La nieve en primavera sorprende a un Madrid confinado
A primera hora de la mañana han caído algunos copos en zonas altas y periféricas de la ciudad, aunque no ha llegado a cuajar
Una tímida nevada ha sorprendido a Madrid en el inicio de la primavera y a finales de la segunda semana de confinamiento por el coronavirus. A primera hora de la mañana de este viernes han caído algunos copos en zonas altas y periféricas de la ciudad, aunque no ha llegado a cuajar.
La causa de esta nieve en cotas bajas, explica por teléfono Beatriz Hervella, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), es la entrada de una masa de aire muy frío procedente de Escandinavia. La cota ha arrancado el día en el sistema ...
Una tímida nevada ha sorprendido a Madrid en el inicio de la primavera y a finales de la segunda semana de confinamiento por el coronavirus. A primera hora de la mañana de este viernes han caído algunos copos en zonas altas y periféricas de la ciudad, aunque no ha llegado a cuajar.
La causa de esta nieve en cotas bajas, explica por teléfono Beatriz Hervella, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), es la entrada de una masa de aire muy frío procedente de Escandinavia. La cota ha arrancado el día en el sistema Central e Ibérico en 700/800 metros, pero está subiendo muy rápidamente. Al mediodía, se sitúa ya en 1.000 metros y por la tarde, en 1.200.
“No es probable que se vean copos a partir del mediodía”, puntualiza Hervella, que añade que era una situación prevista y que en ningún caso se esperaba una gran nevada. La nieve dará paso a lluvias débiles, sobre todo en el sureste de la comunidad.
“No nieva nunca y tiene que hacerlo ahora, en primavera y cuando estamos confinados”, “nieva en Madrid y solo podemos ver por la ventana”, “nieva en Madrid y ayer teníamos un sol radiante”, se quejaban los madrileños en Twitter. Efectivamente, en Madrid es raro que nieve. Por su situación, no suelen coincidir la lluvia y el frío necesarios, a lo que se suman el efecto isla de calor de las grandes ciudades y las consecuencias del calentamiento global, que empuja a los inviernos a suavizarse.
Como resultado, si antes nevaba poco, ahora lo hace un poco menos: de cinco días al año en los que caía algún copo de media en Madrid en la década de los setenta se ha pasado a tan solo tres en la actual, según datos de Aemet. Aunque pueda parecer extraño que lo haga en primavera, la nieve tardía no es excepcional. La última vez que nevó en primavera en Madrid fue el 20 de abril de 2018, señala la portavoz.
Pero no todo ha sido una letanía de lamentos por no poder salir a tocar la nieve. En las redes, muchos ciudadanos han agradecido este “regalo visual” que no esperaban ya y que rompe la monotonía del confinamiento.
Emergencias Comunidad de Madrid 112 informa de que no se ha registrado ninguna incidencia por la nieve, mientras que en la Dirección General de Tráfico (DGT) añade que tampoco ha causado ningún problema debido en las carreteras los “muy reducidos” niveles de circulación.
Desde primera hora nevaba en la A1, en el entorno de San Sebastián de los Reyes hasta el nudo de Manoteras; en la M-607 de Colmenar Viejo, en el entorno de El Goloso y la Universidad Autónoma, y en la M-40, desde los túneles de El Pardo hasta Valdebebas. La DGT pide a los ciudadanos que no se “baje la guardia” porque “seguimos en estado de alarma” y, a pesar de la nieve, hay que “quedarse en casa”.