Almeida sobre el pelotazo de las mascarillas: “Elegimos la empresa Leno porque nos garantizaba material de calidad y llegaba en 20 días”

26 días después de que estallara el escándalo y horas después de que el autodenominado “bróker de la carne de cerdo y del pollo”, Luis Medina Abascal, hermano del actual duque de Feria e hijo de Naty Abascal, declarara ante el juez por el conocido ya como pelotazo de las mascarillas ―el caso judicial que investiga una comisión de seis millones de euros sobre una compra de 12 millones por el Ayuntamiento de Madrid en materi...

26 días después de que estallara el escándalo y horas después de que el autodenominado “bróker de la carne de cerdo y del pollo”, Luis Medina Abascal, hermano del actual duque de Feria e hijo de Naty Abascal, declarara ante el juez por el conocido ya como pelotazo de las mascarillas ―el caso judicial que investiga una comisión de seis millones de euros sobre una compra de 12 millones por el Ayuntamiento de Madrid en material sanitario durante la primera ola de la pandemia, cuando fallecían en la capital de España cientos de madrileños cada día― el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, ha comparecido en un pleno extraordinario, a petición de la oposición.

―Buenos días, he dado más de 10 ruedas de prensa. No estoy desaparecido.

Durante más de 15 minutos, el regidor de Madrid, con unos folios en la mano que apenas leyó, desarrolló su argumentario partiendo de una fecha clave: el 10 de marzo de 2020. “Ese día”, observó, “nosotros ya pedimos al ministro de Sanidad poder comprar mascarillas”. Dijo que la respuesta le llegó el 18 de marzo: “Sálvese quien pueda y salga a los mercados. Pues eso, eso fue lo que hicimos”. Almeida ha tratado de poner contexto al caso judicial que ha dinamitado gran parte de su mandato a solo un año de las elecciones autonómicas y municipales. Con el montante económico, los dos comisionistas se compraron decenas de coches, relojes de alta gama, un piso de lujo en Madrid, seis noches de hotel en Marbella a 6.000 euros la noche, un velero...

La versión del regidor es que él no sabía nada hasta hace solo unas semanas. También dijo que desconocía que un primo hermano suyo hubiera hablado por teléfono varias veces con la directora general de alcaldía ―y amiga suya desde hace más de 20 años―, Matilde García Duarte, para pedirle el contacto de la encargada de los contratos. “No tenía ni idea de que mi primo había intervenido”, declaró el alcalde tras conocerse este escándalo. “¿Responsabilidad política? No, hay que entender el contexto”, dijo otro día. El caso está ahora en los tribunales, sin que ningún miembro del Ayuntamiento haya sido investigado. Tampoco su familiar cercano. En cambio, el juez retiró ayer el pasaporte a los dos comisionistas. Así lo había pedido la oposición (Más Madrid, PSOE y el Grupo Mixto) personada en el caso como acusación particular.

Este martes, en el pleno, Almeida ha tratado de contestar a las preguntas de la oposición. “¿Cómo se accede el contrato?”, se ha preguntado Almeida. “Ustedes insisten machaconamente en atacar a mi familiar. Lo que hizo fue facilitar un correo electrónico. Ha quedado acreditado por la Fiscalía que no conocía de nada a Luis Medina, se limitó a eso”. El alcalde ha elaborado un argumentario sin pedir disculpas a los madrileños ―sí lo ha hecho la vicealcaldesa, Begoña Villacís, de Ciudadanos― y atizando cada dos minutos a la oposición y al Gobierno de Pedro Sánchez, a quien ha nombrado hasta ocho veces. “Hicimos el contrato con el marco del Gobierno de la nación”. “¿Dónde está la partida de test que el ministro de Sanidad compró por 55 millones y era inservible?”. Y, ya sí, respondía a una cuestión clave: ¿Por qué se escogió este contrato? “Porque la empresa Leno garantizaba material de calidad y en 20 días. No pagamos ni un euro a Medina [comisionista] ni a Leno [la empresa de Malasia que suministró el material]”. ¿Por qué no lo denunciamos? “Porque no sabíamos el cobro de comisiones”.

Desgaste del PP

Más tarde, con muy pocos aplausos de su bancada en un claro síntoma de que el PP está muy desgastado con este caso, realizó por primera una vez una defensa pública de Elena Collado, la alto cargo municipal que medió con los comisionistas y en el ojo del huracán por una cadena de WhatsApp y por decidir un regalo de 50.000 mascarillas a un hospital madrileño donde trabajaba la mujer de uno de los comisionistas. “Tratan de machacar a Collado”, dijo Almeida. Esta frase provocó una reacción inmediata de aplausos en los ediles de Ciudadanos, primero, y de los populares, después. Inmediatamente, dijo: “Antes de que se vaya ella del Ayuntamiento, me voy yo”. Ya en el turno de réplica, fue durísimo y bronco contra toda la oposición, a excepción de Vox. Atacó a todos, especialmente a Rita Maestre, portavoz de Más Madrid:

―Mientras usted asaltaba capillas, yo aprobaba las oposiciones de abogado del Estado.

El caso de las mascarillas ha abierto una brecha más en el palacio de Cibeles, donde las crisis se le acumulan al PP a menos de un año para las elecciones municipales. El foco del día a día se ha desvirtuado por completo. Por más que Almeida inaugure obras, haga entrevistas a medios afines, acuda a eventos o anuncie pequeñas reformas, no logra marcar la agenda como antes. Los escándalos se imponen sobre la gestión diaria. Nadie duda ya de que Almeida atraviesa ahora el peor momento de su mandato. “El desgaste es evidente”, admite un alto cargo del Ayuntamiento.

El Grupo Mixto pide el cese de la edil de Hacienda

“¿Por qué ocultaron el caso durante más de un año y medio? Por eso convocamos este pleno”, dijo la portavoz de Más Madrid, Rita Maestre. “El alcalde no responde a estas preguntas, pero ha disparado contra todo el mundo. Le persigue la Fiscalía, Sánchez, los medios de comunicación. En tres años ha traído usted todos los viejos vicios del PP. Va a acabar como Aguirre y como Rajoy, hundido en los escándalos y derrotado en las urnas”. Maestre criticó también que Almeida no hiciera ni una sola mención a Alberto Luceño, el otro comisionista investigado en la trama.

“El PP ha vuelto a entender las instituciones como suyas”, resaltó Mar Espinar, la portavoz del PSOE. “No tiene dignidad, demuestre que tiene respeto. No es justo lo que están haciendo el Ayuntamiento. Es sorprendente que el alcalde de Madrid se deje timar 11 millones de euros, que iban a ser 11 porque devolvieron cuatro. Me sigue pareciendo sorprendente que no se enterara de nada. Su trabajo es evitar que su partido venga a enfangarlo todo”.

El Grupo Mixto, formado por tres exconcejales de Más Madrid, exigió la dimisión de la concejal de Hacienda, Engracia Hidalgo. “Es amiga mía y lo sabe, pero debe dimitir”, dijo el portavoz Luis Cueto. Vox, que nuevamente deja a Javier Ortega Smith al margen, habló por boca de Pedro Fernández, el número dos del partido en la capital. “En Madrid sobran los Medinas, Piqués, Rubiales y Kosmos. Estos personajes deberían tener prohibida la entrada en este Ayuntamiento y la contratación, para disuadir a los comisionistas corruptos y para proteger a los comisionistas honrados”.

Al concluir, eso sí, Almeida aglutinó los aplausos de Ciudadanos, descartando cualquier indicio de crisis de Gobierno o mociones de censura, que aunque se habla y se habla, solo son eso: habladurías.

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