Junts advierte a Illa de que tiene en sus manos la supervivencia política de Sánchez
El partido de Puigdemont pide en el Debate de Política General del Parlament que el PSC ratifique los acuerdos de Suiza. ERC dice al ‘presidente’ que tiene “la influencia” para lograr la financiación singular
El debate de política general catalán se juega en el Parlament, pero el tablero también está a nivel estatal. El líder parlamentario de Junts, Albert Batet, ha advertido al president Salvador Illa de que sus responsabilidades van más allá de llevar las riendas del Govern y le ha indicado que tiene en sus manos la relación entre Junts y Pedro Sánchez y, por tanto, su supervivencia política. “No se puede destruir en Cataluña lo que se construye en Suiza”, ha apuntado Batet sobre los tratos que Carles Puigdemont y los emisarios del PSOE han tejido en reuniones periódicas en Suiza para desarrollar el acuerdo de investidura firmado en Bruselas. Illa ha replicado que nunca ha asistido a esos encuentros. Por su parte, ERC le ha señalado al president que tiene “la influencia” para lograr la financiación singular.
Junts busca presionar al PSC y ha advertido de que someterá a votación en las propuestas de resolución la ratificación de los tratos que tiene Puigdemont con el PSOE. “El PSC se tiene que aclarar”, ha reclamado Batet y acusa de volatilidad a la formación que comanda Illa: “es el partido que dice una cosa y hace otra”.
Albert Batet es uno de los hombres de confianza de Carles Puigdemont y ha puesto el foco en que lo que acontezca en el Parlament impacta en la estabilidad de la legislatura española: “Se juegan muchas cosas”, ha dicho Batet. Junts lleva meses alertando de que este otoño va a revisar su relación con el Gobierno y empieza por trasladar la presión al PSC, pidiendo gestos porque se está ante “un punto de inflexión”. Junts se abraza a la amenaza, pero sin desvelar si la carta que esconde es un corte por lo sano: “Si el camino de la negociación llega a su fin, buscaremos otra vía”.
El presidente del grupo parlamentario de Junts ha alegado que el motor catalán petardea y ha responsabilizado a Illa de ser poco mañoso para ponerlo a punto. “Las cosas son como son, no como usted quiere que sean”, le ha espetado Batet.
Junts y ERC han coincidido en atacar a Illa por haber centrado su discurso de arranque del debate asegurando que ha puesto “en marcha” Cataluña. Pero el líder de la bancada de ERC, Josep Maria Jové, le ha pedido a Illa que haga uso de su influencia en Madrid y saque adelante la financiación singular, una condición que ha recordado que es clave para lograr unos nuevos Presupuestos. El republicano, además, ha instado al president a que los diputados del PSC apoyen en el Congreso la propuesta de ERC para fortalecer la Agencia Tributaria de Cataluña (ATC).
“El país no lo ha puesto en marcha. Ya lo estaba. El riesgo es que usted lo pare”, ha abundado Jové, que también ve falta de ambición en el jefe del Govern. “El problema de gobernar de rentas es que esas rentas acaban”, ha continuado el republicano, que ha señalado que la gran mayoría de logros exhibidos por Illa se derivan de puntos encarrilados por el Ejecutivo de Pere Aragonès y que cree que la real ambición política -la financiación o el traspaso de Rodalies- deriva de la presión de su partido.
Los dos partidos han coincidido en ahondar en la situación de debilidad de los Ejecutivos socialistas tanto en el Gobierno como en la Generalitat, pero el tono de ERC ha sido menos amenazaste. Jové se ha abierto a estudiar el plan estrella de Illa de subir la apuesta para ir más allá de las 50.000 viviendas anunciadas el año pasado y poner un horizonte de 210.000 más hasta 2030. O la que ha planteado hoy de poner en usufructo de 13.000 pisos de la Sare. Sin embargo, ERC no se mueven de ubicar la financiación como la condición indispensable para negociar los Presupuestos.
