El PSC culpa a la Generalitat de tener un millón de vacunas en riesgo de caducar

El Gobierno catalán admite que ya ha retirado dosis que se han estropeado sin detallar cuántas

Un joven, el pasado martes en el centro de vacunación de la universidad de Girona.David Borrat (EFE)

Por “falta de previsión y de planificación” la Generalitat deberá desechar buena parte del millón de dosis de vacunas contra la covid-19 que estaban listas para ser suministradas. Así lo ha asegurado este viernes Alícia Romero, portavoz parlamentaria del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC). Romero ha criticado al Gobierno catalán a raíz de ...

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Por “falta de previsión y de planificación” la Generalitat deberá desechar buena parte del millón de dosis de vacunas contra la covid-19 que estaban listas para ser suministradas. Así lo ha asegurado este viernes Alícia Romero, portavoz parlamentaria del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC). Romero ha criticado al Gobierno catalán a raíz de la información avanzada por EL PAÍS sobre la elevada cantidad de dosis que el Departamento de Salud tiene descongeladas y a punto de caducar.

La secretaria de Salud Pública de la Generalitat, Carmen Cabezas, ha confirmado que hay dosis que ya han caducado, aunque todavía deben cuantificar cuántas se han retirado y cuántas deberán retirarse, según recoge la agencia Efe. El grupo parlamentario del PSC, la principal fuerza de la oposición, se ha reunido en lo que llaman “el gobierno alternativo de Cataluña”. Entre los asuntos tratados en el orden del día de este Ejecutivo paralelo estaba la próxima caducidad de las dosis que la administración catalana había descongelado a partir de unas previsiones demasiado elevadas de la demanda de vacunación. “Hay que tener mejor previsión y más planificación en un tema tan importante”, ha pedido Romero.

La dirigente socialista ha remarcado que la proximidad de la fecha de caducidad dificultaría también destinar los fármacos a países en vías de desarrollo: “No es de recibo que esto suceda cuando hay países en los que los niveles de vacunación son muy bajos o incluso en continentes como África, donde el nivel de vacunación es del 4%. Ya no podemos ceder estas vacunas porque su fecha de caducidad es muy cercana.”

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Los protocolos establecen que las inyecciones que no son utilizadas deben ser retornadas al Ministerio de Sanidad, para ser redistribuidas o para que engrosen las partidas de la vacuna que la Unión Europea dona a terceros países a través del fondo Covax. El Ministerio está frenando la adquisición de dosis, sobre todo de Pfizer, por la desaceleración de la vacunación y porque el Gobierno calcula que las comunidades autónomas tienen en reserva unas siete millones de unidades.

El consejero de Salud de la Generalitat, Josep Maria Argimon, expresó a principios de septiembre su confianza en que este septiembre se suministrarían 500.000 dosis semanales en Cataluña, pero en los últimos siete días las inoculaciones no han llegado a las 125.000. Cabezas, la secretaria de Salud Pública, ha recordado que el periodo de caducidad después de descongelarse la vacuna es de un mes y que, únicamente si el Ministerio de Sanidad autoriza ampliar su validez, podrán utilizarse.

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