Los Mossos investigan el robo de 13 tubos de endoscopia en el hospital de Sant Pau en Barcelona valorados en 100.000 euros
Tanto las pruebas programadas como las urgentes se han podido llevar a cabo con normalidad a pesar del suceso
Los Mossos d’Esquadra investigan el robo de 13 tubos de endoscopia digestiva en el hospital de Sant Pau de Barcelona. Las primeras valoraciones apuntan a que el material sanitario sustraído del hospital puede superar los 100.000 euros, según fuentes policiales. A pesar del robo, tanto las pruebas programadas como las urgentes se han podido llevar a cabo con normalidad, según ha explicado una portavoz del centro.
El robo tuvo lugar la noche del sábado, en una zona de acceso restringido del área ambulatoria del hospital. A esa hora, no había ni personal ni usuarios en las instalaciones en la que se produjo la sustracción. Las primeras investigaciones apuntan a que quien accedió al interior del edificio lo hizo forzando la puerta con una palanca. Sospechan que puede tratarse de alguna persona vinculada al hospital porque hallaron puertas marcadas con un punto, en concreto aquellas que dan acceso a estancias con algún objeto de valor en el interior, según fuentes policiales.
El hospital todavía no ha facilitado una valoración oficial del material robado. Fuentes del sector aseguran que ese tipo de endoscopias tienen un precio muy elevado, y ponen el ejemplo de las que se utilizan en colonoscopias, que puede superar cada sonda los 11.000 o 12.000 euros. Aseguran que una de las características es que tienen una vida útil larga, lo que conlleva que sean caros. También dudan del destino final que se pueda dar a ese material, que tiene números de serie y puede ser fácilmente trazable.
No es la primera vez que se roba material de valor de los centros médicos públicos. En 2021, un trabajador del sistema sanitario catalán fue acusado de robar cánulas de plata del hospital Vall d’Hebron que se usan en traqueotomías. Los Mossos d’Esquadra le atribuyeron la venta de 95 kilos de plata provenientes de las cánulas, con las que supuestamente ganó 34.000 euros. En total, la policía le atribuyó la venta de entre 8.000 y 9.000 cánulas, valoradas en 180.000 euros, según expertos del sector médico.
Además, la policía ha desarticulado diversas bandas de ladrones especializados en endoscopias. En 2013, hubo una oleada de robos en hospitales catalanes. Unos ladrones se llevaron siete endoscopios valorados en 150.000 euros del Hospital Santa Tecla de Tarragona, que se sumaron a material similar sustraído en hospital Arnau de Vilanova y en el Santa Caterina de Salt, en Girona. Parte de ese material acababa después malvendido en centros hospitalarios de Latinoamérica.