El rescate de una memoria anónima sobre el escenario
Un fajo de cartas encontrado en un mercadillo inspiró ‘Homenaje a una desconocida’, montaje candidato a los premios Max de teatro que llega a la madrileña sala Cuarta Pared
Cristina Correa paseaba por un mercado en la Plaza de Tapineria, en Valencia, cuando le llamó la atención un pequeño fajo de postales de hoteles norteamericanos con mensajes amorosos y cotidianos dirigidos a una tal Carmen Muñoz, a finales de los años cincuenta. Compró las postales, junto con algunas fotos y muchas cartas, y quedó fascinada con la historia que en ellas se desenlazaba. Junto a su compañera y amiga, Desirée Belmonte, decidieron emprender una búsqueda para armar la biografía de aquella mujer que empezaron a conocer a través de su correspondencia. El proceso fue largo y lleno de s...
Cristina Correa paseaba por un mercado en la Plaza de Tapineria, en Valencia, cuando le llamó la atención un pequeño fajo de postales de hoteles norteamericanos con mensajes amorosos y cotidianos dirigidos a una tal Carmen Muñoz, a finales de los años cincuenta. Compró las postales, junto con algunas fotos y muchas cartas, y quedó fascinada con la historia que en ellas se desenlazaba. Junto a su compañera y amiga, Desirée Belmonte, decidieron emprender una búsqueda para armar la biografía de aquella mujer que empezaron a conocer a través de su correspondencia. El proceso fue largo y lleno de sorpresas, pero al final quedó todo plasmado en una obra teatral, documental y autobiográfica; la marca de la casa de Belmonte. El producto, que se vive como el relato de una anécdota salpicada de vídeos, interpretaciones y objetos, se llama Homenaje a una desconocida y se presenta en Madrid por primera vez en tres funciones, entre el 4 y el 6 de febrero, en la sala Cuarta Pared.
Las dos amigas -que se conocieron hace casi 20 años en el grupo de teatro de la Universidad de Valencia- pasaron dos años en el proceso de investigación y montaje de la obra, que en 2020 fue finalista en los Premios Max a Mejor Espectáculo y Autoría Revelación. Todo comenzó una tarde en la casa de Correa, cuando Belmonte la visitaba pues estaba postrada por una ciática. Decidieron empezar a leer las cartas, que llevaban meses en una caja, y enseguida su imaginación comenzó a maquinar. Sin embargo, se dieron cuenta de que querían saber qué había sido en realidad de la vida de una mujer que daban por fallecida. “En ese sentido, este es un homenaje a la vida de cualquiera a través de ella y de sus cartas, para decir que la vida importa aunque se haya quedado abandonada en un mercado”, cuenta Correa.
La investigación tendría como objetivo final que la historia de Muñoz y el relato de dos amigas en busca de la memoria de una mujer del siglo pasado terminaran en una obra de teatro. Pero no sería una puesta en escena tradicional. “El punto es exponer una historia y también lo que yo he vivido durante el proceso. La dramaturgia cabalga esos dos relatos”, explica Belmonte. Esto es lo que ella misma ha denominado “teatro documental autobiográfico” y es lo que produce desde el 2010 con su compañía, La Catrina.
En Homenaje a una desconocida Belmonte y Correa, que trabaja como guionista en el programa de televisión El Hormiguero, intercalan la historia de Carmen Muñoz con el relato de la búsqueda, que está grabada completamente. “Hay partes de mi diario que cuento al público en escena. No hay personajes porque lo que estoy contando es la vida real, aunque sí me gusta introducir otros elementos narrativos. Hago flashbacks y proyecto una entrevista. También trabajo con objetos que han hecho parte de la investigación”, cuenta Belmonte. No obstante, en la obra de teatro también hay interpretación, pues en ciertos momentos reproducen un diálogo entre Carmen y su marido que se da en las cartas. “Pero es todo muy natural, no nos vestimos de Carmen Muñoz, ni ponemos voz de hombre cuando habla, Antonio, su marido”, aclara Belmonte.
Así, se cuenta un proceso en primera persona y, a la vez, se relata la vida de alguien a través de la lectura de algunos de sus intercambios más íntimos: las cartas a su pareja. “Intuimos que Carmen tenía mucha personalidad viendo cómo contaba las cosas cotidianas, porque ella estaba con los críos todo el día. Era una persona que se notaba que tenía carácter, muy categórica. Él era una persona más cariñosa, pero se les veía que se querían un montón”, relata Correa. Esa primera imagen que formaron se fue completando a medida que descubrían más sobre Muñoz. Había estudiado Bellas Artes con más de 50 años y había sido una de las fundadoras del Grup Llum, un grupo de cinco pintoras valencianas con las que había llegado a exponer en distintos países de Europa y Latinoamérica.
Sin embargo, la búsqueda traería una enorme sorpresa que daría una dimensión nueva a la historia. Carmen Muñoz seguía viva. Tenía 94 y vivía en una residencia en La Eliana, un pueblo a 25 kilómetros de Valencia. “Para mí fue como ir a ver a una estrella de rock. Me había metido en su vida de tal manera que era como un ídolo”, dice Belmonte emocionada al relatar la historia de cuando la conocieron.
Pero aquel primer encuentro no fue muy fructífero. Muñoz había sufrido un ictus, estaba en silla de ruedas, e inevitablemente, tenía días mejores que otros. No obstante, a lo largo de los siguientes meses la visitaron más y confirmaron lo que sabían de la persona que las había obsesionado por tanto tiempo. “Fue maravilloso. Habíamos estado construyendo una biografía de esta persona a través de otras personas, de libros que habíamos encontrado, catálogos de exposiciones, a través de sus amigas. La imagen que teníamos era de una mujer muy cañera, de mucho carácter, que no tenía pelos en la lengua y luego la conocimos y era efectivamente muy así”, cuenta Correa.
En noviembre del año pasado Carmen Muñoz falleció con 96 años, pero la relación que pudieron cultivar con ella las dos creadoras de Homenaje a una desconocida ya forma parte de la historia de sus vidas. Las tres sesiones programadas en la sala Cuarta Pared dan inicio a una gira nacional que harán a través de la Red de Teatros Alternativos a lo largo de 2021. Cada vez que presenten la obra, Muñoz estará allí en el escenario con ellas, en una especie de celebración a la memoria de quien será siempre una inspiración como una mujer aguerrida y decidida.
La obra se presenta a las 20:00 en la Sala Teatro Cuarta Pared este 4, 5 y 6 de febrero. Las entradas se pueden adquirir por 14 euros en la página web.