Los malos datos de la pandemia ponen las elecciones catalanas en la cuerda floja
Las restricciones aprobadas por la Generalitat entrarían en los supuestos para aplazar los comicios
La pregunta lleva semanas sobre la mesa y su hora de la verdad se acerca: ¿es prudente celebrar las elecciones del próximo 14 de febrero teniendo en cuenta la proyección de las actuales cifras de contagiados e ingresados por la covid-19? La Generalitat lleva meses trabajando en las posibles contingencias y la próxima semana se reunirá la mesa de partidos para intentar llegar a un acuerdo. Sin embargo, ya hay voces que alertan de un po...
La pregunta lleva semanas sobre la mesa y su hora de la verdad se acerca: ¿es prudente celebrar las elecciones del próximo 14 de febrero teniendo en cuenta la proyección de las actuales cifras de contagiados e ingresados por la covid-19? La Generalitat lleva meses trabajando en las posibles contingencias y la próxima semana se reunirá la mesa de partidos para intentar llegar a un acuerdo. Sin embargo, ya hay voces que alertan de un posible cambio de fecha por la pandemia.
Jaume Padrós, el presidente del Colegio de Médicos de Barcelona, aseguró este martes que no se puede descartar un aplazamiento, tanto de esta cita electoral como de la del Barça. “Tendríamos que intentar que se pudiera [votar], pero las cifras son muy malas. Ya hay hospitales que están bordeando el colapso”, recordó el doctor en una entrevista a RAC-1.
De acuerdo con el documento aprobado por el Procicat, es recomendable aplazar los comicios en dos escenarios: un confinamiento duro, como el que se vivió en marzo del año pasado, o en el caso de “confinamientos perimetrales” y “restricción absoluta” de las actividades sociales. Como no hay unos baremos epidemiológicos fijados, la decisión sobre si se llevan a cabo los comicios o no puede estar sujeta a interpretación. Las últimas medidas anunciadas por la consejera de Salud, Alba Vergés, incluyen un confinamiento perimetral municipal para los próximos días y la decisión, efectivamente, se toma ante las malas cifras de velocidad de transmisión y de ocupación hospitalaria.
Los partidos intentan de nuevo navegar entre dos aguas, ponderando el derecho al voto y a la salud. La presidenciable por Junts per Catalunya, Laura Borràs, ha dicho este martes que es partidaria de que se celebren las elecciones tal y como está previsto. “El país necesita las elecciones. El país necesita un cambio en el Govern”, declaró durante una rueda de prensa. Junts, aun así, escuchará las recomendaciones de los expertos.
En el PSC creen que es difícil explicarle al ciudadano que puede usar el metro o ir a comprar y no permitirle ejercer un derecho fundamental. “Lo que hay que hacer es tomar las medidas necesarias para garantizar la seguridad, algo que está al alcance de la Generalitat”, ha defendido este martes el diputado Ferran Pedret.
“Se han tomado medidas para controlar el virus, hay que ver cómo responden. Nuestra voluntad es que las elecciones se celebren el 14-F, pero es evidente que hay una línea roja y es que no todo el mundo pueda votar”, explicó por su parte el republicano Sergi Sabrià. En Catalunya en Comú-Podem defienden también que se realicen las elecciones pero “con todas las garantías sanitarias y democráticas”. “Ahora mismo no sabemos cómo vamos a estar el 14-F”, argumentan.
El diputado anticapitalista Vidal Aragonés pidió criterios “objetivables” para poder determinar, en la reunión con los otros partidos políticos, si es pertinente celebrar las elecciones. Nacho Martín Blanco, de Ciudadanos, insistió en la voluntad de acuerdo en la mesa con los partidos y pidió escuchar las recomendaciones de los expertos para evitar discrecionalidad en la decisión.