Como gesto de buena voluntad, Jové ha pedido a Illa que le dijera si el PSC votará su propuesta en el Congreso. El jefe del Govern ha soslayado esa pregunta y se ha limitado a decir que cumplirá con todos los acuerdos, aunque recordando su complejidad. “Usted tiene una capacidad de influencia dentro del PSOE que nadie del PSC ha tenido en décadas. No se esconda bajo la excusa de que no le hacen caso [con la financiación] o de que todo lo bloquea la vicepresidenta [María Jesús Montero, candidata en Andalucía]. Tiene la responsabilidad y la fuerza necesaria para hacer efectivo ese acuerdo”, le ha dicho Jové al ‘president’.
La réplica de Illa
Illa había planteado responder en bloque a toda la oposición, pero ha cambiado de criterio tras escuchar el crítico discurso de Batet. Disgustado por el contenido de la intervención, Illa ha recordado que el PSC no intervino en el acuerdo de legislatura entre el PSOE y Junts suscrito en Bruselas.“Esperamos que se cumpla, no intervenimos en nada. Las decisiones que corresponden a Cataluña se toman en Cataluña”, ha insistido. “Cataluña no está en la UCI. Dígame algo que funcione peor que hace un año”, ha señalado Illa, que ha sostenido que él no fa volar coloms (en castellano, hacer castillos en el aire). “¿Reconocemos que tenemos una emergencia habitacional o no?”, se ha preguntado señalando que hace un año se le reprochó que no impulsaría los 50.000 pisos protegidos y ahora ya hay 22.000 en, distintas fases, en marcha.
Batet ha acusado a Illa de gobernar como Donald Trump a golpe de decreto e Illa no ha escondido que esa comparación le ha dolido. Pero el tono del debate no ha tenido nada que ver con el del popular Alejandro Fernández, que ha culpado a Illa de denigrar a la presidencia de la Generalitat con su reunión de Puigdemont, de tener un balance “cero” de gestión" en vivienda, seguridad o política fiscal. Y ha vuelto otra vez a instarle a explicar su relación con Chili, una mujer de origen china que figura en el sumario del caso Ábalos, relacionado con la época en la que Illa era ministro de Sanidad. “Uste no puede escuchar la palabra Chili sin transformarse en Chuky, el muñeco diabólico”, ha bromeado Fernández, que ha culpado de “relativismo moral” por defender la amnistía. “Estoy muy convencido de lo que hice”, ha defendido el president que ha acusado a Fernández de haberse anclado en 2018. “Este país tiene derecho a mirar hacia adelante”.
Distancias con el aeropuerto
El otro socio de investidura de Illa, Comuns, ha pedido al president cambiar la idea de la “Cataluña centrada” que propone el socialista por la de la “Cataluña justa”. Con un discurso con un marcado acento social, la líder de la formación progresista, Jéssica Albiach, ha reclamado acelerar las medidas previstas en materia de vivienda y fortalecer los servicios públicos para blindar la “igualdad”. “Cataluña se rompe entre propietarios ricos e inquilinos pobres”, ha comparado Albiach, que ha lamentado la falta de mejoras en la accesibilidad a los servicios sanitarios y la pérdida del poder adquisitivo del profesorado. “La igualdad no se decreta, sino que se combate en políticas públicas y agilidad”, ha insistido.
Tras marcar distancias con el Govern por la ampliación del aeropuerto de El Prat –“no se puede ser ecologista y defender esto”, ha aseverado-, Albiach ha pedido también ampliar la oferta para aprender catalán para garantizar una mejor cohesión social; y ha denunciado la aparición de los “oportunistas” (por Vox y Aliança) que pretenden “dividir” en un contexto geopolítico cambiante. “Algunos dicen que la desigualdad es culpa de los migrantes, pero el problema es la precariedad y las horas no pagadas. Es es el capitalismo”, ha insistido tras pedir un pacto en el Parlament para “dejar de mezclar inmigración e inseguridad”.