Podemos carga contra la ministra de Justicia por asegurar que es “sencillo” probar la violencia en las agresiones sexuales

Llop defiende la necesidad de reformar la ‘ley del solo sí es sí' para frenar las rebajas de penas y Montero cree que la postura socialista obliga a las víctimas a un “calvario probatorio”

La ministra de Justicia, Pilar Llop, este martes en la Cadena SER.Foto: Cadena Ser | Vídeo: Cadena Ser

La reforma de la Ley de Libertad Sexual, conocida como del solo sí es sí, sigue tensando este martes la relación entre PSOE y Podemos, socios del Gobierno de coalición. La ministra de Justicia, Pilar Llop, ha defendido la necesidad de sacar adelante este cambio normativo ante la crisis provocada por el goteo de rebajas de penas a agresores sexuales; y sus palabras...

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La reforma de la Ley de Libertad Sexual, conocida como del solo sí es sí, sigue tensando este martes la relación entre PSOE y Podemos, socios del Gobierno de coalición. La ministra de Justicia, Pilar Llop, ha defendido la necesidad de sacar adelante este cambio normativo ante la crisis provocada por el goteo de rebajas de penas a agresores sexuales; y sus palabras en la SER, asegurando que es “sencillo” demostrar que ha habido violencia o intimidación en una agresión sexual porque “con una herida” ya se acredita, han indignado en las filas de Podemos. Varios dirigentes del partido minoritario de la coalición de Gobierno han cargado contra la ministra por lo que entienden que es una vuelta al modelo anterior, es decir, la distinción entre las agresiones sexuales que se producen con violencia o intimidación y las que no.

Llop ha negado que la reforma afecte al consentimiento. “Habrá que probar la violencia o la intimidación porque estamos en un Estado de derecho, pero no hay que probar el consentimiento [en los casos en los que hay violencia]. Se está confundiendo a la opinión pública poniendo otra vez el foco en lo que no existe, en un problema sobre el consentimiento”, ha afirmado en la entrevista. “Ahora, si se demuestra que hay violencia o intimidación, que es muy sencillo probarlo porque con una herida ya se puede probar que ha habido violencia... ya no hace falta que la víctima pruebe que ha habido consentimiento”, ha añadido.

La ministra ha augurado que con la reforma que propone el PSOE “no se van a evitar las revisiones” —es decir, no se va a frenar el goteo de rebajas de pena a agresores ya condenados—, “pero sí las disminuciones de condenas”, en alusión a que las futuras condenas no serán más bajas de lo que eran con la ley anterior a la del solo sí es sí. La ministra ha insistido en que “el consentimiento queda absolutamente intacto” y seguirá siendo el eje de la ley, como reclama Podemos. Por su parte, la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, ha hecho una llamada a la “serenidad”: “Encontrémonos, sigamos trabajando por nuestro país, ensanchando derechos y diciéndole a la sociedad que más que nunca vamos a cuidar la coalición progresista de España”, ha manifestado.

Legislar “a golpe de titular”

Tras la entrevista a la ministra de Justicia, la titular de Igualdad, Irene Montero, de Unidas Podemos, ha considerado que la propuesta socialista “plantea volver al esquema penal de la violencia o la intimidación, que es un calvario probatorio” que obliga a “probar con tu cuerpo la violencia ejercida contra ti para que se considere que has sufrido una agresión sexual”. “Vamos a trabajar para preservar el consentimiento como centro del Código Penal y para no volver a ese Código Penal de La Manada basado en la violencia y la intimidación, que suponía que a las mujeres se les preguntase si habían cerrado bien las piernas o si se habían resistido”, ha dicho Montero al llegar a la sesión plenaria del Senado. “Quiero que todas mujeres sepan que sabemos que no es fácil probar la violencia o la intimidación, más bien al contrario. Supone un calvario probatorio. Supone tener que demostrar las heridas, las marcas de esa violencia en el cuerpo. Y eso es un calvario probatorio que con la ley del solo sí es sí se acabó”, ha añadido la ministra de Igualdad.

Ya durante la sesión de control al Gobierno, a preguntas de la diputada del PP Patricia Rodríguez Calleja, Montero ha insistido: “Estamos en serio riesgo de volver al Código Penal de La Manada [...] El Código Penal de la violencia o la intimidación, en el que las mujeres, para que se considere que hay agresión sexual, tienen que probarlo con las marcas de su cuerpo”. “El sistema basado en la violencia y la intimidación hace que las mujeres huyan del sistema judicial”, ha concluido la ministra.

La delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, ha acusado al PSOE de legislar “a golpe de titular” con la ley del solo sí es sí, dejándose llevar por el “alarmismo social”, informa Efe. Rosell también ha manifestado, en una entrevista en Rac1, su sorpresa por el “tono” de las críticas de la ministra Pilar Llop sobre la “confusión” que se está produciendo en torno a la reforma de la Ley de Libertad Sexual.

La ministra de Justicia en un acto oficial el pasado 23 de enero. Foto: EFE | Vídeo: Cadena Ser

Varios dirigentes de Podemos han interpretado igualmente las palabras de Llop como una confirmación de que los socialistas quieren volver al Código Penal con el que la Audiencia de Navarra no vio violencia o intimidación en la violación grupal de La Manada en 2016. El exvicepresidente del Gobierno y exlíder de Podemos Pablo Iglesias, citando las palabras de Llop sobre la facilidad de probar violencia, escribió en Twitter: “Juez extraordinario de la manada: ‘No vi violencia; vi ambiente de jolgorio”. Con ese mismo Código Penal, el Tribunal Supremo revocó la primera sentencia en 2019 y, al sí apreciar violencia o intimidación, elevó la condena: de los 9 años iniciales a 15.

El portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique también ha dado por confirmado que la propuesta socialista vuelve al Código Penal anterior. “Confirmado por ella misma [la ministra Llop]: quieren volver al Código Penal anterior; el de “¿cerraste bien las piernas?”, el de la “manada”, ha tuiteado Echenique.

La ministra de Justicia ha defendido la ley elaborada por el Ministerio de Igualdad, pero también la necesidad de frenar la situación “muy grave” que ha generado, en referencia a la rebaja de penas. “Estoy segurísima de que [la ley del solo sí es sí] es una norma pionera que será un espejo y un reflejo para países de nuestro entorno”, ha explicado Llop. “En una pequeña parte”, según Llop, los ajustes de penas originados por la unión en un solo delito de los antiguos abusos sexuales y las agresiones sexuales han derivado en revisiones de sentencias y bajadas de penas a agresores ya condenados. “A todos nos toca muy de cerca y tenemos que poner una solución”, ha justificado la ministra de Justicia.

Desde que entró en vigor la Ley de Libertad Sexual, en octubre pasado, más de 400 agresores sexuales han visto reducida su pena porque la nueva norma contempla castigos más bajos para algunos tipos de agresiones. Llop ha incidido en que no quiere generar “falsas expectativas” y que la reforma impulsada por los socialistas “no va a arreglar la situación que se ha consolidado hasta ahora”. “Estamos poniendo un freno a esos desajustes penológicos de ahora en adelante”, ha explicado.

“Más barato que robar”

La ministra ha añadido que la ley del solo sí es sí ha dicho que no puede aceptarse que en un país como España, que es pionero en la lucha contra la violencia de género, salga más barato agredir sexualmente con violencia a una mujer que robar. “El robo con violencia e intimidación está castigado con pena de dos a cinco años y la agresión sexual con violencia e intimidación con una pena de uno a cuatro años”, ha explicado. “¿Desde cuándo vale más la propiedad que la libertad sexual de una persona? Esto lo tenemos que corregir”, ha manifestado. La ministra, que fue cofirmante de la ley que fijó esas penas, cree que hay margen todavía para el entendimiento con Podemos, ya que ahora comienza la fase de tramitación parlamentaria.

La proposición de ley para la reforma de la ley del solo sí es sí fue registrada por el PSOE este lunes en el Congreso. Jaume Asens, presidente del grupo parlamentario de Unidas Podemos, consideró ese mismo día, en una entrevista en TVE, que todavía había “margen para el acuerdo”, y dejó en manos de los socialistas decidir si miraban “hacia el PP o hacia la izquierda” para sacarla adelante en el Congreso.

El PP, a favor de la reforma

Los socialistas quieren tramitar el cambio legal en febrero, pero para ello necesitan recabar apoyos parlamentarios. Los aliados parlamentarios del Ejecutivo acogieron con recelo la iniciativa y el PP se ha mostrado dispuesto a permitir que prospere. La formación conservadora considera que la proposición del PSOE para reformar la ley del solo sí es sí es “exacta en lo sustancial” a la iniciativa que ellos habían registrado en el Congreso, que pretendía también revertir la rebaja de penas a algunos agresores sexuales. En consecuencia, el PP votará a favor de la toma en consideración de la proposición de los socialistas, según ha confirmado este martes la secretaria general del PP, Cuca Gamarra. Los populares aseguran que van a actuar “con responsabilidad” en este asunto y facilitarán que la ley del solo sí es sí pueda ser reformada sin demora, informa Elsa G. Blas.


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