Los veterinarios se manifiestan en Barcelona contra la nueva ley que dificulta la dispensación de tratamientos
El colectivo también reivindica una rebaja del IVA de sus servicios, que es del 21 %, a diferencia del resto de servicios sanitarios a los cuales no se les aplica este impuesto
Más de 2.000 veterinarios y dueños de mascotas han protestado este domingo en Barcelona por la nueva ley que obliga al sector a aplicar protocolos que retrasan tratamientos, aumentan la burocracia y en algunos casos prohíben la dispensación de algunos antibióticos, lo que pone en riesgo la salud de los animales. Los manifestantes, vestidos con camisetas azules y algunos acompañados por sus mascotas, han marchado desde la plaza Catalunya hasta el Parque de la Ciutadella para mostrar su disconformidad con el Real Decreto 666/2023, que entró en vigor a principios del pasado mes de enero y que regula el uso de medicamentos para los animales de compañía. Es la primera vez que el sector se moviliza unido para reivindicar el reconocimiento de la veterinaria como una profesión esencial para la salud global.
Los veterinarios consideran que la nueva normativa limita la prescripción de antibióticos y de genéricos o medicamentos de uso humano, por lo que se pone en duda el criterio clínico del veterinario a la hora de prescribir. Encabezados por dos pancartas en las que se leía “La salud animal no es un lujo” y “Por la justicia veterinaria y la protección animal”, los convocados han gritado consignas en demanda de “una regulación sensata”, han revindicado el derecho de las mascotas a la atención sanitaria y han clamado contra el incremento de burocracia que conlleva la nueva normativa.
Además, los veterinarios y propietarios de animales han pedido también una rebaja del IVA que se aplica a los servicios veterinarios, que es del 21 %, a diferencia del resto de servicios sanitarios a los cuales no se les aplica este impuesto. El presidente de la Asociación de Veterinarios Españoles Especialistas en Pequeños Animales (AVEPA), Jordi Giné, ha denunciado que son “una de las profesiones sanitarias más menospreciadas”. La asociación exige “una normativa justa que no limite la autonomía veterinaria ni ponga en riesgo el bienestar animal”. La marcha también ha contado con el apoyo del Colegio Oficial de Veterinarios de Barcelona (COVB).