Dos ahogados cada semana en las playas catalanas este verano
Cuatro de los 24 fallecidos entre junio y el pasado día tres de septiembre eran menores
Entre el 15 de junio y el pasado día 3 han muerto ahogadas en las playas del litoral catalán 24 personas, lo que implica una media de dos a la semana y, en conjunto, dos menos que el verano pasado. Como otros años, la gran mayoría de los fallecidos, el 79%, son hombres. En este verano de pandemia, destaca, sin embargo, la nacionalidad de los fenecidos. El año pasado, la mitad de las 26 víctimas fueron extranjeros, la mayoría fra...
Entre el 15 de junio y el pasado día 3 han muerto ahogadas en las playas del litoral catalán 24 personas, lo que implica una media de dos a la semana y, en conjunto, dos menos que el verano pasado. Como otros años, la gran mayoría de los fallecidos, el 79%, son hombres. En este verano de pandemia, destaca, sin embargo, la nacionalidad de los fenecidos. El año pasado, la mitad de las 26 víctimas fueron extranjeros, la mayoría franceses, ingleses, belgas, o italianos. Este peculiar verano golpeado por la covid, que ha dejado las playas prácticamente sin turismo internacional, ha provocado que más del 90% de las víctimas sean de nacionalidad española.
Tras el confinamiento, la ciudadanía ha hecho más salidas de proximidad a playas y montañas y el tiempo, caluroso pero sin casi olas de calor, ni lluvias, lo ha favorecido. También este verano se ha dado la cifra de menores muertos más elevada del último lustro, cuatro. Fuera del cómputo de ahogados de Protección Civil de Cataluña, también han perecido dos submarinistas y dos personas que iban en una moto acuática y en barca.
De las 24 personas ahogadas en poco más de dos meses, 10 lo han hecho en la Costa Brava (Girona), y siete en la Costa Daurada (Tarragona) y el resto en la costa de Barcelona. Las playas de Girona, sobre todo las del Empordà, son las que han registrado más víctimas al concentrar también mayor número de bañistas.
Del total de ahogados, 16 han fallecido en playas vigiladas por socorristas y con bandera verde; en seis casos, el socorrista no había empezado su jornada de trabajo llegado pero el estado del mar era bueno; y sólo en uno de los casos, lucía la bandera amarilla. Un dato significativo se encuentra en el perfil de las víctimas. El 79% de los ahogados son hombres y el 46% tiene más de 70 años. Del resto, ocho tenían entre 60 y 70 años, cuatro eran menores y solo hubo un caso en la amplia franja entre los 18 y 59 años. Las cifras coinciden con la alerta de la Organización Mundial de la Salud que avisa, que “el riesgo de ahogamiento es mayor en niños, varones y personas con fácil acceso al agua”.
Un dato significativo se encuentra en el perfil de las víctimas. El 79% de los ahogados son hombres y el 46% tiene más de 70 años.
Este verano ha sido el peor en los últimos cinco en muertes de menores. En las playas catalanas han muerto cuatro menores de entre seis y 16 años y las causas han sido diversas. Los dos más pequeños no sabían nadar, otro menor de diez años se bañó con bandera amarilla, y el de 16 años falleció tras la picadura de un pez araña.
Los varones, con un índice global de mortalidad que duplica el femenino, están especialmente expuestos al riesgo de ahogamiento, según la OMS. Los estudios indican que se debe a “una mayor exposición al agua y a prácticas más arriesgadas, como los baños en solitario, a veces tras consumir alcohol”.
En este sentido, la jefe del servicio de Gestión de Emergencias de Protección Civil, Montse Font, puntualiza que “las mujeres son más precavidas”. “Si no se sienten seguras, piden ayuda o se bañan acompañadas, algo que en los hombres no acostumbra a suceder. Por eso si se sienten mal, nadie les ve”, explica. Se les conoce como “ahogados silenciosos”, se desmayan en el mar sin mover los brazos ni gritar pidiendo ayuda, lo que hace que sean muy difíciles de detectar y rescatar con vida, relata.
En cuanto a los accidentes en piscinas, “acostumbra a haber más accidentes críticos, pero no mortales y la gran mayoría son menores”, añade. Entre el 15 de junio y 3 de septiembre, en hoteles y establecimientos públicos, o en casas particulares, han muerto siete personas, tres de ellas menores. También ha habido 17 ahogamientos en los que se ha podido salvar a la persona, es decir “no mortales”. Un 82% eran menores.
La OMS calcula que en el mundo mueren cada año ahogadas en el agua unas 320.000 personas. El pasado mes de agosto ha sido, desde que los contabiliza la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo (RFESS) en 2015, el que más muertes ha registrado en los espacios acuáticos españoles, 81. En 2019 fueron 74. Hasta 31 de agosto han muerto 272 personas. La Comunidad Valenciana, Cataluña, Andalucía y Galicia suman 158 víctimas, un 58% del total.
Durante este verano inédito por la crisis del coronavirus, las escapadas a la montaña también se han incremento notablemente, lo que se ha traducido en un incremento de los accidentes. “La gente ha salido mucho más al medio natural y esto ha comportado más rescates”, sostiene el sargento del Grupo de Actuaciones Especiales (GRAE) de los Bomberos, Alfons Esterlich. Entre 1 de enero y 31 de agosto el GRAE ha hecho 1.035 rescates en el medio natural, en Cataluña, frente a los 938 del 2019.
El presente 2020 es un año de récords. Los rescates en el medio natural han aumentado un 11%, en las montañas un 9%, las búsquedas un 17% y un 162% (más del doble) en medio fluvial, ríos, rieras y pozas.
De este aumento destaca además que durante los meses de confinamiento solo hicieron una veintena de rescates. Por lo tanto, la cifra es más elevada que en 2019, pese a que ha habido tres meses menos de actuaciones, durante el estado de alarma en el pico de la pandemia, entre marzo y mayo.
El presente 2020 es un año de récords. Los rescates en el medio natural han aumentado un 11%, en las montañas un 9%, las búsquedas un 17% y un 162% (más del doble) en medio fluvial, ríos, rieras y pozas. Si se mantiene la tendencia, será el año con más actuaciones desde 2009, cuando empezaron a recopilarse las cifras.
Incluso la Federación de Entidades Excursionistas de Cataluña aseguraba hace unos días que la gran cantidad de salidas de personas a la montaña, sobre todo al Pirineo pero también en otros macizos del territorio catalán o fuera de él, ha provocado que los accidentes se hayan triplicado incluso entre sus propios federados.