Feijóo aleja el congreso del PP a 2026 pese a la intensa batalla ideológica en la derecha
Si no hay cambio de planes, la formación estará nueve años sin celebrar un cónclave ordinario, el único que permite el debate de ideas. Hacerlo antes, argumenta, “es de partidos que pierden”
Alberto Núñez Feijóo no tiene ninguna prisa por abrir el melón del congreso del PP. El líder del partido fue elegido presidente de los conservadores en un congreso extraordinario celebrado en abril de 2022 en Sevilla tras la guerra entre Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso. Un cónclave que, por su carácter excepcional desde el punto de vista orgánico, no permitía una discusión ideológica ni cambios estatutarios. El último congreso ordinario del PP ...
Alberto Núñez Feijóo no tiene ninguna prisa por abrir el melón del congreso del PP. El líder del partido fue elegido presidente de los conservadores en un congreso extraordinario celebrado en abril de 2022 en Sevilla tras la guerra entre Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso. Un cónclave que, por su carácter excepcional desde el punto de vista orgánico, no permitía una discusión ideológica ni cambios estatutarios. El último congreso ordinario del PP se celebró en febrero de 2017, cuando se eligió a Mariano Rajoy. Ahora, en un contexto de batalla ideológica en la derecha, con el auge de los extremistas, y mientras algunos de los grandes partidos ―incluido el PSOE― van a afrontar ese proceso orgánico este otoño, Feijóo ha querido ahuyentar expresamente el debate congresual en el PP, que se empieza a escuchar todavía de forma muy soterrada en algunos sectores de su partido. El líder del PP aseguró este martes que su intención es posponerlo a 2026, cuando se cumplan cuatro años desde el suyo, lo que implica que el PP estará si es así nueve años sin celebrar un cónclave ordinario. Aunque dejó una rendija abierta a un adelanto, Feijóo se afanó en argumentar que el PP no necesita un congreso porque eso lo hacen “partidos que pierden” las elecciones, y no el PP, que ha “ganado las últimas cuatro”.
Feijóo ha modificado la posición del PP en algunos asuntos delicados en el tiempo que lleva como presidente (como el aborto o los vientres de alquiler) y también ha manifestado su deseo de modificar el sistema de primarias del PP (para volver al modelo de compromisarios, no en las primarias asamblearias), que obligaría a un cambio de estatutos, que solo puede abordarse en un congreso. Sin embargo, de momento el líder del PP apuesta por alejar la posibilidad de un adelanto, consciente también de que todos esos debates de ideas ―y otros nuevos, como el fenómeno de la inmigración― resultan difíciles de consensuar entre las dos almas de su propio partido, y mucho menos generan consenso en toda la derecha.
Este martes, en una entrevista en La Mirada Crítica de Telecinco, Feijóo lanzó la patada hacia delante, con el argumento de que un partido que gana elecciones no tiene por qué celebrar un proceso orgánico. “Posibilidades siempre hay de tomar decisiones. En este momento no hemos tomado ninguna decisión, porque nuestro partido es un partido que ha ganado las últimas cuatro elecciones. Hemos ganado las autonómicas, las municipales, las generales y las europeas. Yo comprendo que los partidos que pierden deben replantear su estrategia. No vamos a caer en la soberbia de decir, bueno hemos ganado y todo lo hacemos bien, seguro que algo podemos mejorar, pero en principio el congreso está previsto para el año 2026 conforme al calendario inicialmente previsto. A mí me han elegido en abril del año 2022, finaliza mi mandato en abril de 2026, pues lo haremos con normalidad”.
Feijóo esgrime el argumento de las victorias electorales aunque su principal rival, Pedro Sánchez ―que quedó segunda fuerza en las generales, pero en cambio pudo armar una mayoría para gobernar y está en La Moncloa― sí va a celebrar el congreso del PSOE del 29 de noviembre al 1 de diciembre próximos. Génova justifica esta diferencia en que el PSOE “convoca por la debilidad interna de su secretario general y para iniciar una purga de aquellos que son críticos con Pedro Sánchez”, y en que “la situación del PSOE nada tiene que ver con la del Partido Popular”, pero el líder del PP reconoció este martes también que tampoco puede reivindicar internamente haber cumplido todos los objetivos con los que llegó a la presidencia del partido. “Antes tenemos muchos congresos que hacer, tenemos congresos autonómicos, provinciales... pero el partido está funcionando con normalidad, y estamos ganando las elecciones...”, defendió Feijóo. “Es verdad que nos gustaría ganarlas con más margen, no se lo discuto, y nos gustaría, porque sería bueno para España, estar gobernando el Gobierno central. No lo hemos conseguido, y por tanto no hemos conseguido el cien por cien de los objetivos”.
Génova se afana en zanjar cualquier debate sobre el congreso, y a principios de septiembre lanzó un desmentido rotundo sobre la posibilidad de que Feijóo sopesaba convocar el cónclave a principios de 2025. Fuentes del gabinete del líder popular insisten en que esa posición sigue plenamente vigente, y en que “los plazos son los que marcan nuestros estatutos y eso nos sitúa en abril de 2026″. Pero tanto el propio Feijóo este martes― admitiendo que “posibilidades siempre hay de tomar decisiones” y que “en este momento” no se ha “tomado ninguna decisión”― como otras fuentes del partido abren la puerta a que esa intención pueda reconsiderarse. Estas otras fuentes, conocedoras de la reflexión intramuros del PP, señalan que internamente “se está barruntando cómo y cuándo” celebrar el congreso, sin que esté decidido. De momento, Feijóo tiene la ventaja de que las voces populares que creen que sí habría que adelantarlo no están haciendo ningún ruido.