Collboni a Colau tras el no a los presupuestos de Barcelona: “Nunca había visto tanta irresponsabilidad”
Los comunes tumban el presupuesto del alcalde socialista, que recurre a la cuestión de confianza. Solo ERC ha votado a favor
El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni (PSC), no ha conseguido este viernes mayoría para aprobar los presupuestos y deberá recurrir a la cuestión de confianza para aprobarlos. Este mecanismo consiste en que el primer edil presenta las cuentas en un pleno extraordinario y si en un mes no se arma una mayoría alternativa para echarle, quedan aprobadas automáticamente. Sin sorpresas, los comunes de Ada Colau han votado en contra del presupuesto, cu...
El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni (PSC), no ha conseguido este viernes mayoría para aprobar los presupuestos y deberá recurrir a la cuestión de confianza para aprobarlos. Este mecanismo consiste en que el primer edil presenta las cuentas en un pleno extraordinario y si en un mes no se arma una mayoría alternativa para echarle, quedan aprobadas automáticamente. Sin sorpresas, los comunes de Ada Colau han votado en contra del presupuesto, cumpliendo su advertencia de hace un mes: votarían favorablemente si además de un acuerdo para el presupuesto Collboni les daba entrada en el Gobierno. Collboni solo ha contado con los votos favorables de ERC, con quien pactó partidas por 100 millones de euros, de un total de 3.800 millones. El no ha sumado una amplia mayoría de 26 de los 41 concejales del pleno: los de Barcelona en comú, y todos los partidos de la derecha, Junts, PP y Vox.
El tono del PSC hacia los comunes ha sorprendido a Colau y fuentes del partido han exigido “una disculpa” a los socialistas, en una situación que abre un boquete entre las dos formaciones. Tras una durísima intervención del responsable de Economía sobre los comunes, Jordi Valls, el alcalde ha tomado la palabra al final del debate, ha agradecido los votos de ERC y ha anunciado la convocatoria de un pleno extraordinario el 27 de marzo para plantear la cuestión de confianza. “Para que el 2 de mayo Barcelona tenga el presupuesto que merece y necesita”. Dirigiéndose a Colau, Collboni ha remachado: “Señora Colau, nunca había visto tanta irresponsabilidad junta en tan poco tiempo. Su actitud ha provocado el bloqueo de tres presupuestos progresistas de tres gobiernos progresistas que tenían acuerdo [en referencia a los de la Generalitat, Gobierno y Ayuntamiento). No lo permitiré en Barcelona. Solo beneficia a la derecha y a los más desfavorecidos”, ha zanjado. En Barcelona en comú entienden que Collboni “ha perdido los papeles al señalar a Colau” en su intervención final y sin que la ex alcaldesa tuviera tiempo para replicar. Los mensajes del PSC en las redes sociales “señalando públicament el perfil de l’Ada Colau” añadido malestar entre los comunes.
No se ha producido debate entre Collboni y Colau, que fueron socios durante casi dos mandatos. En lugar el alcalde ha intervenido el responsable de Economía: “Lamento que vuelva a certificar su renuncia a Barcelona, lo tiene que explicar muy bien a la ciudadanía”, ha dicho Valls y ha advertido: “Se han cargado dos presupuestos [Generalitat y Gobierno, donde Pedro Sánchez los retiró] e intentan hacerlo con un tercero, pero no lo conseguirán. Se han quedado en un tiempo que no existe”. “La izquierda es plural y no la monopoliza nadie, ¿no somos izquierda el PSC?”, le ha espetado, además de señalarle que en este pleno los comunes votan “en el lado de la derecha” y que pese a “tener un legado que se reconocerá”, “las pacificaciones, los carriles bici y el tranvía existían antes” de su paso por la alcaldía.
Colau ha reprochado a los socialistas que, con solo 10 de 41 concejales, “no quede claro adónde quiere llevar Barcelona” y ha señalado que “podía haber llegado a este pleno con dos mayorías: con Junts o con una mayoría de izquierdas”. La ex alcaldesa ha asegurado que a los comunes “no se les puede pedir más”. “Usted no sería alcalde sin nuestros votos”, ha insistido. “Le dimos confianza para hacer una mayoría de izquierdas. Otro voto de confianza en la aprobación inicial, sería un cheque en blanco” votarle las cuentas ahora. Con todo, ha tendido la mano por si cambia de opinión.
Por parte de ERC, Elisenda Alamany ha defendido su pacto con Collboni con partidas concretas para barrios o una oficina del catalán y ha lanzado un duro reproche a los comunes por la negativa de este viernes y también por lo sucedido en la Generalitat: “Nadie entendería que no fuera aprobado y que los que dicen que defienden gobiernos progresistas votan contra los presupuestos progresistas”. “Igual ha cambiado el rol donde se sientan unos y otros”, ha concluido.
Junts, PP y Vox ya habían anunciado en los últimos días su negativa a apoyarles. Por parte de Junts, Ramon Tremosa ha señalado que “Collboni está más solo, porque los dos grupos que le apoyaron en la investidura [comunes y PP] ya no le apoyan”. Desde el PP, Daniel Sirera ha puesto en cuestión si el presupuesto debía votarse “con un informe del inventor alertando de que faltan datos” y ha afirmado que las cuentas “no son un instrumento” útil para la ciudad. Gonzalo de Oro Pulido (VOX) ha argumentado su voto negativo: “Nos han votado porque estamos en las antípodas de ustedes”. Valls ha respondido que el “informe del interventor es favorable”.
Los comunes se muestran indignados
Los comunes se muestran indignados y señalan que Collboni no ha tenido ninguna intención de acercarse a ellos, que desde hace meses exigen negociar conjuntamente un acuerdo para las cuentas y entrar en el Gobierno municipal. Ni si quiera hace un mes, señalan en los pasillos del Ayuntamiento, cuando hicieron el “gesto” de facilitar su tramitación en la comisión de Economía. Colau lamenta que Collboni no le llamara tras aquella votación. El jueves hubo una última reunión de cortesía, pero no hubo avances. Igual que Barcelona en comú exigía la negociación conjunta, el PSC siempre se ha mantenido en el “paso a paso: primero el presupuesto, luego las sillas”. En cambio el alcalde sí pactó partidas con ERC, con quien antes del adelanto electoral del Parlament tenía listo un acuerdo para dar entrada a los republicanos al ejecutivo municipal.
La cuestión de confianza, prevista en la Ley Orgánica de Régimen Electoral (LOREG), es una medida a la que han recurrido varios alcaldes. En el pleno de este viernes habrá dos en los bancos de los concejales: la citada Colau y Xavier Trias (líder de Junts en el consistorio hasta que materialice su marcha, aplazada varias veces por el frenesí de sobresaltos políticos). El ex alcalde (2011-2015) aprobó por cuestión de confianza los presupuestos de 2014. Y Colau (2015-2023) los de 2017 y 2018. Fue un mandato en el que no aprobó ningunas cuentas de forma ordinaria. El primer año hizo una modificación de crédito. El segundo y el tercero, cuestiones de confianza. Y el cuarto prorrogó las del tercero. La de Collboni será la cuarta en una década en el Ayuntamiento de Barcelona.
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