Los Mossos investigan el teléfono móvil del hombre que mató a su mujer y su hija en Lloret de Mar
La policía está a la espera del resultado de las autopsias y de la declaración de un hijo de la pareja para esclarecer el doble crimen
Para los investigadores de los Mossos d’Esquadra, la hipótesis que toma más fuerza es que Serguéi P., un multimillonario ruso de 55 años, mató a su mujer, Nataliya P., de 53 años, y a su hija, Varvara, de 18, mientras dormían la noche del lunes al martes y después se colgó en el jardín de su chalet de Lloret de Mar (Girona). No obstante, para dar por cerrada la investigación, los Mossos están a la espera de analizar el contenido de los móviles y...
Para los investigadores de los Mossos d’Esquadra, la hipótesis que toma más fuerza es que Serguéi P., un multimillonario ruso de 55 años, mató a su mujer, Nataliya P., de 53 años, y a su hija, Varvara, de 18, mientras dormían la noche del lunes al martes y después se colgó en el jardín de su chalet de Lloret de Mar (Girona). No obstante, para dar por cerrada la investigación, los Mossos están a la espera de analizar el contenido de los móviles y dispositivos electrónicos que se llevaron del escenario del crimen, de los resultados de las autopsias, de los indicios y pruebas recogidos y de la declaración del hijo, que se esperaba para la tarde de este miércoles.
La alerta sobre el caso la hizo saltar el hijo mayor de la pareja el martes por la mañana. El chico, de 22 años, estaba en Francia, donde también residía su familia, que se encontraba en Lloret pasando la Semana Santa en una de las diversas viviendas de propiedad familiar. Según la investigación, el lunes por la noche el joven habló con su familia y, por algún motivo que se desconoce, quedó intranquilo. Eso hizo que a la mañana siguiente intentara en repetidas ocasiones hablar con ellos, sin éxito. Entonces se puso en contacto con un socio de su padre en la zona, que se dirigió a la vivienda del número 28 de la calle Aiguablava para comprobar si todo iba bien.
Una vez allí, desde el exterior, vio a Serguéi colgado con una cuerda de una barandilla sobre uno de los muros de rocallas de diferentes niveles que tenía el jardín de la finca y llamó a la Policía Local. Varias patrullas se dirigieron al lugar y con ayuda del jardinero entraron y comprobaron que el dueño de la casa estaba muerto. Alertaron a los Mossos d’Esquadra y al entrar en el domicilio localizaron a la mujer y a la hija muertas, cada una en su cama. El hecho de que el hijo hubiera mantenido contacto con la familia el lunes por la noche les hace pensar que fue esa misma noche, aprovechando que dormían, cuando las asesinó. Con mucha violencia, primero mató a la hija, que hacía poco que había cumplido la mayoría de edad, y luego a su mujer. Se localizaron un cuchillo y un hacha manchados de sangre que, a la espera de los resultados de la autopsia, se cree que fueron las armas de los crímenes.
Hacía más de 10 años que la familia pasaba temporadas en Lloret de Mar, donde incluso habían participado en algunos campeonatos de Pitch and putt. Residían buena parte del año en una ciudad francesa, donde sus hijos estaban escolarizados, y viajaban a menudo a Chipre, ya que la pareja también tenía nacionalidad de ese país. Según medios de comunicación rusos, Serguéi P., ingeniero y economista, fue directivo de la mayor empresa productora independiente de gas natural en Rusia entre 2005 y 2015. En 2011 su fortuna personal estaba valorada en unos 440 millones de dólares.
El macrochalet que tenían en la urbanización Els Pinars de Lloret disponía de una gran extensión de jardín muy bien cuidado, una piscina, una pista de tenis y al menos media docena de coches de alta gama, de marcas como Mercedes, BMW, Mustang o Lexus.
Este miércoles a mediodía se ha guardado un minuto de silencio en Girona y la delegada del Govern, Laia Cañigueral, ha dicho que hay que eliminar “de una vez por todas esta chacra de la sociedad”, y ha pedido “el máximo de sensibilización para combatirla de manera transversal”. En Lloret de Mar, a les siete de la tarde se ha hecho un acto “de rechazo y condena a cualquier acto de violencia”.
Puedes seguir a EL PAÍS Catalunya en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal