Pedro Sánchez: “La ‘ley del solo sí es sí’ ha tenido efectos indeseados y me quedo corto”

El presidente, reunido con los diputados y senadores del PSOE, afirma que mantendrá el diálogo con sus socios sobre la reforma de la norma, pero insiste en que la prioridad es “resolver el problema”

Intervención de Pedro Sánchez ante los parlamentarios del PSOE. En la foto, a su llegada al Congreso, antes de dirigirse a los diputados y senadores de su partido.

La expectación era máxima en el PSOE, inmerso en uno de los momentos más delicados de la legislatura con Unidas Podemos. Pedro Sánchez ha roto el silencio que desde hace días mantenía respecto a la reforma de la Ley de Libertad Sexual o ley del solo sí es sí emprendida en solitario por su partido, sin restarle gravedad a la alarma social provocada por la treintena de excarcelaci...

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La expectación era máxima en el PSOE, inmerso en uno de los momentos más delicados de la legislatura con Unidas Podemos. Pedro Sánchez ha roto el silencio que desde hace días mantenía respecto a la reforma de la Ley de Libertad Sexual o ley del solo sí es sí emprendida en solitario por su partido, sin restarle gravedad a la alarma social provocada por la treintena de excarcelaciones y la rebaja de penas a unos 400 agresores sexuales desde la entrada en vigor de la norma el pasado octubre. “Resulta evidente que, transcurridos unos meses de su entrada en vigor, la ley ha tenido algunos efectos indeseados en su aplicación. Digo efectos indeseados y me quedo corto, porque nadie, ni el Ejecutivo, ni los grupos parlamentarios que la aprobaron, tuvimos como objetivo el que se rebajara la pena a ningún agresor”, ha afirmado el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE en una reunión que ha mantenido con los diputados y senadores de su partido en el Congreso.

Sánchez había evitado hasta hoy la más mínima mención en público a la respuesta del PSOE a la polémica ley, que al final no fue consensuada con Podemos. El presidente había dado la orden a principios de la semana pasada de darle una solución a los “efectos indeseados” de la legislación vigente tras meses de negociaciones infructuosas entre los ministerios de Justicia y de Igualdad. La última ronda de conversaciones tampoco prosperó y terminó en un callejón de salida, hasta que el PSOE decidió actuar por su cuenta ante la creciente presión social y tras constatar que el acuerdo con Podemos no era factible. Durante esta fase final de las negociaciones, Sánchez no se pronunció en ninguno de los actos de Gobierno ni en el mitin del sábado en el que presentó a Reyes Maroto como candidata al Ayuntamiento de Madrid.

“La pregunta es, ¿qué se hace cuando se plantea un problema en la aplicación de una ley? La respuesta es evidente: utilizar el diálogo, pero resolver el problema”, ha sentenciado este martes en el encuentro que los socialistas han mantenido en el Congreso. El aplauso instantáneo de los diputados y senadores ha evidenciado el nerviosismo que había en el PSOE, donde los principales barones no entendían la resistencia de Podemos y demandaban desde noviembre la modificación urgente de la ley por el impacto negativo que la rebaja de condenas tendría en las elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo.

El presidente ha justificado, sin entrar en tecnicismos, los cambios legales promovidos por el Ministerio de Justicia que dirige Pilar Llop, pese al rechazo del Ministerio de Igualdad de Irene Montero, para impedir la rebaja de penas futuras de agresores sexuales al tiempo que insistía en que la ley supone “un avance neto en los derechos de las mujeres” en un intento de encapsular el conflicto en la coalición. “Es una buena ley que surge de una amplia reivindicación feminista, que pretende garantizar que cualquier forma de agresión sexual sea perseguida sin culpabilizar nunca más a las víctimas y siempre al agresor que la comete, y que sitúa en el centro de cualquier tipo de relación el consentimiento explícito por parte de la mujer”, ha valorado Sánchez. Pero, tras esta defensa inicial, ha remarcado que las rebajas de penas se han convertido en un problema y el Gobierno tenía que intervenir. “Estoy convencido de que ningún diputado de ningún grupo, votara lo que votara, deseaba que se rebajara la pena a ningún agresor en ningún caso. No era el propósito de la ley, pero lo cierto y verdad es que existe un problema, porque se han producido rebajas de penas en algunos juzgados”, ha insistido.

“Vamos a hacer lo que hay que hacer, lo que es de sentido común y es correcto: defender el gran avance que es la ley y también resolver el problema para que en el futuro no se vuelva a repetir ninguna rebaja de penas”, ha enfatizado Sánchez, que se había reunido en el Congreso con los diputados y senadores socialistas para activar la maquinaria electoral y movilizarlos. El contexto es turbulento para el PSOE debido a la brecha abierta con Unidas Podemos y sus socios parlamentarios por la reforma de la ley del solo sí es sí, sin desdeñar la votación del jueves de la ley de bienestar animal, con los socios de la coalición enfrentados por la exclusión de los perros de caza. La fecha escogida para la celebración del encuentro, habitual en los inicios del periodo de sesiones, se produjo 24 horas después de que el PSOE registrase de manera unilateral una reforma “técnica” de Ley de Libertad Sexual, uno de los proyectos estrella del Ministerio de Igualdad y, por extensión, de Podemos.

Con un discurso eminentemente económico, salvo por el arranque de varios minutos dedicado en exclusiva a reivindicar “el compromiso histórico del PSOE con el movimiento feminista”, Sánchez se ha dirigido a sus parlamentarios para aunar los esfuerzos del Gobierno, sus diputados y senadores a fin de dar un impulso al partido a poco más de tres meses para las elecciones autonómicas y municipales. El PSOE se jugará en mayo todo su poder territorial, con nueve de los 12 gobiernos autonómicos en disputa y las alcaldías de 22 de las 52 capitales de provincia. Ferraz se ha marcado como prioridad lograr el bastón de mando en Barcelona o en Valencia, donde ya cogobiernan, y mantener ciudades como Sevilla y Valladolid.

Las palabras de Sánchez coinciden con el inicio de un año electoral en el que el PSOE busca rentabilizar en las urnas las más de 190 medidas que han aprobado en lo que va de legislatura, así como las iniciativas del Ejecutivo para paliar las consecuencias de la pandemia y la guerra en Ucrania. La última ocasión en la que se reunió la interparlamentaria fue el pasado 12 de septiembre con motivo del inicio del nuevo curso político. En esa reunión también se ratificó a Patxi López como nuevo portavoz del PSOE en el Congreso, que había sido nombrado por Sánchez durante el verano en sustitución de Héctor Gómez. “Somos un partido centenario, tenemos raíces profundas, fuimos arquitectos de la Constitución... Con el deber de ser un partido de gobierno, probablemente hoy, en el actual escenario político español, el partido de gobierno, os animo a seguir trabajando”, ha concluido Sánchez su alocución a los cuadros socialistas.

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