Los desvíos a la privada en atención primaria y la subida salarial lastran la negociación entre la Junta de Andalucía y los sindicatos
La primera reunión tras las manifestaciones por la sanidad pública se zanja sin pactos pero con una sensación de optimismo en ambas partes
Las movilizaciones en la calle a menos de dos meses para las elecciones municipales han cambiado el talante de la Junta de Andalucía en las negociaciones con las organizaciones de trabajadores para llegar a un gran pacto por la atención primaria en la comunidad. Es la sensación generalizada que comparten los sindicatos consultados que integran la mesa sectorial y que también ha confirmado a este diario una portavoz del Gobierno a...
Las movilizaciones en la calle a menos de dos meses para las elecciones municipales han cambiado el talante de la Junta de Andalucía en las negociaciones con las organizaciones de trabajadores para llegar a un gran pacto por la atención primaria en la comunidad. Es la sensación generalizada que comparten los sindicatos consultados que integran la mesa sectorial y que también ha confirmado a este diario una portavoz del Gobierno autonómico, después de las más de cuatro horas seguidas de reunión que este miércoles han celebrado ambas partes. Pese a esa receptividad, hay dos escollos que complican la llegada a un acuerdo: el mantenimiento de la concertación de la atención primaria en la orden de tarificación y la subida salarial, que la consejería solo ofrece a médicos y pediatras y que los representantes sindicales piden también para el resto de profesionales.
La Junta ha llevado este miércoles a la reunión un documento de 19 propuestas para mejorar la situación de la atención primaria en Andalucía, que lleva meses en situación de colapso y habituada a listas de espera de una semana de duración como media. Solo se han podido debatir los seis primeros puntos, de acuerdo con las fuentes consultadas. Las partes negociadoras se han emplazado al próximo lunes 10 de abril para abordar en profundidad todas las medidas planteadas junto con las aportaciones que en este tiempo envíen los sindicatos a la Consejería de Salud. “Son iniciativas en principio coherentes, pero tenemos que ver cómo evolucionan y, sobre todo, tenemos que fijar un calendario para su puesta en marcha”, explica una fuente sindical que ha estado presente en la negociación.
Uno de los principales puntos de fricción, con todo, ha sido la orden de tarificación que la Junta aprobó el pasado 2 de marzo y que por primera vez contemplaba la concertación con la privada de la atención primaria y la posibilidad de que las instalaciones del Servicio Andaluz de Salud (SAS) pudieran ser utilizadas por médicos privados. Los responsables de la Consejería de Salud han presentado una reforma de la norma —que ya fue corregida su vez una semana después de publicarse― en la que se elimina la posibilidad de usar los servicios públicos de salud por personal ajeno al SAS y se circunscribe la derivación de pacientes a la atención primaria de centros privados en “situaciones de declaración de emergencia sanitaria, que imposibilite asumirla con medios propios de los servicios públicos”. Las organizaciones sindicales han reclamado que se elimine cualquier mención a esta especialidad en la orden y desde Salud les han asegurado que estudiarán esa posibilidad.
Otro de los puntos que se ha abordado ha sido la subida salarial de 450 euros para los médicos y pediatras, una reivindicación histórica del Sindicato Médico Andaluz, que recuerda que esos profesionales son los peor pagados en comparación con otras especialidades, lo que les impulsa a cambiar de especialidad o irse a ejercer a otras comunidades. El resto de representantes de las organizaciones de trabajadores, sin embargo, han asegurado a este diario que ningún acuerdo será posible si ese incremento de los sueldos no se hace extensivo al resto de categorías que trabajan en la atención primaria. De nuevo, desde la Junta no se han opuesto a analizar la petición.
Entre las iniciativas que se han debatido ha habido acuerdo en que hay que limitar la carga burocrática de los médicos y enfermeras, pero es en la forma y en el número de administrativos en donde habrá que afinar en las próximas reuniones. También se ha coincidido en la necesidad de acotar las agendas de los profesionales, una medida que ya acordó de manera unilateral el Sindicato Médico Andaluz con la Consejería de Salud a finales de enero como condición para desconvocar la huelga que habían organizado para el 27 de ese mes. Entonces, se fijó en 35 pacientes al día las consultas de los médicos y en 25 la de los pediatras. La tardanza en aplicar ese pacto ha precipitado el anuncio de un nuevo paro general para el 12 de abril, que, de momento, sigue en pie. En la reunión, de acuerdo con todas las fuentes consultadas, se ha abierto la posibilidad de que ese cupo pudiera reducirse a 30 y 20, respectivamente.
Tampoco hay escollos sobre el compromiso de la Junta de destinar el 25% del presupuesto del sistema sanitario público a la atención primaria —una medida incluida en el macroacuerdo social y económico por Andalucía que firmó el presidente andaluz, Juan Manuel Moreno, con la patronal, UGT y CC OO el 16 de marzo― y que se ha consolidado acordando que ese gasto tendrá que suponer el 7,1%% del PIB regional, según han confirmado las citadas fuentes.
Tregua de algunas centrales
El documento contempla una reducción de cupo máximo de pacientes por médico y enfermero, una medida que agrada a los sindicatos porque supondría una ampliación de la plantilla. También incluye el mantenimiento de la consulta asistencial, es decir, las jornadas vespertinas que los médicos pueden realizar voluntariamente para aliviar las listas de espera. Otro de los puntos es la reorganización de las consultas de acogida, una modalidad implantada en la atención primaria tras la pandemia que deja en manos de los enfermeros la decisión de derivar al médico de cabecera a los pacientes sin cita, pero cuyo funcionamiento no termina de convencer porque tampoco ha servido para aligerar las listas de espera.
Tras las manifestaciones multitudinarias del pasado sábado, en las que decenas de miles de personas salieron a las calles de las capitales andaluzas, la Junta ha conseguido con esta nueva reunión una tregua por parte de algunos de los sindicatos. SATSE, UGT y CSIF han confirmado que mientras duren las negociaciones dejarán de concentrarse semanalmente. CC OO, sin embargo, sí las retomará el primer jueves después de Semana Santa. El Sindicato Médico Andaluz, que hoy mismo se manifestaba para acelerar la respuesta de la Junta ante el colapso de la atención primaria, mantiene también de momento la huelga de médicos de familia para el 12 de abril.
Mientras se emplazan para una nueva reunión pasadas las vacaciones de Semana Santa, los sindicatos han alertado de que, precisamente para ese período, los directores de los centros de salud y hospitalarios donde se haya excedido el gasto presupuestario no autorizan contrataciones. Las centrales advierten de que esta decisión puede condicionar las sustituciones por enfermedad, incapacidades temporales o permisos de paternidad, maternidad o vacaciones.