Miguel Ángel Gallardo dimite como secretario general del PSOE de Extremadura
El hasta ahora líder regional, que mantendrá el escaño, afirma que da “un paso atrás” después del batacazo del partido
Miguel Ángel Gallardo ha presentado esta tarde su dimisión como secretario general del PSOE de Extremadura tras firmar el peor resultado del partido en una región donde los socialistas han gobernado 36 de los últimos 42 años. Lo ha hecho en una reunión de urgencia de la Ejecutiva regional para analizar el desastre electoral. Gallardo, que no renuncia a su escaño, ha sostenido que la decisión había sido adoptada ya durante la noche electoral y “madurada” durante este lunes. “He asumido en primera persona los resultados”, ha sostenido. El candidato, que llevado al PSOE a perder 108.000 votos respecto a las anteriores elecciones, ha explicado que, tras dar “un paso atrás”, se formará una gestora hasta el próximo congreso extraordinario.
Gallardo ha reiterado en su comparecencia que el resultado ha sido “muy malo”. A pesar de que haber recibido “el apoyo inmenso de muchos compañeros”, el hasta ahora líder socialista en Extremadura ha afirmado que ha tratado de “resistir” en “momento difíciles” frente “a una denuncia falsa que lo ha empañado todo”, en referencia al caso sobre el hermano del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por el que ha acabado siendo procesado. Se va, ha dicho, con la “cabeza alta, a pesar del dolor de no haber cumplido los objetivos marcados”.
A la reunión de este lunes también ha acudido el expresidente extremeño Juan Carlos Rodríguez Ibarra que, según confirman tres fuentes presenciales a EL PAÍS, ha pedido al partido que facilite la investidura de María Guardiola (PP) con una abstención. Ibarra, eso sí, no forma parte de la Ejecutiva, sino que ha acudido como invitado. El expresidente de la región entre 1983 y 2007 ha defendido que el PSOE debería actuar con “responsabilidad”.Ibarra ha defendido que no sea un apoyo puntual, sino que el PSOE facilite también la estabilidad de la Junta para que no dependa de la ultraderecha. La convocatoria de esta tarde en Mérida vino tras una petición desde Ferraz para que dejara el cargo, según apuntan fuentes del PSOE de Extremadura.
A Gallardo le sucederá ahora una gestora acordada con Ferraz y que será la encargada de dirigir la transición de una de las principales federaciones del partido hasta la elección del relevo de Gallardo en un proceso de primarias a no ser quien se postule tenga un liderazgo incontestable y no haya más de una lista. El PSOE extremeño también celebrará un congreso extraordinario para armar un nuevo proyecto de gobierno en la oposición tras la victoria de Guardiola y el auge de la ultraderecha.
En su comparecencia ante los medios tras la reunión de la ejecutiva, Gallardo despejó la incógnita sobre su toma de posesión como diputado autonómico, lo que le permitirá tener una condición de aforado que su defensa puede utilizar en el caso por el que está procesado junto al hermano de Pedro Sánchez.
Los primeros movimientos internos en el PSOE de Extremadura se produjeron solo horas después del recuento electoral que dejó un negro panorama en el partido: el PSOE perdió 10 escaños respecto a las anteriores autonómicas con Guillermo Fernández Vara en 2023 —de 28 a 18—, más de 100.000 votos —de 242.659 a 136.017— y 15 puntos de apoyo —del 39,9% al 25,7%—. El primero en alzar la voz en público fue el presidente de la Diputación de Cáceres, Miguel Ángel Morales, que exigio a primera hora la dimisión inmediata de Gallardo.
“No se puede poner ningún paño caliente bajo ningún concepto, aquí hay una responsabilidad directa del secretario regional, del candidato a la presidencia de la Junta y de todos aquellos que lo han aupado y lo han defendido. Y, por tanto, el partido en Extremadura necesita en primer lugar que dimita cuanto antes Miguel Ángel Gallardo, que se nombre una gestora y que haya una catarsis en el partido. Nadie que ha sido parte del problema puede ser parte de la solución”, contó Morales en conversación con EL PAÍS a primera hora de la mañana.
En Ferraz, Montse Mínguez, portavoz del PSOE, fue prudente por la mañana a la espera de la reunión de la ejecutiva regional en Mérida. “Desde el PSOE queremos hacer una proclama del buen trabajo que ha hecho en esta campaña. Se lo ha currado, se lo ha trabajado y ha dado la cara. No se ha escondido para nada, ha participado en todos los debates”, afirmó la portavoz. “El juego sucio ha vuelto a jugar y a tener un protagonismo como nos tiene acostumbrado el PP. Vamos a esperar, todo nuestro respeto a lo que se decida”, ha añadido. Mínguez negó además que los socialistas estén “tocados y hundidos”. “Estamos más fuertes que nunca”, afirmó.
El candidato socialista reconoció en la noche del domingo que el resultado del PSOE había sido “muy malo”, pero no dimitió en ese momento y optó por convocar este lunes a su ejecutiva regional para analizar los datos “en frío”. Elegido en marzo de 2024, Gallardo se impuso en dos primarias en el PSOE de Extremadura pero no ha logrado en este tiempo cohesionar a una federación acostumbrada a los liderazgos, cada uno con su estilo, de Juan Carlos Rodríguez Ibarra y de Guillermo Fernández Vara, cuya muerte en octubre agrandó todavía más la sensación de orfandad en el PSOE extremeño.