El alcalde Almeida aprueba su polémica ordenanza del taxi y elimina los foros locales de Manuela Carmena

Una hora después de que finalizara el nuevo horario de planchado en España comenzaba un pleno extraordinario en el Ayuntamiento de Madrid. El calendario de junio ha arrancado en la capital de España con la aprobación de dos nuevas ordenanzas: una sobre el nuevo reglamento de los 21 distritos del Ayuntamiento y otra, más polémica, sobre los taxis. La mañana se inició con dos grandes ausencias. El alcalde, ...

Una hora después de que finalizara el nuevo horario de planchado en España comenzaba un pleno extraordinario en el Ayuntamiento de Madrid. El calendario de junio ha arrancado en la capital de España con la aprobación de dos nuevas ordenanzas: una sobre el nuevo reglamento de los 21 distritos del Ayuntamiento y otra, más polémica, sobre los taxis. La mañana se inició con dos grandes ausencias. El alcalde, José Luis Martínez Almeida (PP), estaba en un desayuno informativo con el jefe del PP, Pablo Casado, y la vicealcaldesa, Begoña Villacís (Cs), en una entrevista en TVE. Lo primero es lo primero. En los corrillos periodísticos de los pasillos se barruntaba un pleno lleno de bajas. Tampoco estaba el portavoz socialista, Pepu Hernández. A las 9.14, sin embargo, Almeida apareció sonriente y por sorpresa por la puerta con un traje azul. Y a las 9.22, la vicealcaldesa. De Hernández, ni rastro.

― Buenos días.

El secretario del pleno tomó la palabra. Federico Andrés López lleva nueve años dando fe en los plenos de la capital. Desde una esquina de la cámara, con gafas rojas y rodeado de libros de Derecho, su voz plana es la que rige todas las ordenanzas municipales. Un árbitro del Estado en mayúsculas. “Ahora mismo están vivas 21 enmiendas de Más Madrid y se han presentado tres enmiendas transaccionales”, dijo nada más tomar la palabra. El pleno, por tanto, tomó cuerpo.

PP, Ciudadanos y Vox votaron a favor de eliminar los Foros Locales, los espacios de participación entre vecinos que aprobó Manuela Carmena hace tres años. Hay uno en cada uno de los 21 distritos de la ciudad. ¿Qué pasa ahora? Que se llamarán Consejos de Proximidad. El argumento de PP y Ciudadanos es aligerar estas juntas vecinales. Qué es eso de discutir hasta altas horas. La realidad, dice la oposición, es que quieren borrar cualquier rastro del anterior Ejecutivo. “Con esto nos hemos ahorrado 500.000 euros en participaciones sectarias, ¿eh?”, dijo la concejala de Ciudadanos Silvia Saavedra para argumentar su propuesta. “¡Los plenos tienen que ser amigables!”, añadió. Ahí quedó eso.

Javier Ortega Smith, con un tono de sargento, agarró el micrófono y dijo: “Hoy es uno de esos días en lo que estamos orgullosos”, observó el concejal de Vox. Y habló de Cataluña, de la “china comunista” y de “los rojos”. “El comunismo es el pasado. ¿Saben lo que están esperando los chinos y venezolanos? Abandonar las ideas de izquierdas. Hoy dejamos atrás los chiringuitos financiados por la izquierda”. Los principales problemas de Madrid. Tras sus cuatro minutos de exposición, agarró el teléfono móvil y se puso a hablar por teléfono en el pleno. Así estuvo la mayor parte del tiempo.

Ciudadanos: “Esto son lentejas”

PSOE y Más Madrid se mostraron radicalmente en contra de la eliminación de los foros. “Los señores de Ahora Madrid, ahora llamados Más Madrid, no lo hicieron nada bien”, dijo la edil de Ciudadanos. “¡Ustedes de ejecución presupuestaria no pueden hablar!”. La vicealcaldesa Villacís aplaudió a rabiar, como si fuera la regidora de un programa de televisión. El resto de sus concejales entendió las palmadas y se sumaron de inmediato. No así los del PP, que estaban mirando el móvil y que, al ver de dónde venían los aplausos, se sumaron con tres rápidos. “Muy bien”, dijo Villacís en voz alta al ver que sus chicos de Ciudadanos habían logrado al fin algo del PP. Tras los aplausos, la edil de Ciudadanos fue directa hacia la bancada de la izquierda: “Esto son lentejas. O las toman o las dejan”. Y las dejaron. Y la normativa quedó aprobada.

A las 11.05 se dio paso al otro punto ardiente del día. La nueva ordenanza de taxis en Madrid. La última se aprobó en 2012. El objetivo del PP y de Ciudadanos es que un sector que afecta a más de 17.000 familias en Madrid pueda competir con las licencias VTC. Es decir, con Cabify y Uber. El sector del taxi se ha mostrado en contra durante estos días. La nueva normativa prohibirá obtener licencia a condenados por delito sexual o contra la infancia. Además, cuando un viajero contrate un servicio de taxi por plaza, facilitará el punto de origen y destino del trayecto, la fecha y hora de su realización, el número de plazas que desea contratar y deberá conocer el precio antes de su realización. Los taxistas también deberán llevar ropas similares: camisa o niquis lisos en los que se podrá ver un pequeño logo de la asociación a la que pertenezcan, acompañado de un pantalón largo o falda. Los zapatos, eso sí, deberán ser oscuros. A esto se suma el precio cerrado.

El sector del taxi se ha mostrado en contra de la nueva ordenanza estos días

Como muy tarde, la nueva ordenanza entrará en vigor la próxima semana. Con esta medida, la oposición considera que el sector del taxi se ha precarizado. “Ustedes no traen justicia ni soluciones. Este sector agoniza y lo están precarizando”, observó Ignacio Benito, del PSOE. “El problema del sector del taxi”, contestó el edil del PP y promotor de la ordenanza, Borja Carabante, “es que no le hemos dotado de nuevas herramientas y con esto se fomenta la movilidad. Queremos que se fomenten los taxis eléctricos. Queremos que esta transición energética no la hagan solos. No pueden ser ajenos a la revolución tecnológica”. La normativa quedó aprobada con los votos de Vox. Carabante recibió los aplausos de Ciudadanos y populares. Y Almeida, a la salida, dijo: “Preparamos a Madrid para el futuro”. Y la Federación del Taxi, mientras tanto, ya ha anunciado que la impugnará.

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