Feijóo viaja a Portugal para reunirse con el presidente Rebelo de Sousa en paralelo al viaje de Sánchez a China
El PP critica la política exterior del Gobierno por “escasa y mediocre” y subraya que el jefe del Ejecutivo español “no lleva el título de interlocutor” de la UE en su reunión con Xi Jinping
La política exterior es también campo de batalla política entre el Gobierno y el PP. Pedro Sánchez cuenta con la ventaja de un perfil internacional ya trabajado en los cuatro años de legislatura y de que España asumirá en el segundo semestre la presidencia rotatoria de la Unión Europea, así que Alberto Núñez Feijóo sabe que tiene que acelerar la construcción de su rol exterior para poder competir en ese ámbito con el presidente del Gobierno socialista. El primer ejemplo de esa pelea de posiciones entre los dos líderes políticos se va a hacer visible este jueves, cuando Sánchez y Feijóo van a c...
La política exterior es también campo de batalla política entre el Gobierno y el PP. Pedro Sánchez cuenta con la ventaja de un perfil internacional ya trabajado en los cuatro años de legislatura y de que España asumirá en el segundo semestre la presidencia rotatoria de la Unión Europea, así que Alberto Núñez Feijóo sabe que tiene que acelerar la construcción de su rol exterior para poder competir en ese ámbito con el presidente del Gobierno socialista. El primer ejemplo de esa pelea de posiciones entre los dos líderes políticos se va a hacer visible este jueves, cuando Sánchez y Feijóo van a coincidir a la vez en dos destinos internacionales diferentes. Mientras el jefe del Ejecutivo viaja a China y se reunirá con el presidente chino, Xi Jinping, el líder del PP se desplaza a Portugal, donde se entrevistará con el presidente de la República, Marcelo Rebelo de Sousa.
Feijóo se verá también en Lisboa con el presidente del Partido Social Demócrata, Luis Montenegro, y con el presidente de la Cámara Municipal de Lisboa, Carlos Moedas, todos ellos políticos portugueses de centroderecha. No se verá con el primer ministro, António Costa, que es socialdemócrata como Sánchez. Con su viaje a Portugal, explica el PP, Feijóo traslada la relevancia que tiene para su proyecto la política exterior en un año en el que España asumirá la Presidencia de la UE. La semana pasada se reunió con todos los embajadores de la UE, con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y con varios comisarios de la UE. El PP asegura que lleva preparando un mes el desplazamiento de Feijóo a Portugal y la coincidencia de fechas con el de Sánchez a China ha sido casual.
El objetivo del viaje del líder del PP a Portugal se enmarca en el interés de Feijóo de crear una alianza de intereses entre los dos países, aseguran en su equipo. “Tras el Brexit se está produciendo un reajuste de fuerzas y posiciones entre los Estados miembros en el seno de la UE. Portugal y España deben aprovechar la coyuntura para profundizar al máximo en las complicidades bilaterales y operar en muchos asuntos de forma conjunta en defensa de los intereses comunes. Para el PP sería bueno, incluso, la adopción de posturas comunes antes de las reuniones del Consejo de la UE y los Consejos de Ministros sectoriales porque haría mucho más fuerte a los dos países, teniendo en cuenta, además, que España y Portugal son los países europeos, tras el Brexit, con mayor proyección y vocación atlántica”, defienden en el PP.
Mientras Feijóo se encuentre en Portugal, Sánchez estará en China reunido con Xi Jinping en un momento especialmente relevante, ya que el líder de la superpotencia asiática ha estado recientemente en Moscú, donde se ha ofrecido como mediador para buscar una salida a la guerra de Ucrania y ha planteado un plan de paz. Sánchez está, no obstante, instalado en las posiciones europeas y de la OTAN, y, por tanto, más cercano a EEUU. De hecho, el presidente español visitó recientemente a Volodímir Zelenski en Kiev y le trasladó su apoyo incondicional. Ahora bien, en el encuentro, Sánchez tendrá ocasión de conocer de primera mano el plan de Xi y logrará información de la posición de Moscú.
El PP no ha criticado la visita de Sánchez a China, pero la fundación afín a los populares y presidida por José María Aznar, FAES, sí ha publicado una nota crítica con ese encuentro, titulada “China y el peligro de la vanidad”, en la que advierte del “tramposo” proceso de paz que abandera China para Ucrania, “un proceso sinónimo de rendición de Zelenski ante Putin” que “puede resultar una tentación irresistible para Sánchez”. La dirección del PP no entra a valorar el viaje del presidente en los mismos términos que FAES, pero sí resalta que no hay nada de “excepcional” en que un presidente español viaje a China y, al contrario, “elevar a categoría excepcional este viaje es una exageración impropia”del Gobierno que tiene que ver con una “política exterior bastante escasa y mediocre”, afirman fuentes de la cúpula popular. Los populares recuerdan que Sánchez “no lleva a este viaje título de interlocutor de la UE, puesto que todavía no ha comenzado la presidencia rotatoria española” y apuntan, para restar importancia al encuentro del presidente español con el chino, que la presidenta de la Comisión, Von der Leyen, también tiene previsto un viaje en abril a China.