El presidente de la Diputación de Sevilla defiende el acuerdo de investidura catalán como una gran oportunidad para debatir sobre financiación
El socialista Javier Fernández de los Ríos reclama a la Junta “sensibilidad” en materia de infraestructuras, sanidad o educación
El presidente de la Diputación de Sevilla, Javier Fernández, ha defendido el acuerdo de investidura que otorga más competencias a Cataluña en la gestión de los impuestos. “Algunos lo ven como un gran problema, nosotros lo hemos analizado y lo vemos como una gran oportunidad para hablar de financiación y de autogobierno”, ha resaltado el también secretario general del PSOE de Sevilla (agrupación municipal con más militantes en España de esa formación) en un encuentro organizado por la Cadena Ser este lunes en la capital andaluza. Fernández también ha reclamado a la Junta de Andalucía “sensibilidad” y respuestas para tratar los grandes problemas a los que se enfrenta la provincia, donde ha puesto el énfasis en la sanidad pública y en las infraestructuras viarias e hidráulicas.
El presidente, que dirige una de las dos únicas Diputaciones que conserva el PSOE en territorio andaluz, ha negado que en el acuerdo de investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat se hable de “cupo catalán” o de “concierto catalán”. Ha apostillado que el acuerdo habla de financiación y habla del desarrollo del Estatuto de Cataluña y, en sintonía con la línea que está siguiendo en Andalucía el secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, presente en el encuentro, ha señalado que ese mismo margen ya se recoge en el Estatuto andaluz por lo que “el presidente de la Junta puede ir mañana y pedir el desarrollo de las líneas de Cercanías en Andalucía o la policía y tener los ‘Mossos’ andaluces”. Fernández, consciente de cómo se ve este pacto desde otras comunidades infrafinanciadas como la andaluza, ha desmentido también que Cataluña vaya a recibir más dinero a costa de Andalucía y ha apelado al espíritu del 28-F, cuando se votó el Estatuto de esa comunidad, para garantizar el equilibrio y la igualdad en los criterios de reparto.
“Es una oportunidad también para hablar de esas comunidades infrafinanciadas, como Andalucía, que además de infrafinanciada está mal gestionada”, ha criticado Fernández, en referencia al modelo de gestión del Gobierno andaluz, dirigido por el Partido Popular. Además, considera que la Junta tiene que ser coherente. “No puede quejarse de financiación y luego devolver dinero de los fondos europeos y perder 700 millones de euros por el impuesto de patrimonio. No tiene mucho criterio. Y encima ahora vas a Madrid a pedir el dinero que no tienes, eso no puede ser”.
Fernández ha querido disipar dudas sobre el cuestionado liderazgo de Espadas al frente del PSOE de Andalucía y ha reiterado su respaldo, tal y como ya hizo hace unas semanas. “Mi apoyo personal lo va a tener”, ha recalcado esta mañana. Preguntado por el 41º Congreso del PSOE que se celebrará en Sevilla entre finales de noviembre e inicios de diciembre, ha vuelto a incidir en la oportunidad de abordar el asunto de la financiación autonómica, consciente de que el acuerdo catalán ha sido cuestionado en otras federaciones socialistas. “Normalmente es un sitio donde hablamos de liderazgos, pero que esta vez se centrará en dos temas clave: el modelo territorial y las propuestas programáticas sobre vivienda, que es un asunto que el presidente [Pedro Sánchez] tiene ahí entre ceja y ceja”.
El presidente de la Diputación de Sevilla ha sido duro con la Junta de Andalucía, a quien ha reprochado su “brutal ataque” respecto a la gestión del virus del Nilo, que ha acabado con la vida de ocho personas en la provincia de Sevilla. Ha remarcado que la Diputación “sí ha estado a la altura”, mientras que la Junta “ha jugado más a ver a quién le cargaba la responsabilidad en vez de liderar y asumir este grave problema de salud pública”. En esa línea también ha cuestionado la falta de inversión del Gobierno de Moreno en infraestructuras, en obras hidráulicas o en sanidad.
En cuanto al alcalde de Sevilla, Fernández le ha mostrado su apoyo para la aplicación de la tasa turística, que calcula que reportaría “unos 15 o 20 millones al año” para ayudar a los barrios más afectados por el turismo. Pero también ha cargado sobre él la responsabilidad de no tener reuniones con el ministro de Transportes, Óscar Puente, que sí ha cerrado acuerdos con sus homólogos de Málaga y Granada, también del PP. “Lo que tiene que demostrar el alcalde para reunirse con Puente es voluntad. No puede llevar escrita la respuesta posterior antes de la reunión”. También ha evidenciado las diferencias que los separan en materia de promoción turística, invitándole a que se incorpore al stand de la provincia en la feria de Fitur, una tradición que se rompió en la pasada edición, cuando la capital andaluza concurrió por separado.