El Palau de la Música ha recuperado 12 millones, la mitad del dinero expoliado por Fèlix Millet
Los condenados han puesto trabas a la ejecución de la sentencia, que lleva ya cinco años en marcha
El Palau de la Música ha recuperado ya 12 millones de euros, más de la mitad del dinero expoliado por Fèlix Millet y Jordi Montull durante su etapa al frente de la institución musical. Cinco años después de la sentencia dictada por la Audiencia de Barcelona, la justicia sigue buscando bienes de los condenados para resarcir al Palau de un perjuicio económico que quedó fijado en los 23 millones de euros.
La ejecución de la sentencia del ...
El Palau de la Música ha recuperado ya 12 millones de euros, más de la mitad del dinero expoliado por Fèlix Millet y Jordi Montull durante su etapa al frente de la institución musical. Cinco años después de la sentencia dictada por la Audiencia de Barcelona, la justicia sigue buscando bienes de los condenados para resarcir al Palau de un perjuicio económico que quedó fijado en los 23 millones de euros.
La ejecución de la sentencia del caso Palau ha sido un camino de espinas. Y eso que los primeros seis meses todo parecía ir sobre ruedas: la Audiencia de Barcelona logró recuperar nueve millones de euros. Después, todo se atascó. El tribunal ha afrontado enormes dificultades para recuperar patrimonio y ni Millet ni Montull lo han puesto fácil. Ambos han sido investigados durante estos últimos años por ocultar bienes para evitar el pago de la indemnización correspondiente.
Los esfuerzos desplegados para localizar bienes han permitido sumar, en estos últimos años, otros tres millones de euros, de modo que ya se ha podido devolver al Palau más de la mitad de la cifra expoliada. La mitad de ese dinero (seis millones) procede de Millet y Montull. El expresidente del Palau fue condenado en 2018 a nueve años y ocho meses de cárcel en un juicio que, por primera vez, probó la financiación ilegal de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC). La sentencia dejó probado que el partido usó al Palau de Millet como tapadera para que Ferrovial abonaran comisiones ilegales a cambio de la adjudicación de obras públicas durante el último gobierno de Jordi Pujol, como la Ciudad de la Justicia o la línea 9 del metro. Montull era administrador del Palau y mano derecha de Millet durante todo el periodo en que desviaron fondos de la institución cultural a sus bolsillos. Con el dinero pagaron, entre otras cosas, viajes de lujo por todo el mundo con sus familias.
De Marta Vallès (esposa de Millet, ya fallecida) se han recuperado casi tres millones de euros, mientras que la hija de Montull, Gemma Montull, ha aportado casi un millón más. Los condenados han satisfecho, además, unos 160.000 euros a la hacienda pública, como perjudicada por el expolio. Pero la batalla no ha acabado. El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha informado este lunes de que el tribunal mantiene sus esfuerzos para “identificar y recuperar los bienes de los condenados”, de forma que todos los perjudicados vean satisfechas sus demandas.
Tal como avanzó EL PAÍS, un juzgado de Barcelona abrió diligencias de investigación a Millet y Montull por ocultar ingresos procedentes del alquiler de inmuebles que estaban embargados por orden judicial. Ese dinero debió haber acabado en las arcas del Palau, según la investigación. Millet es, en ese sentido, reincidente: un juzgado de Granollers (Barcelona) le investiga también por la desaparición de bienes de lujo embargados en su casa, como un piano de cola o unos colmillos de marfil.
En el concurso de Convergència
La Fundació Palau de la Música se ha personado en el concurso de acreedores que presentó Converència Democràtica de Catalunya (CDC), que desapareció como partido político pero mantuvo la personalidad jurídica precisamente para afrontar sus responsabilidades como consecuencia de este y otros procesos de corrupción. El objetivo es recuperar parte de los 6,6 millones de euros que el partido se embolsó con el pago de comisiones de Ferrovial. El juez que dio el impulso definitivo a la investigación del caso Palau embargó en su día 22 fincas del partido, pero finalmente, por decisión judicial, esas fincas han pasado a formar parte de la masa concursal. La consecuencia es que el Palau ve disminuidas sus opciones de recuperar el dinero, ya que otros acreedores del partido pueden considerarse prioritarios por el juzgado mercantil de Barcelona que lleva el caso.
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