El candidato del PP por Barcelona pide que rija en la Diputación otro acuerdo para desplazar al independentismo

El Partido Popular está dispuesto a repetir en la Diputación de Barcelona la misma fórmula que permitió a Jaume Collboni alcanzar la alcaldía de Barcelona, esto es, aunar los votos de socialistas, comunes y populares para desplazar a los independentistas. Nacho Martín Blanco, candidato del PP a las elecciones del 23-J, ha afirmado que su partido debería debería regirse “por el mismo princi...

El Partido Popular está dispuesto a repetir en la Diputación de Barcelona la misma fórmula que permitió a Jaume Collboni alcanzar la alcaldía de Barcelona, esto es, aunar los votos de socialistas, comunes y populares para desplazar a los independentistas. Nacho Martín Blanco, candidato del PP a las elecciones del 23-J, ha afirmado que su partido debería debería regirse “por el mismo principio que ha regido en el Ayuntamiento” al sostener que debe primar el interés general y evitar que gobiernen “partidos que sólo piensan en delirios identitarios y tienen la voluntad de romper relaciones entre Cataluña y el resto de España con una actitud maximalista y rupturista”.

El candidato ha abundado, en una entrevista a Europa Press, que debe prevaler el principio de que el PP vuelva a ser determinante y ha advertido de que lo que sí que no se puede pretender que los populares den su voto sin negociación previa. “El PP es un partido en crecimiento, ha tenido un magnífico resultado en Barcelona y su provincia como es el PP haga de comparsa de partidos que han estado degradando la vida pública”, como cree que son comunes y el PSC. Con todo, el cabeza de lista ha puntualizado que no sabe el estado de las negociaciones pero si ha detallado: “No estoy en disposición de decir si tenemos que hacer exactamente lo mismo que se hizo en Barcelona, pero sí de decir que el espíritu que presidió ese acuerdo debe presidir las negociaciones”.

La constitución de la Diputación de Barcelona está prevista en principio para la próxima semana en plena campaña electoral. Los socialistas, que promueven la candidatura de Maria Lluïsa Moret, alcaldesa de Sant Boi para la presidencia, cuentan con 17 diputados sobre 51. El resto se reparten de la siguiente forma: Junts, 12; ERC, 11; los comunes, cinco; PP, cuatro y Tot per Terrassa y Vox, uno cada uno. La mayoría absoluta está fijada en 26 diputados y Moret asegura que las negociaciones con los comunes están muy avanzadas. En ese caso, les quedarían cuatro votos para la mayoría absoluta y pueden elegir varias parejas de baile: PP o Tot per Terrassa. Junts ya ha renunciado a reeditar el acuerdo con el PSC y ERC hasta ahora se ha desmarcado de pactar con el PSC. La otra posibilidad es que el independentismo pacte con TxT como ha hecho en Terrassa.

“Estamos hablando con todos los partidos salvo con Vox”, ha afirmado la portavoz del PSC Elia Tortolero

“Estamos hablando con todos los partidos salvo con Vox”, ha afirmado este mediodía la portavoz del PSC Elia Tortolero en una comparecencia en la sede del partido. No ha querido valorar la posibilidad de que se repita la fórmula del Ayuntamiento, pero no la ha descartado. “Es una negociación y seremos discretos hasta el final”. La dirección socialista ha optado por Moret y ha decidido apostar por Nuria Marín, hasta ahora presidenta, como nueva senadora por designación autonómica. La también alcaldesa de L’Hospitalet era la preferida por Junts para presidir la Diputación y su salida del tablero de negociación podría favorecer una entente de ERC con el PSC. Marín tiene unas relaciones pésimas con los republicanos tras el caso del Consell de l’Esport, alentado por un exconcejal socialista ahora en ERC.

A preguntas de periodistas, la portavoz ha negado que la relación haya mejorado con la salida de Marín y en un momento de su intervención ha acusado al president Pere Aragonès de “mentir” cuando en una entrevista en La Vanguardia alertó ante una posible entente de PSOE y PP. “Él sabe muy bien que PSOE y PP no son iguales”, ha dicho. Pese a este episodio, el Gobierno central y el Govern han alcanzado un acuerdo sobre la B-40 que estaba pendiente de firmar desde que se aprobaron los presupuestos con el compromiso además de una inversión por parte de la Administración central de 900 millones de euros.

Martín Blanco ha tachado “casi pornográfico” que el pacto se haya anunciado a pocos días de las elecciones. “Forma parte de esta política a mi parecer frívola y algo cínica del partido de lo socialistas, que está haciendo anuncios que tienen mucho que ver con una forma de hacer política en clave populista”, ha criticado para puntualizar que el acuerdo estaba en agenda y que el PP es partidario de la B-40, ha añadido que “el PP hará todo lo posible para asegurar el desarrollo económico, social y cultural de Cataluña”.

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