Instagram, es hija del abogado Ramón Bárcena y él, jinete y empresario, es hijo de la princesa alemana Cristina Hohenlohe y del empresario textil y expilo...
El espectacular Pazo de Oca, en la localidad pontevedresa de A Estrada, fue el escenario escogido por Lucía Bárcena y Marco Juncadella para darse el “sí, quiero” en la tarde del sábado. Ella, una de las influencers más seguidas del país en Instagram, es hija del abogado Ramón Bárcena y él, jinete y empresario, es hijo de la princesa alemana Cristina Hohenlohe y del empresario textil y expiloto automovilístico José María Juncadella. Por ello, su boda congregó a invitados muy diversos de ambos mundos: de prescriptoras como María Pombo, Mery Turiel o María Fernández-Rubíes a Jaime de Marichalar o José Bono Jr.
La novia, que se hizo famosa en la web con su blog Babibalu y hoy acumula 360.000 seguidores en su cuenta de Instagram, llegó a la iglesia de San Antonio de Padua del brazo de su padre. Para la ocasión lucía un vestido de corte retro, confeccionado por el diseñador español Jorge Acuña, de manga larga y cuello alto. Las creaciones de Acuña son habituales sobre la alfombra roja, recientemente ha vestido a actrices como Marta Nieto, Bárbara Lennie o Paula Echevarría. La novia completaba su estilismo nupcial con un moño bajo de bailarina, velo largo y unos pendientes desmontables de Suárez, en oro blanco, con 32 diamantes y dos perlas australianas.
El novio vistió chaqué azul marino de Absolute Bespoke y llegó junto a su madre, con vestido azul drapeado, mantilla, guantes largos y pendientes y pulsera de zafiros.
Al salir del templo, la pareja se marchaba en el coche conducido por Juncadella, aunque al convite ambos llegaron a lomos de un caballo, como han retransmitido en sus stories de Instagram invitados como Pablo Castellano, uno de los testigos del novio. Tanto la ceremonia religiosa como el banquete posterior se celebraron en el pazo de Oca, que fue construido entre los siglos XVIII y XIX y está catalogado como Bien de Interés Cultural del patrimonio español. Actualmente es propiedad de los duques de Medinaceli, familiares del novio.
La celebración, que se ha alargado durante todo el fin de semana, comenzó el viernes, cuando muchos de los invitados asistieron a una fiesta previa en el Gran Hotel La Toja. De toda la logística se ha encargado la organizadora de bodas Petite Mafalda.
La prescriptora María Pombo, amiga de la novia, acudió con vestido de Redondo Studio verde esmeralda, con mangas abullonadas y aberturas, que combinó con alpargatas con cuña.
Su hermana, Marta Pombo, con vestido estampado de manga larga, de Matelier Design, y moño alto.
La también influencer María Fernández-Rubíes escogió un vestido de largo a media pierna y escote corazón, de Redondo Studio, que lució con una melena extra lisa de raya en medio.
La madre de la novia lució un vestido de falda tableada de Coosy y complementos plateados.
Mery Turiel compartió en su cuenta de Instagram que decidió qué ponerse la noche anterior: un conjunto con flores bordadas en lentejuelas, de la tienda en línea de bajo coste Asos, compuesto por falda y chaqueta corta.