Las lluvias en el este de España ponen a Valencia en alerta

El temporal de lluvias castigó este domingo con dureza el sureste peninsular. En Andalucía, una persona ha muerto y dos más permanecen desaparecidas en las provincias de Málaga y Granada a causa de las fuertes precipitaciones que cayeron en ambas provincias desde la noche anterior. A primera hora de la tarde de ayer, la alerta se trasladaba a Valencia, donde la Generalitat tuvo que enviar sobre las 15.35 un Es-Alert a los móviles de la población del litoral sur de la provincia tras activar la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) el aviso rojo, que implica “peligro extraordinario” por lluvias. Dos horas más tarde la alerta se extendía a toda la provincia para advertir a los vecinos del riesgo de inundaciones y pedir que no se invadiera ni cauces ni barrancos y se evitasen los desplazamientos. A las 20 horas, el aviso se rebajó a naranja. La Vega del Segura (Murcia) también entró en alerta roja en la jornada de ayer.

Durante la noche del sábado al domingo, la lluvia y viento afectaron particularmente a la provincia de Málaga. La Aemet activó el aviso rojo ante la previsión de fuertes lluvias y obligó al envío de un mensaje Es-Alert a la población de las comarcas de la Costa del Sol y Guadalhorce. “Extreme la prudencia, evite desplazamientos innecesarios. No cruce zonas inundables y respete los cortes de tráfico”, decía el texto de Protección Civil lanzado a las 21.16.

“Por favor, que nadie baje la guardia esta noche en Málaga”, pedía el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla sobre la medianoche del sábado. Para entonces, calles de municipios como Marbella ya embalsaban mucha agua, pero lo peor estaba cayendo a esa hora justo donde Aemet había previsto: en la zona del valle del río Guadalhorce. Cártama fue una de las localidades más afectadas por la crecida del río, que llegó hasta los 5,77 metros de caudal durante la madrugada, su máximo histórico superando a la que ya causó estragos en la zona la pasada primavera. Residentes de barriadas como Doña Ana, en plena ribera, volvieron a pasar la noche en vilo ante la situación. En la localidad cartameña numerosos sótanos, garajes y viviendas quedaron anegados.

En Málaga capital, Protección Civil recomendó a través de la megafonía de sus vehículos a los vecinos de Santa Amalia (en la barriada de Campanillas) que subieran a los pisos superiores de sus viviendas por precaución. Algunos desalojaron sus casas y se desplazaron a hogares de familiares. Además, el Ayuntamiento habilitó alojamiento en la asociación de vecinos El Romeral, en Alhaurín de la Torre, la zona segura más cercana. La Policía Local realizó hasta 70 intervenciones relacionadas con lluvia y viento, según fuentes municipales. Las lluvias también obligaron a desviar a aeropuertos cercanos 24 vuelos que tenían previsto llegar al aeródromo de la Costa del Sol. Además, cinco trenes de Cercanías quedaron parados en estaciones y apeaderos entre Los Prados y Benalmádena por los efectos de las lluvias.

Por la mañana se conoció la desaparición de dos hombres de 53 y 54 años que viajaban en una furgoneta que fue arrastrada por las aguas. El vehículo fue localizado volcado en el río Fahala con importantes daños pero sin nadie en su interior. Las labores de rastreo permitieron localizar horas después el cuerpo sin vida de uno de sus ocupantes en la localidad de Alhaurín el Grande. El segundo sigue desaparecido. La Guardia Civil informó de que retomará hoy la búsqueda del segundo hombre. Con la caída de la noche, ya sin luz, los equipos de especialistas tenían muchas más complicaciones. Tampoco se conoce el paradero de un joven de Zujaira (Granada) que fue arrastrado por la corriente del arroyo de la Cañada, en el término municipal de Íllora, cuando intentaba cruzarlo en motocicleta junto a un amigo. El acompañante logró ponerse a salvo.

Mientras el temporal amainaba en Andalucía y Murcia —aunque se mantuvo el aviso naranja en algunas comarcas de Málaga y en varias zonas de las provincias de Granada y Almería—, el temporal arreciaba en Valencia. El mayor peligro se centró en el sur y en el centro de la provincia, también en la comarca de l’Horta Sud, devastada por la dana del 29 de octubre del pasado año. Las lluvias mas abundantes se registraron en las comarcas de La Safor (Gandia) y La Ribera Alta (Alzira) y la Ribera Baja (Sueca). El río Magro amenazó con desbordarse en algunas zonas como Guadassuar y el barranco del Poyo. El Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat estableció la situación 1 del Plan Especial de Inundaciones. El presidente valenciano, Juanfran Pérez Llorca también hizo llamamientos a la prudencia y a seguir las instrucciones de Emergencias.

Las intensas lluvias provocaron algunos desbordamientos e inundaciones, sin que trascendieran incidencias graves. También el desvío de numerosos vuelos en el Aeropuerto de Manises. Los teléfonos móviles de las personas que se encontraban en el aeropuerto sonaron al unísono con la alerta enviada por la Generalitat sobre las 17.40. En ese momento, cientos de pasajeros ya llevaban más de una hora esperando para pasar el control de seguridad y embarcar, informa Laura Franch. El aeropuerto llegó a quedarse sin suministro eléctrico y tuvo que funcionar con generadores de emergencia, según confirmó un técnico de Manises. Los cientos de pasajeros de los vuelos afectados esperaron horas sin tener más información, ni saber si podría despegar su vuelo. “Yo esto no lo había visto en la vida”, aseguraba Paloma Argaya en la fila para pasar el control de seguridad.

Metrovalencia notificó que, también como consecuencia de la lluvia, había quedado interrumpido el servicio entre Alginet y Castelló. También se cortaron cerca de una docena de carreteras de la provincia. Por su parte, el Consorcio Provincial de Bomberos estableció un refuerzo por el episodio de lluvias, con una dotación más en cada parque, refuerzos en la sala de control y puntos de vigilancia de los ríos y cauces mediante brigadistas forestales.

La vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Sara Aagesen, contactó durante la jornada con los presidentes de la Comunidad Valenciana, Juan Francisco Pérez Llorca; de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, y de la Región de Murcia, Fernando López Miras, ante la activación de avisos rojos por fenómenos meteorológicos adversos en sus territorios, según informaron fuentes de su departamento.

En esa llamada, la vicepresidenta se puso a disposición de los tres presidentes autonómicos para atender cualquier necesidad. Por su parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pidió ayer a los ciudadanos mantener la “máxima precaución” ante el temporal y aconsejó informarse a través de la Aemet y otras fuentes oficiales de la situación. En su cuenta de la red social X, Sánchez agradeció además “la labor de todos los servicios de emergencia que trabajan por la seguridad de Efectivos de Infoca, ayer en Cártama (Málaga).