El PP exige a Puig que diga si “es el jefe” del caso Azud y asuma responsabilidades políticas

La portavoz valenciana del PP en las Cortes Valencianas, María José Catalá, ha urgido al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, a decir si “es el jefe” del caso Azud, una investigación sobre presuntas mordidas, a lo que el también líder del PSPV ha respondido instándole a ver “...

La portavoz valenciana del PP en las Cortes Valencianas, María José Catalá, ha urgido al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, a decir si “es el jefe” del caso Azud, una investigación sobre presuntas mordidas, a lo que el también líder del PSPV ha respondido instándole a ver “quiénes pasan cada día por los tribunales” en alusión a excargos populares como el expresidente valenciano Francisco Camps o el expresidente de la Diputación de Valencia Alfonso Rus. Ambos están siendo juzgados en sendos casos, Gürtel e Inmelsa.

En la sesión de control al presidente, Catalá ha asegurado que Puig debe dar explicaciones “por dignidad” y asumir responsabilidades políticas porque está “noqueado” por Azud, un caso en el que se investigan presuntas mordidas a cambio de adjudicaciones de obra pública del Ayuntamiento de Valencia durante la etapa del PP y una supuesta financiación ilegal del PSPV. En una agenda del extesorero del PSPV-PSOE Josep Maria Cataluña, uno de los investigados, aparece una anotación de 2005 con el nombre X. Puig.

“Venían a levantar la hipoteca reputacional y habrá que saber qué hipotecas tiene usted con algunas empresas que supuestamente financiaron su congreso y a su partido”, ha lanzado la portavoz popular, quien ha augurado que 2023 será “el año del cambio”. Catalá se ha referido al “permanente goteo de informaciones” sobre el caso y las posibles implicaciones de los socialistas.

La portavoz popular ha instado a Puig a lamentar que en la Comunidad Valenciana haya 46 agresores sexuales que se han beneficiado de una rebaja de penas por la ley del solo sí es sí, y a condenar el “escrache” que, a su juicio, sufrió este martes la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso, al recoger un reconocimiento en la Universidad Complutense en Madrid, como hizo con las actitudes contra la ministra de Igualdad, Irene Montero.

El presidente ha contestado que, si tiene dudas respecto al levantamiento de la “hipoteca reputacional, que vea por televisión quiénes pasan en los últimos días por los tribunales: ,“¿Quiere saber lo que pasa en el caso Azud? Pues pregunte a la asesora que tiene nombrada en el Ayuntamiento” de Valencia, en alusión a Asunción Corbín Barberá, sobrina de la exalcaldesa Rita Barberá e investigada junto con su padre, José María Corbín, en Azud.

En el segundo turno de palabra, la también portavoz municipal del PP en Valencia ha defendido que “nunca” verán a su partido tratar la memoria de Carmen Alborch —en Azud se investigan los gastos electorales de su campaña de 2007 cuando encabezó la lista del PSPV— como “maltratan permanentemente la memoria de Rita Barberá”: “Hay una decencia y unos límites. No jugamos en el barro como ustedes”.

Ximo Puig ha replicado a Catalá que “la lección más grande de feminismo” del Partido Popular fue situar en el Consell de Transparència a Carlos Flores Juberías, actual candidato de Vox a la Presidencia de la Generalitat y condenado en 2002 por violencia psíquica contra su exmujer. “Aún no han exigido su dimisión”, ha criticado al PP.

El presidente ha dejado la tribuna con una alusión directa a la bancada popular y al caso Azud: “Para respeto el que tengo hoy para np nombrar a alguien de esta cámara que sabe bastante de Azud”, en referencia a Jorge Bellver, diputado popular y vicepresidente segundo de las Cortes, antes concejal del PP en el Gobierno municipal de Barberá, que aparece en el sumario de la causa como uno de los posibles beneficiarios de los regalos del cabecilla de la trama, el empresario y promotor urbanístico Jaime Febrer.

Durante el debate, el diputado del PP Miguel Barrachina ha reiterado que el PSPV tiene “bloqueada” la renovación del Consell de Transparència y ha mostrado una camiseta “pagada por la trama de las desaladoras” con el nombre de Ximo Puig. La consejera de Obras Públicas, la socialista Rebeca Torró, ha tomado entonces la palabra y le ha acusado de cinismo porque el PP fue condenado por delito electoral y ha mostrado otra fotografía en la que aparece Barrachina en “un acto pagado con dinero negro con empresas de la Gürtel”. “Y lo peor es que ahora le han puesto como jefe de la campaña electoral para las autonómicas de mayo”, ha denunciado.

Tolerancia cero a la corrupción, según Cs

También la vicepresidenta Aitana Mas, de Compromís, ha recordado que el PPCV tiene a un expresidente condenado y a otros dos inmersos en procesos judiciales, frente a lo que ha supuesto la llegada del Botànic al Gobierno autonómico: “Se han tomado medidas que el PP no adoptó en ningún momento”, como publicar las facturas o las reuniones de los miembros del Consell.

La síndica de Ciudadanos, Mamen Peris, ha pedido de nuevo la comisión de investigación sobre Azud que se aprobó hace más de un año en las Cortes y ha insistido en la tolerancia cero a la corrupción de su grupo parlamentario. El presidente Puig no ha hablado sobre esta comisión en su réplica.

La síndica de Vox, Ana Vega, ha asegurado que “desearía ver por un agujerito las reuniones” de Puig con su equipo de comunicación sobre el caso Azud y ha señalado: “X. Puig puede ser usted, o aférrese a eso de que podría ser cualquiera, como aquél M. Rajoy de los papeles de Bárcenas”.

Para Vega, el PSOE tiene “un problema con las X”: “Primero, mister X de los GAL, luego las X de los bares de lucecitas en los que se gastaban el dinero en Andalucía junto a los sindicalistas y ahora X. Puig en el caso Azud”. Así, ha considerado que el PSOE es el “partido más corrupto de Europa” y ha ironizado: “Ximo, sé fuerte”.

“Triunfar no va a triunfar ni haciendo chistes”, ha criticado Puig en la réplica a la diputada de Vox, al tiempo que ha señalado: “Ya hay que tener para poner de candidato a un maltratador. Hay que tener...”, ha dejado caer, y ha asegurado que “esa es la peor corrupción, no atacar directamente a la violencia de género”.