La mitad de los conductores muertos en accidente de tráfico en 2023 había consumido alcohol o drogas
Un informe del Instituto Nacional de Toxicología revela que en el caso de los peatones esa relación se aprecia en seis de cada diez fallecidos
La relación entre el consumo de alcohol y drogas y los accidentes de tráfico sigue siendo muy alta. Lo demuestra el informe Víctimas mortales de Tráfico 2023, realizado por el Instituto Nacional de Toxicología y presentado este jueves en la sede madrileña del Ministerio de Presidencia y Justicia. Los datos revelan que el 53,6% de los conductores fallecidos en siniestros viales y a los que se hizo autopsia habían consumido alcohol, drogas o psicotrópicos, o una mezcla de las tres sustancias. Esto implica que ...
La relación entre el consumo de alcohol y drogas y los accidentes de tráfico sigue siendo muy alta. Lo demuestra el informe Víctimas mortales de Tráfico 2023, realizado por el Instituto Nacional de Toxicología y presentado este jueves en la sede madrileña del Ministerio de Presidencia y Justicia. Los datos revelan que el 53,6% de los conductores fallecidos en siniestros viales y a los que se hizo autopsia habían consumido alcohol, drogas o psicotrópicos, o una mezcla de las tres sustancias. Esto implica que la mitad de las víctimas mortales de accidentes en la carretera el año pasado que iban al volante infringían las normas de circulación. En el caso de los peatones, el porcentaje sube hasta el 58,5%, es decir, casi seis de cada diez fallecidos. La presentación del informe se produce en plena campaña de verano de la Dirección General de Tráfico (DGT), en la que el organismo espera millones de desplazamientos por las carreteras españolas.
La directora en funciones del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, Carolina Sánchez de la Torre, ha destacado que se trata de una muestra de ámbito nacional en la que también han participado los institutos de medicina legal de siete comunidades autónomas que cuentan con laboratorios especializados: Aragón, Cataluña, Baleares, País Vasco, Galicia, Murcia y Comunidad Valenciana. En concreto, durante el año pasado fueron analizadas muestras de las 1.197 personas (862 conductores, 200 peatones y 135 acompañantes) que fallecieron en carretera y a las que después se les practicó la autopsia. El objetivo era comprobar si habían consumido alcohol, drogas de abuso (cocaína, cannabis, anfetaminas, opiáceos o ketamina) o psicofármacos (benzodiacepinas, antidepresivos, opioides, antisicóticos o antiepilépticos).
Entre los 862 conductores fallecidos, el 88% (758) eran hombres y el 12% mujeres (104). El 33% había consumido alcohol: presentaban más de 0,3 gramos de alcohol por litro de sangre, el límite legal para conductores profesionales y noveles. Le siguen las drogas (23%) y los psicotrópicos (16%). Las muestras que dieron positivo en alcohol arrojaban tasas muy altas (entre 1,21 y 2 gramos de alcohol por litro de sangre) en el 67% de los casos. Esos niveles de alcohol implican un delito contra la seguridad vial. “El problema es que con estas tasas se pierde la percepción de la visión, se aumenta el tiempo de reacción y se reduce la coordinación de los movimientos, con las consecuencias que ello tiene para la conducción”, ha explicado Sánchez de la Torre.
La cocaína (13,2%) y el cannabis (8,9%) son las drogas más presentes en las muestras analizadas de los conductores fallecidos. Le siguen, de lejos, las anfetaminas (2%), los opiáceos (1,4%) y la ketamina (1,2%). Sin embargo, estas tres últimas están subiendo ligeramente respecto al año pasado, mientras que la cocaína registra un leve descenso. Esta es consumida principalmente por personas de entre 35 y 64 años; el cannabis, por el contrario, es más habitual en los menores de 34 años. Un dato que ha destacado la directora en funciones de Toxicología es que en el 4,5% de los casos (21) la víctima había consumido las tres cosas: alcohol, drogas y psicotrópicos. La combinación de alcohol y cocaína se dio en el 54,3% de los positivos; y alcohol con cannabis, en el 19,1%. La edad media de los conductores fallecidos era de 47 años.
En cuanto a los peatones fallecidos, de los 200 analizados, 64 eran mujeres (32%) y 136 hombres (68%). El grupo más numeroso es el de mayores de 65 años, con 85 fallecidos. El 58,5% de las muestras de peatones analizadas dio positivo en alguna sustancia, siendo la más numerosa el alcohol (29%), seguida de los psicotrópicos (27%) y las drogas (22%). Y ocho de cada diez fallecidos que dieron positivo en alcohol tenían tasas altas (entre 1,21 y 2 gramos de alcohol por litro de sangre). Por drogas, la más frecuente fue la cocaína (43,2%), tras la cual se sitúan el cannabis (34,1%) y la ketamina (11,4%). Dentro de los psicofármacos destacan las benzodiacepinas, con un 64%. La edad media de los peatones fallecidos fue de 58 años.
En la presentación también han participado la directora general para el Servicio Público de Justicia, María del Àngels García Vidal; el delegado del Gobierno del Plan Nacional sobre Drogas, Joan Ramón Villalbí; y el director general de Tráfico, Pere Navarro. Este último ha destacado la importancia de este tipo de informes, junto con la Memoria anual del Balance de Siniestralidad Vial de la DGT y la Memoria de la Fiscalía General del Estado. “No conozco otro país que lo haga y tiene un valor incalculable. Es una fotografía de la realidad, no son meras hipótesis”, ha dicho. Navarro ha puesto de relieve que los fines de semana los fallecidos con presencia de alcohol son sobre todo jóvenes, y entre semana, mayores. Ha recordado, por último, que Tráfico realizará este año 400.000 pruebas de alcoholemia más que en 2023.
594 víctimas mortales desde enero
En lo que va de año, son ya 594 las personas fallecidas en accidentes de tráfico, un 3% más que en el mismo período de 2023, según los datos actualizados que ha ofrecido este jueves el director general de Tráfico (DGT), Pere Navarro. El mayor número de siniestros se produce en autovías y autopistas, dadas las altas velocidades que se alcanzan en estas carreteras. Esta semana la DGT ha puesto en marcha una campaña especial de vigilancia de la velocidad, donde aumentará hasta el domingo el uso de los radares móviles.
De los 594 fallecidos, 158 eran motoristas, lo que, según Navarro, es una cifra muy alta. El parque móvil de motos es de unos cinco millones de vehículos registrados. La mayor siniestralidad en este periodo del año se está dando durante los días laborables.