La Policía halla un AK-47 a un fugitivo buscado por asesinato en Francia que se escondía en Cabrils (Barcelona)
Los agentes arrestan también a un ‘capo’ de la mafia napolitana en la capital catalana, buscado por las autoridades italianas
La Policía Nacional ha detenido a un fugitivo buscado por asesinato y blanqueo de capitales en Francia. El hombre se escondía en Cabrils, un municipio de la zona del Maresme de Barcelona. Cuando los agentes le arrestaron, el pasado miércoles, le hallaron un Kaláshnikov, escopetas y un revolver, según ha confirmado la policía a EL PAÍS. El hombre se encuentra en prisión preventiva, a la espera de que se decrete su traslado a Francia.
El grupo de fugitivos de Barcelona, en colaboración con la policía nacional francesa, trasladados a España, arrestaron al sospechoso que se encontraba huido, y había buscado refugio en Cabrils. Los agentes pidieron además autorización judicial, que otorgó el juzgado instrucción 4 de Mataró, para registrar el domicilio en el que vivía el sospechoso. En el interior, hallaron el Kaláshnikov, junto al resto de armas de fuego, con munición. Posteriormente, el hombre, Haissam F., pasó a disposición del juzgado instrucción central número 1 de la Audiencia Nacional, que decretó su ingreso en prisión, a la espera de su extradición.
La madrugada siguiente, el grupo de fugitivos de Barcelona de manera conjunta con la comisaría general, detuvieron en la capital catalana a otro sospechoso, que en este caso buscaba desde el mes de noviembre Italia. Se trata de Antonio P., acusado de ser uno de los jefes de un grupo de la mafia napolitana, que logró escabullirse de un operativo policial que se llevó a cabo en su país, con 38 arrestados.
El hombre está acusado de formar parte del clan Amato-Pagano, y está acusado de los delitos de asociación delictiva, con fines de tráfico de drogas y tenencia de armas, según consta en una nota de prensa difundida por los Carabinieri. La investigación sobre su paradero, una vez escapó de la redada en su país, recayó en la dirección antimafia de Nápoles, donde presuntamente actuaba.
La investigación que implica a Antonio P. ha revelado la existencia de dos organizaciones criminales que actuaba en Nápoles, ambas dedicadas al tráfico de drogas. Aunque no estaban conectadas entre sí, ambas compartían el mismo canal de suministro de drogas, principalmente cocaína y hachís, gestionada en España por un grupo dirigido por un “conocido narcotraficante” que continúa libre, según la policía italiana.