¿Qué tiempo va a hacer en otoño? Muy cálido y lluvioso

Con el comienzo del otoño astronómico a las puertas, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha presentado este jueves su predicción estacional, que apunta de forma “muy robusta” a que será más cálido, incluso mucho más cálido de lo normal, y también más lluvioso, aunque en ese caso “la incertidumbre es mayor”. “Es muy destacable que vamos hacia un trimestre muy cálido, y no digo cálido, sino muy cálido”, ha subrayado en rueda de pren...

Con el comienzo del otoño astronómico a las puertas, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha presentado este jueves su predicción estacional, que apunta de forma “muy robusta” a que será más cálido, incluso mucho más cálido de lo normal, y también más lluvioso, aunque en ese caso “la incertidumbre es mayor”. “Es muy destacable que vamos hacia un trimestre muy cálido, y no digo cálido, sino muy cálido”, ha subrayado en rueda de prensa el portavoz de Aemet, Rubén del Campo, para recordar que los calificativos que usa Aemet para hablar del comportamiento de las temperaturas son cálido, muy cálido o extremadamente cálido. “Que vaya a ser muy cálido quiere decir que va a estar entre el 20% de los que mayor temperatura medida han registrado”, ha contextualizado el experto.

Según los cálculos del Observatorio Astronómico Nacional, el otoño en el hemisferio norte comenzará el próximo sábado 23 de septiembre a las 8.50, hora española, aunque en términos meteorológicos se considera que la estación arrancó ya el 1 de septiembre. A día de hoy para la ciencia es imposible pronosticar a largo plazo eventos concretos, como olas de frío, temporales de lluvias o nevadas, ya que ese tipo de predicción llega a entre 7 y 10 días vista, pero los modelos meteorológicos sí son capaces de avanzar predicciones estacionales, que proporcionan información probabilística en términos de precipitación y temperatura. Es decir, que se trata de tendencias generales y a grandes rasgos. Estas predicciones, que tienen cada vez más importancia para sectores productivos, que van desde la moda a la producción de energías renovables, son menos fiables en otoño que en verano, sobre todo en cuanto a las lluvias.

La predicción otoñal ―que abarca los meses de octubre, noviembre y diciembre― indica que la probabilidad de que sea un trimestre cálido es muy alta, del 70%, es más, hay entre el 50 y 70% de probabilidad de que sea muy cálido. “El último otoño frío, con temperaturas por debajo de lo normal, que se vivió en España fue el de 2010, desde entonces, tres han sido normales y, el resto, o cálidos, o muy cálidos o extremadamente cálidos”, ha detallado el experto a este diario. Aunque es difícil cuantificar este calificativo en una cifra, supondría una temperatura media al menos de casi un grado por encima de lo normal. El otoño pasado fue el más cálido desde que hay registros, empatado con el de 1983, con una anomalía de 1,9° por encima de lo habitual.

En cuanto a las lluvias, hay buenas noticias, ya que los modelos pintan un trimestre pasado por agua, aunque en este caso la señala “no es tan clara”. En concreto, hay entre un 40% y un 50% de probabilidades de que el trimestre sea más lluvioso de lo normal frente a entre un 20% y un 40% de que las lluvias sean inferiores a lo habitual. “La señal es más marcada en el noroeste, donde sí está más claro que puede ser más lluvioso”, ha matizado el portavoz. “En las lluvias, no nos podemos mojar tanto, es un parámetro más escurridizo en estas latitudes porque con uno o dos episodios muy lluviosos ya se puede alcanzar el promedio de toda la estación”, ha confesado el portavoz de Aemet.

A pesar de que el verano ha sido “muy húmedo”, España sigue en la situación de sequía de larga duración ―que lleva tres años seguidos lloviendo por debajo de lo normal― en la que se instaló el pasado diciembre. Durante este año hidrológico, que comenzó el 1 de octubre y al que le quedan apenas 20 días para terminar, se habían recogido de media hasta el 10 de septiembre 529,5 litros por metro cuadrado, cuando lo normal habrían sido 607. El déficit de lluvia es del 13%. ¿Podría un otoño lluvioso paliar la situación? “Sería necesario que el otoño fuera no solo lluvioso, sino de récord, para salir de la sequía”, concluye Del Campo.