El Ayuntamiento de Madrid reinstala la placa de Largo Caballero que retiró a martillazos
El Ejecutivo municipal cumple con la sentencia que obliga a reponer la pieza, mientras la oposición critica su falta de transparencia y que no se trata del mármol original
La placa de Largo Caballero ha vuelto a la fachada de la Junta Municipal de Chamberí cinco años después de que se retirara a martillazos tras una votación en el pleno municipal que contó con el apoyo de PP, Ciudadanos y Vox y cuya nulidad fue confirmada por el Tribunal Supremo el pasado julio. La pieza que homenajea al histórico dirigente socialista ha sido colocada este jueves por la mañana, según han detallado fuentes del Área de Cultura, Turismo y Deporte. Esto ha suscitado las críticas de la oposición, que considera que la instalación se ha hecho “a escondidas”, ya que el Ayuntamiento no ha anunciado el movimiento, a lo que se une que desde el PSOE de Chamberí afeen que no se haya restaurado el mármol original.
Ha sido el portavoz en funciones de Más Madrid, Eduardo Rubiño, quien se ha hecho eco de la restauración a través de su cuenta de X. “Almeida quiso reescribir la historia y destrozar a martillazos la memoria de Largo Caballero pero la movilización ciudadana y el Supremo le pararon los pies. Tras años de opacidad y resistencias, la placa ha sido restaurada y repuesta en su sitio. Toda una victoria democrática”, ha escrito Rubiño junto a una fotografía de la pieza ya colocada.
Posteriormente, el portavoz de Más Madrid ha arremetido contra el gobierno municipal por reponer la placa “a escondidas” y ha reclamado una reinauguración pública. “Exigimos que el alcalde haga un acto público institucional de reinauguración de la placa, un acto de encuentro, de desagravio ante el lamentable espectáculo que dio el Ayuntamiento y que sirva esto para la reparación de la memoria democrática de nuestra ciudad” ha detallado Rubiño en declaraciones a los medios de comunicación.
La portavoz del PSOE madrileño, Reyes Maroto, también ha criticado a Almeida por una reposición que, según la dirigente socialista, se ha hecho con “nocturnidad y alevosía”. “La sentencia fue clara, aquella retirada fue ilegal, sin embargo, la reposición se ha hecho de la misma manera, sin transparencia y sin avisar ni a la Fundación Largo Caballero, ni a UGT, ni al PSOE, que fuimos quienes reclamamos esta injusticia”, ha afirmado Maroto antes de pedir “respeto” a la memoria democrática y definir la placa como “un símbolo de la lucha por la libertad y los derechos de los trabajadores”.
Una placa nueva
El portavoz del Grupo Municipal socialista en Chamberí, Iñaki Prieto, ha ido un paso más allá y, tras manifestar su “orgullo” por la vuelta de la placa, ha reclamado que la pieza no ha sido restaurada, sino que se trata de una nueva. “En realidad esta no es la placa, es una copia. La piedra no ha sido restaurada, sino hecha nueva, por lo que la destrucción de la obra de arte protegida continúa. No han querido que queden para el futuro las cicatrices de los martillazos de la ultraderecha”, ha manifestado sobre la obra del escultor Pepe Noja, compuesta por una estructura de bronce y unas letras metálicas colocadas sobre el mármol, que tiene carácter protegido.
Desde al Área de Cultura han explicado que la parte de bronce sí ha sido restaurada, mientras que la de mármol es nueva debido a la “imposibilidad de garantizar la estabilidad estructural del conjunto con el uso de los materiales originales”. “Como se ubica en la calle y el nivel de exposición a agentes de degradación es mayor se ha considerado que la única opción para garantizar la preservación del conjunto es el uso de un nuevo soporte”, han detallado.
Este homenaje a Largo Caballero fue retirado a martillazos por dos operarios el 15 de octubre de 2020, coincidiendo con el 151º aniversario del nacimiento del que fuera presidente socialista del Consejo de Ministros durante la Segunda República. El pasado julio, además de confirmar la nulidad de la retirada, el Tribunal Supremo desestimó los recursos de la Asociación Reivindicativa de la Memoria Histórica Raíces y de Vox contra las sentencias previas del Tribunal Superior de Justicia de Madrid. De esta forma, ratificó la obligación de reponer los elementos retirados.