El tren del folk estadounidense hace parada en Madrid para los más pequeños

CaixaForum presenta un concierto para toda la familia que traza el siglo XX de Estados Unidos repasando sus canciones clásicas

Concierto One, Two, Free… Folk!, el pasado sábado 21 de noviembre en Caixaforum.

El escenario es una estación de tren en algún lugar de Estados Unidos donde los viajeros cantan los clásicos de la música folk anglosajona, mientras en una pantalla detrás de ellos se presentan imágenes de la historia del siglo XX del país norteamericano. Es One, Two, Free… Folk!, un concierto dentro del nuevo ciclo de programación familiar que ofrece Fundación La Caixa, pero que en esta ocasión busca apelar a cualquier persona, con un trasfondo histórico y música elaborada. El espectáculo, que incluye canciones de Bob Dylan, Peter Seeger o Simon and Garfunkel, versionadas con estilos c...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El escenario es una estación de tren en algún lugar de Estados Unidos donde los viajeros cantan los clásicos de la música folk anglosajona, mientras en una pantalla detrás de ellos se presentan imágenes de la historia del siglo XX del país norteamericano. Es One, Two, Free… Folk!, un concierto dentro del nuevo ciclo de programación familiar que ofrece Fundación La Caixa, pero que en esta ocasión busca apelar a cualquier persona, con un trasfondo histórico y música elaborada. El espectáculo, que incluye canciones de Bob Dylan, Peter Seeger o Simon and Garfunkel, versionadas con estilos como el swing, el reggae o el country, se podrá ver en el auditorio del CaixaForum durante los fines de semana: 28 y 29 de noviembre y también el 19 y 20 de diciembre.

Lo que se representa en el concierto es similar al viaje de una moneda, que pasa de bolsillo en bolsillo, por los sombreros de los músicos, el teléfono público, el quiosco, el limpiabotas o la taquilla, para unir a todos los personajes que se pasean por la estación. El gestor cultural de la Fundación La Caixa, Oriol Nicolau, que ha coordinado este montaje, explica cómo el concierto funde los límites entre un concierto y una obra de teatro. “La narrativa que tiene no es propiamente una historia, sino que refleja las cosas que van sucediendo en un día cualquiera en la estación de tren. Llega un tren, el revisor hace sonar su silbato y ahí empieza una canción. Lo que sí cuenta con un hilo argumental es la historia del siglo XX en los Estados Unidos, que se va proyectando en el telón”.

A través de la música, y la historia de fondo, también se reivindican valores universales como la paz y la concordia, los derechos humanos y el respeto al planeta. Pero, según Nicolau, esa no fue la intención desde el principio. “Lo primero fue elegir las canciones, que se seleccionaron por ser las más conocidas y todo el mundo puede cantar. En ese proceso nos dimos cuenta de que las canciones estaban repasando la historia de lo que había sido el siglo XX en Estados Unidos, porque hablan de temas sociales, de temas reivindicativos, de los problemas que había en esos momentos”. Así, las letras sensibles de Bob Dylan, Paul Simon o Joan Baez, entre otros -la banda sonora de una época de cambio profundo en el país-, sirven para contar la historia de un siglo entero.

El concierto tiene el objetivo de crear una comunión entre los espectadores y el escenario, y lo hace de diversas maneras para los diferentes perfiles que tiene en el público. Primero, aunque el espectáculo musical ha tenido un montaje muy cuidado, los siete músicos presentan todo como si fuera improvisado -las pruebas de sonido, las afinaciones vocales y las técnicas de sonorización se muestran en directo-, y así apelan a la participación de los más pequeños. Para los adultos son las canciones, tan conocidas, las que los empujan a unirse cantando y aplaudiendo.

En las presentaciones que ha habido hasta ahora el público “conectó totalmente”, según Nicolau. El espectáculo se estrenó en Tarragona hace un mes y luego también pasó por Sevilla, donde las entradas se vendieron muy bien. “El espectáculo llega a Madrid rodadito y más pulido después de las primeras presentaciones”, señala el gestor de la fundación. El plan es que One, Two, Free… Folk! pase por los ocho CaixaForum del país en los próximos meses, adaptándose a las medidas de seguridad de cada comunidad en la que se presente.

En la capital la sala donde se presenta, el Auditorio del CaixaForum, tendrá un aforo de 99 personas, 40% de su capacidad en condiciones normales. Hasta ahora se han vendido casi todas las entradas para las primeras fechas ya. “Eso es una buena señal para la cultura. La gente tiene ganas de ir a los teatros y a los auditorios a disfrutar un poco de una normalidad”, reflexiona el gestor de la fundación. Tal vez es que la invitación de montarse en el tren de los clásicos del folk es demasiado tentadora.

Las entradas se pueden adquirir en la página web del CaixaForum.

Sobre la firma

Más información

Archivado En