La Fiscalía archiva la denuncia de la Junta contra dos médicas del Hospital Regional de Málaga

La Fiscalía de Málaga ha acordado archivar la investigación penal sobre dos profesionales sanitarias del Hospital Regional de Málaga que habían solicitado a la dirección de centro en reiteradas ocasiones que se autorizara la aplicación de una terapia génica para tratar a un bebé con atrofia muscular espinal (AME), una enfermedad genética potencialmente mortal. La denuncia fue interpuesta por la Junta de Andalu...

La Fiscalía de Málaga ha acordado archivar la investigación penal sobre dos profesionales sanitarias del Hospital Regional de Málaga que habían solicitado a la dirección de centro en reiteradas ocasiones que se autorizara la aplicación de una terapia génica para tratar a un bebé con atrofia muscular espinal (AME), una enfermedad genética potencialmente mortal. La denuncia fue interpuesta por la Junta de Andalucía después de comunicar a las médicas que iba a abrirles un procedimiento sancionador por las incidencias originadas durante las gestiones para iniciar el tratamiento, un procedimiento que nunca se inició, pese a que la bioquímica responsable del laboratorio de cribado neonatal de Andalucía Oriental ha sido apartada de esa función en concreto.

El servicio de pediatría informó a los 12 días de que naciera el bebé a la dirección del centro en cuanto los resultados del cribado que le realizaron en el laboratorio del hospital dieron positivo en AME, solicitando la colaboración del hospital para el tratamiento y proponiendo la aplicación de un medicamento que cuesta 1,95 millones de euros. La gerencia solo respondió a uno de los al menos cinco correos que remitió la facultativa en el que requería un informe justificativo de la idoneidad de esa terapia.

Pasaron los días, vitales para la efectividad del tratamiento, que requiere rapidez en su aplicación, y la dirección no ofreció ninguna respuesta, pese a que los primeros síntomas ya habían empezado a evidenciarse en el bebé. Solo cuando la Fundación Atrofia Muscular Espinal (Fundame), con la que la familia se había puesto en contacto para pedir ayuda, se interesó por el caso ante el hospital, se puso en marcha el tratamiento.

Poco después, reubicaba en sus funciones a la bioquímica y solicitaba una investigación a la Fiscalía por motivos relacionados con la revelación de datos confidenciales y los problemas surgidos durante la administración del tratamiento, según informaron fuentes de la Consejería de Salud a este diario. Poco después, la gerente del centro hospitalario dimitía por motivos personales.

Desde que EL PAÍS revelara el caso, la consejera de Sanidad ha insistido en que la dimisión de la directora del hospital no tiene nada que ver con este caso, que el menor está recibiendo el tratamiento y que la bioquímica “no ocupaba ningún cargo, por lo que no se le ha retirado del mismo”, sino que lo que se ha hecho ha sido “reubicarla” coincidiendo con una “reorganización del laboratorio” en la que se ha ampliado el personal. Sobre la denuncia en la Fiscalía, había rehusado hacer comentarios mientras el Ministerio Público estuviera investigando.