El PSC revalida el liderazgo de Illa por aclamación y confía en no perder apoyos por la amnistía
El primer secretario de los socialistas apuesta en esta una nueva etapa que deje atrás el ‘procés’ y se centre en mejorar los servicios públicos
El azar ha jugado a favor del PSC. El Partit dels Socialistes de Catalunya decidió en noviembre celebrar este fin de semana de marzo el XV Congreso bajo el lema Ara toca Catalunya y le ha venido como anillo al dedo la convocatoria electoral anticipada del 12 de mayo. Con todas las encuestas a favor y un partido pacificado y sin la menor fisura, Salvador Illa fue elegido este sábado en el Palau de Congresos de Barcelon...
El azar ha jugado a favor del PSC. El Partit dels Socialistes de Catalunya decidió en noviembre celebrar este fin de semana de marzo el XV Congreso bajo el lema Ara toca Catalunya y le ha venido como anillo al dedo la convocatoria electoral anticipada del 12 de mayo. Con todas las encuestas a favor y un partido pacificado y sin la menor fisura, Salvador Illa fue elegido este sábado en el Palau de Congresos de Barcelona por aclamación de los 1.200 delegados primer secretario y candidato a las elecciones con la certeza de que Cataluña quiere pasar página del procés y de que no sufrirá pérdida de apoyos por la amnistía.
Recibido a gritos de “president, president”, Illa fue escogido a mano alzada y sin un voto en contra en uno de los congresos multitudinarios y más plácidos del PSC. Arropado por la cúpula y los líderes históricos del partido, Illa quiso dar solemnidad a su nombramiento con un breve discurso en el que evocó la figura de Tarradellas e hizo una apelación a que el PSC debe ser una “fuerza tranquila y serena” que tenga como norte “una nueva realidad y un nuevo futuro”. Su compromiso es que Cataluña deje de ser conocida por su “queja y victimismo”, lo que “divide y levanta fronteras”, y que sobresalga por la “excelencia” en los servicios públicos. Tras vencer en 2021 y ser desplazado por el independentismo, el objetivo del PSC es ganar y, esta vez, gobernar.
“Viváis donde viváis, vengáis de donde vengáis, penséis lo que penséis, seáis de derechas, izquierdas o centro”, dijo Illa, “seáis autonomistas, federalistas o independentistas, habléis la lengua que habléis, sintáis lo que sintáis, lo primero van a ser los servicios públicos”. Con esa mensaje, el candidato dio pistas de que quiere centrar su campaña en las “cosas” del día a día —así las denominó el expresidente Rodríguez Zapatero en la apertura del congreso— y no en los asuntos relacionados con el eje soberanista. Illa no hizo este sábado ni una mención directa ni a Junts ni a ERC, enzarzados en su eterna pugna, ni replicó las críticas que le lanzó el president Aragonès, que lo equiparó a “un delegado de la Moncloa”. Y menos aún hizo referencias a la reunión entre Junts y el PSOE en Ginebra o a los comunes, con quienes mantiene frías relaciones. De hecho, tampoco se escuchó nada sobre los presupuestos que han decaído por las posiciones encontradas que PSC (a favor) y comunes (en contra) tienen sobre el megacasino del Hard Rock.
Illa puso el foco en los servicios públicos justo en un momento en el que están patas arriba en Cataluña con las obras pendientes para paliar la peor sequía de la historia, los funcionarios de prisiones revueltos por el asesinato de una cocinera en una cárcel de Tarragona, con los resultados pésimos del informe Pisa y estando a la cola de España en energías renovables. “Queremos recuperar la excelencia en educación, sanidad, energía, en infraestructuras y movilidad. Queremos una Cataluña que se haga escuchar no porque grite más, sino porque será un ejemplo por la excelencia de los servicios públicos”, dijo.
