La escuela concertada catalana denuncia que no ha recibido las ayudas para acoger alumnos vulnerables

Educación dejará de realizar convocatorias anuales para las subvenciones y las incorporará en los módulos que los centros cobran mensualmente

Una escuela del barrio del Raval de Barcelona, en una imagen de archivo.Carles Ribas

La escuela concertada en Cataluña denuncia que a estas alturas de curso todavía no ha cobrado las ayudas del Departamento de Educación para escolarizar alumnos vulnerables. Se trata de las llamadas por el sector mochilas económicas -de 988 euros por alumno y curso- que reciben para cubrir costes como la sexta hora escolar, los libros, el material escolar y las actividades curriculares. Educación asegura que la intenci...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La escuela concertada en Cataluña denuncia que a estas alturas de curso todavía no ha cobrado las ayudas del Departamento de Educación para escolarizar alumnos vulnerables. Se trata de las llamadas por el sector mochilas económicas -de 988 euros por alumno y curso- que reciben para cubrir costes como la sexta hora escolar, los libros, el material escolar y las actividades curriculares. Educación asegura que la intención es empezar a pagar a partir de febrero, tras un cambio administrativo del proceso de concesión, de manera que ya no se hará vía convocatoria pública, sino que el importe se añadirá al módulo de gastos de funcionamiento que los centros cobran mensualmente del Departamento.

La lucha contra la segregación escolar se basa en un reparto más equitativo de los alumnos más vulnerables, los calificados como alumnos con necesidades especiales por motivos socioeconómicos (NESE B), que coinciden con los que tienen concedida una beca comedor. Pero para lograr este equilibrio, inevitablemente comporta que la escuela concertada aumente considerablemente el porcentaje de este tipo de estudiantes. Por ello, desde el curso pasado, gracias al decreto de admisiones, se inició este proceso de reparto y se crearon estas mochilas económicas, que son de 384,66 euros por niño y curso en la pública y 988,1 en la concertada. Pero se crearon para los alumnos de Infantil3 y 1º de ESO, que podrán mantener durante toda la etapa obligatoria. El curso pasado se beneficiaron 20.709 alumnos (un 18% del total), según los datos de Educación de inicio de curso, aunque la cifra creció con la matrícula viva, esto es, los alumnos que llegan a mitad de curso, muchos de ellos vulnerables.

Históricamente la escuela concertada ha recibido subvenciones para escolarizar los alumnos vulnerables, que se otorgaban vía convocatoria pública anual. Pero el pasado curso, a este concurso se añadieron las mochilas de 988 euros para los alumnos de Infantil3 y 1º de ESO. Para el resto de niveles, Educación pagó 603 euros por alumno. En total, los centros concertados recibieron un total de 24,8 millones, según las resoluciones del pasado mes de marzo. Pero las ayudas llegaron con el curso casi finalizado.

A estas alturas de curso, los centros públicos ya han cobrado las ayudas, asegura el Departamento de Educación, pero los concertados no. Desde la Fundación Escuela Cristiana de Cataluña, la principal patronal del sector, lamentan que esta tardanza en el pago afecta especialmente a las escuelas de iniciativa social, es decir, aquellas ubicadas en barrios más empobrecidos y que ya escolarizan un alto porcentaje de alumnos vulnerables. “Estas escuelas deben avanzar el dinero para pagar los libros y otros gastos a los alumnos. Y si esto te pasa con el 40% del alumnado, la situación es difícil. Algunos centros incluso deben pedir créditos”, explica la secretaria general de la fundación, Meritxell Ruiz.

Este curso se espera que el importe supere los 25 millones del anterior, ya que hay más alumnos vulnerables detectados -del 18 se ha pasado al 24%- y la concertada también ha asumido un porcentaje mayor, aunque todavía no se conocen las cifras.

El Departamento de Educación asegura que empezará a pagar “previsiblemente este febrero” y anuncia un cambio en el sistema. La parte de las mochilas ya no se concederá vía subvención, sino que se han incorporado al módulo del concierto, es decir, el importe que estos centros reciben mensualmente del Departamento en concepto de gastos de funcionamiento. Educación asegura que así “se simplifica el trámite” y justifica que se empiece a pagar con el año empezado “para encajar en el ejercicio de 2024 y asegurar que se recoge la matrícula viva del primer trimestre”. Lo que no se modifica son las ayudas para el resto de niveles educativos, que se seguirán concediendo con una convocatoria pública.

La Fundación Escuela Cristiana celebra el cambio porque considera que las convocatorias de subvenciones retrasan el proceso de pago. “Y no es lógico que tengas que justificar que tienes alumnos NESE B para obtener la subvención, cuando son alumnos que ha enviado el mismo Departamento, y ellos ya los tienen detectados”, apunta Ruiz.

Importe insuficiente

Con todo, la fundación se queja de que el importe de las ayudas -los 988 euros- no cubren el coste real de escolarización. Y lo argumentan en que el coste de la plaza escolar está en unos 1.500 euros, según un informe del Síndic de Greuges de 2020. Una cifra que calculan que actualmente sea superior, a causa de la inflación. Por este motivo, han pedido que se aumente el monto. De momento, el Departamento se ha abierto a revisar los importes, tal y como avanzó este diario, y ha encargado al Síndic que elabora un nuevo informe y actualice el cálculo del coste de la plaza. Con estos datos, Educación después fijará el importe de estas mochilas.

Puedes seguir a EL PAÍS Catalunya en Facebook y X, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal

Más información

Archivado En