Collboni capea las primeras críticas de los empresarios por la marcha de la Copa del América y la subida del IBI

El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, habló por primera vez este viernes sobre la decisión de que la Copa del América de vela no vuelva a celebrarse en la ciudad, tras recibir los primeros reproches de los sectores económicos de la ciudad. Fue durante el pleno municipal, cuando el jefe de filas del PP en el consistorio, Daniel Sirera, le pidió explicaciones sobre la marcha y le preguntó por qué no se volverá a repetir. Collboni respondió celebrando el “éxito y legado” que la regata más famosa del mundo ha dejado en la ciudad, y aseguró que las administraciones “siempre” pensaron en una sola edición: “Usted debería saber que cuando nos alineamos el Estado, la Generaliat y el Ayuntamiento y los grupos que formaban parte de estas administraciones, siempre pensamos en un gran evento singular, excepcional para la ciudad, desde el minuto cero. Y estamos muy orgullosos”, zanjó.

El reproche del PP se suma a los que, sin muchos decibelios, en las dos últimas semanas el mundo económico de Barcelona ha lanzado por primera vez al alcalde Collboni desde que llegó al gobierno de la ciudad en julio de 2023. Primero fueron los hoteleros ante la subida del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) a los hoteles de lujo. Y esta semana han sido asociaciones empresariales quienes han cuestionado al socialista la marcha de la Copa del América de Barcelona: lo hicieron el jueves tanto Foment del Treball como Barcelona Global, la entidad que impulsó la candidatura. Al sector turístico, Collboni contestó durante la votación de la aprobación inicial de las ordenanzas fiscales que “la subida de impuestos se aplica a quien mejor le va y tiene una responsabilidad social”, al tiempo que defendía que se congelan tributos a la ciudadanía.

Este jueves, la patronal Foment del Treball anunció que “luchará” para que la Copa del América se quede en Barcelona. El presidente de la gran patronal catalana, Josep Sánchez Llibre, criticó la negativa del Ayuntamiento a apoyar y destinar fondos públicos a una nueva edición. Sánchez habló en estos términos tras participar en un acto de impulso del Corredor Mediterráneo: “Vamos a luchar con otras entidades para que la Copa del América se quede en Barcelona, donde debe estar y de donde nunca debería irse. Caiga quien caiga y pase lo que pase”, dijo. Sánchez Llibre fue muy crítico con el consistorio de Barcelona que, a su juicio, cambió de actitud en 48 horas respecto a la Copa del América. “No entendemos cómo el teniente de alcalde [Jordi Valls] la valoraba de manera positiva el pasado domingo y 48 horas después cambió de actitud”, insistió y aseguró que trabajará en la recuperación de la mano de Barcelona Gobal.

Horas después, fue justo Barcelona Global, la asociación con la que el PSC mantiene sintonía, quien se pronunció. En un comunicado valoró de forma “muy positiva” el impacto de la competición, con los objetivos cumplidos, dijo, y abogó por la continuidad del evento. Barcelona Global agrupa a 265 empresas, centros de investigación e instituciones y se ha convertido en uno de los grupos de presión con más fuerza de la llamada sociedad civil de la ciudad. Una de sus principales caras, Mateu Hernández, es ahora el director general de Turisme de Barcelona. En el comunicado, la asociación empresarial entiende que la decisión sobre la permanencia de las regatas debería haberse tomado entre todas las instituciones que participaron en su organización y solicitaron la reunión de urgencia del patronato de la Fundación Barcelona Capital Náutica. Barcelona Global consideró que la 37 edición de la Copa del América ha brillado “tanto por su innovación, tecnología y creatividad como por la celebración, por primera vez, de una regata de mujeres, además de la de jóvenes”. Y puso también en valor la regata cultural.

En el caso del Gremio de Hoteles, hace diez días, cuando se conoció la intención del gobierno Collboni de subir el IBI a los establecimientos de mayor valor catastral, respondiendo a una exigencia de Barcelona en comú, la entidad se mostró “perpleja” ante la propuesta, que fue apoyada por los comunes y ERC. Precisamente los comunes mantienen que su objetivo es lograr un aumento del IBI mayor al que ha propuesto el teniente de Economía Jordi Valls. La postura del Gremio llegó en forma de comunicado, donde también tachaba “la frivolidad”, “falta de diálogo previo con el sector ni criterio en los objetivos de gobernanza turística. El sector entiende que es víctima de “una asfixia continua” por parte de las administraciones y de la “criminalización de la actividad turística”.