Queremos una Cataluña deje de ser conocida por su “queja y victimismo y que sobresalga por la excelencia de sus servicios públicos”, dice Illa
Alineado por completo con la apuesta por la amnistía y el diálogo que lidera Pedro Sánchez, el PSC está convencido de que esa ley no les restará apoyos. En la campaña del 23-J, Illa expresó su rechazo a esa medida y después fue modulando su posición hasta trabajar decididamente por ella. Ayer no la citó, pero el viernes, en la presentación del informe de gestión, apeló a superar estos últimos años “sin rencor, con valentía y decisión”. “Hay que tener altura de miras, Cataluña y España no merecen estar paralizadas. Queremos pasar página y abrir un nuevo capítulo”, afirmó el candidato.
Según la última encuesta del Centro de Estudios de Opinión de la Generalitat, el 60% de los catalanes está a favor de la amnistía y un 31%, en contra. Entre los votantes socialistas, el respaldo desciende según esa encuesta al 49% y un 41% la rechaza. La duda es si el PSC podrá perder los votos de electores desencantados procedentes de Ciudadanos que recabó en 2021. El PSC cree que no. En la consulta a la militancia sobre si estaban a favor de la coalición con Sumar y la negociación con el independentismo, el 84% de las bases del PSC votaron a favor, un porcentaje algo inferior (87,13%) al de la media del PSOE. El partido acepta que sus bases la aceptan como un bien mayor, aunque sin entusiasmo.
La perspectiva del PSC es revalidar la victoria el 12-M tras su éxito en las municipales y en las generales. Si esa previsión se cumple, la gran incógnita es si podrá gobernar y sellar una coalición con ERC. Pero el partido llama a la prudencia y apunta a que será vital quien acabe ostentando la hegemonía dentro del independentismo, si ERC o Junts. Pero el PSC tiene la convicción de que Cataluña no está en el escenario de 2017.
Una ejecutiva expansiva de 63 miembros
Salvador Illa ha ultimado un comité ejecutivo con 63 miembros, cinco más de los que incorporó en el congreso extraordinario de 2021 que consumó formalmente el relevo con Miquel Iceta. El primer secretario ha querido demostrar su absoluta confianza con Jaume Collboni, con quien coincidió en el Ayuntamiento de Barcelona hace años, justo ahora que atraviesa una delicada situación en el Ayuntamiento, nombrándolo adjunto a la primera secretaría y presidente de consejo de alcaldesas y alcaldes. Paralelamente, ha querido mantener en la presidencia a Miquel Iceta y a Núria Marín, Los otros pilares de la ejecutiva son Maria Lluïsa Moret, número dos del partido y Núria Parlón como nueva portavoz del PSC.
Los delegados aprobarán este domingo una ponencia política que apuesta por desplegar el Estatut, al sostener los socialistas que tiene recorrido, y un nuevo sistema de financiación más justo para Cataluña y solidario con el conjunto de España. Antes del discurso de clausura de Pedro Sánchez, la militancia votará la nueva ejecutiva que Illa quiere que sea continuista, pero que gane músculo por si acaban gobernando. Su número dos será María Lluïsa Moret, presidenta de la Diputación de Barcelona, mientras el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, gana peso al ser nombrado adjunto a la primera secretaría.
Illa ha querido en esta reestructuración rehabilitar a Núria Parlón, alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet (Barcelona), nombrándola portavoz del PSC. La alcaldesa estaba fuera de la primera fila del partido desde que renunció de forma sorprendente en 2016 a pugnar por ser primera secretaria y tras abandonar la ejecutiva del PSOE en 2017 en rechazo al 155. Parlón, que encadena mayorías absolutas en su municipio y derrotó ampliamente a Gabriel Rufián, mantendrá el área de seguridad, clave para el PSC para no perder electores por la derecha. Miquel Iceta, embajador delegado permanente de la UNESCO en París, reclamado constantemente por los militantes para hacerse una foto con él, que no paró repetirá como presidente del PSC, y Meritxell Batet, expresidenta del Congreso, será la presidenta del Consell Nacional.
Puedes seguir a EL PAÍS Catalunya en Facebook y X, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal