Garzón irrumpe en la recta final de la campaña de Sumar y rescata el fantasma de la victoria insuficiente de Arenas en Andalucía

Yolanda Díaz despeja su agenda para preparar el debate de este miércoles en RTVE

El ministro de Consumo de España, Alberto Garzón, este martes en un mitin de Sumar en Málaga.Jorge Zapata (EFE)

En la recta final de la campaña, el líder de Izquierda Unida, Alberto Garzón, ha irrumpido este martes en la campaña de Sumar. Con un acto en Málaga, provincia por la que obtuvo su escaño hace ya casi 12 años y pronunciando un discurso plagado de agradecimientos a militancia y votantes convertido por momentos en una despedida (ha renunciado a concurrir de nuevo en listas), el ministro de Consumo ha resucitado el fantasm...

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En la recta final de la campaña, el líder de Izquierda Unida, Alberto Garzón, ha irrumpido este martes en la campaña de Sumar. Con un acto en Málaga, provincia por la que obtuvo su escaño hace ya casi 12 años y pronunciando un discurso plagado de agradecimientos a militancia y votantes convertido por momentos en una despedida (ha renunciado a concurrir de nuevo en listas), el ministro de Consumo ha resucitado el fantasma de la victoria insuficiente del popular Javier Arenas en las autonómicas de 2012 para impugnar el relato de las derechas “prepotentes y mentirosas”, que dan por ganadas ya las elecciones.

En aquellos comicios andaluces, el PP de Arenas, favorito en todos los sondeos, quedó por encima del PSOE al lograr 50 escaños, pero no obtuvo la mayoría absoluta necesaria para gobernar. “Iba tan sobrado que decidió que no se presentaba a un debate en televisión, que solo tuvo dos participantes: el del PSOE y el de IU”, ha recordado el coordinador federal de Izquierda Unida en un paralelismo con el rechazo ahora de Alberto Núñez Feijóo a acudir al cara a cara a cuatro este miércoles en RTVE. “El resultado es que el PP perdió esa mayoría que solamente tuvo en las encuestas”, ha advertido el ministro. “Aquellos que piensan que el PP y las derechas tienen el camino hecho, lo cierto es que no se ha votado. Nos queda mucho por hacer de aquí al domingo para conseguir el mayor número de votos para Sumar”, ha animado Garzón.

“Tenemos que garantizar frenar a la derecha y que las políticas de izquierda que pongamos en marcha a partir del domingo impidan que volvamos a tener miedo”, ha pedido Garzón en una tarde calurosa ante medio millar de simpatizantes en el Palacio de Congresos de Málaga antes de señalar que eso “sólo” es posible si Díaz se convierte en “presidenta del Gobierno”.

El líder de IU ha tomado precisamente este martes el relevo de la vicepresidenta segunda al frente del acto central de la campaña en la ciudad. Aunque lleva días trabajando en reuniones su intervención, la candidata de Sumar ha despejado su agenda para preparar el debate de este miércoles en el ente público, la única oportunidad que tendrá de participar en un cara a cara en toda la campaña y al que la coalición concede una importancia central. En el entorno de Díaz deslizan que seguirá una línea “propositiva” tratando de mostrarse como ”el mejor antídoto” para “frenar gobiernos de la derecha” y que “Abascal siga en la oposición”. Ya tras el primer debate entre Pedro Sánchez y Feijóo, Sumar planteaba esta cita como una especie de ”segunda vuelta”.

El partido de Garzón se juega en la comunidad buena parte de su futuro. El escaño por Málaga, que encabeza el máximo responsable de la formación en Andalucía, Toni Valero, se da por descontado dentro de la organización. Tras las complicadas negociaciones para dirimir las listas, IU acabó liderando en esta autonomía la mayor parte de las circunscripciones con opciones, entre ellas, el número dos por Sevilla o el uno por Córdoba, que ocupa el secretario general del PCE, Enrique Santiago. En la pasada legislatura, Unidas Podemos obtuvo seis escaños en Andalucía, aunque ahora, en un escenario muy polarizado entre los dos grandes partidos y tras el mal resultado de las formaciones a la izquierda del PSOE el 28 de mayo, las expectativas no son las mismas.

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