Adolfo Suárez Illana abandona la política y renuncia a su acta de diputado del PP
El hijo del expresidente del Gobierno Adolfo Suárez y secretario cuarto de la Mesa del Congreso, que fue rescatado por Pablo Casado, quiere “retomar ya las obligaciones profesionales y familiares” que había dejado aparcadas en su salto a la política
Adolfo Suárez Illana, de 58 años, hijo del expresidente del Gobierno Adolfo Suárez y secretario cuarto de la Mesa del Congreso por el PP, ha anunciado este martes que abandona la política y renuncia a su acta de diputado del PP, así como a la presidencia de la Fundación Concordia y Libertad vinculada a este partido. El jurista, que fue rescatado para la política por Pablo Casado, quien lo fichó en las primeras elecciones de 2019 como número dos por Madrid, asegura que s...
Adolfo Suárez Illana, de 58 años, hijo del expresidente del Gobierno Adolfo Suárez y secretario cuarto de la Mesa del Congreso por el PP, ha anunciado este martes que abandona la política y renuncia a su acta de diputado del PP, así como a la presidencia de la Fundación Concordia y Libertad vinculada a este partido. El jurista, que fue rescatado para la política por Pablo Casado, quien lo fichó en las primeras elecciones de 2019 como número dos por Madrid, asegura que se marcha para “retomar ya las obligaciones profesionales y familiares” que había dejado aparcadas, una vez el PP ha superado la crisis por la salida de Casado tras la llegada de Alberto Núñez Feijóo a la presidencia popular.
Suárez Illana ha hecho pública una carta de despedida en la que recuerda que hace algo más de cuatro años fue llamado para volver a la política cuando el PP estaba inmerso en “un proceso de transición, tras la crisis desatada en su seno por la inesperada moción de censura que se presentó contra el presidente [Mariano] Rajoy”. Fue Casado quien le recuperó tras una larga temporada apartado de la política, que había abandonado después de una sonora derrota cuando concurrió como candidato del PP a la presidencia de Castilla-La Mancha en 2003.
“Han sido cuatro años muy difíciles para nuestro partido”, sostiene el hijo del expresidente del Gobierno en referencia a esta última etapa en el PP, pero “el tiempo pasa y las circunstancias cambian”. “Hoy, gracias a Dios, al esfuerzo de muchos y a la buena gestión del presidente Feijóo, mi partido ha superado, con éxito muy notable, la crisis pasada y se encuentra, al fin, en una situación que augura la victoria en los próximos comicios”, defiende Suárez Illana, que añade que los motivos de su marcha son “retomar ya las obligaciones profesionales y familiares” que había “aparcado de forma temporal”.
El diputado afirma que ha acordado con Feijóo su relevo también al frente de la Fundación Concordia y Libertad, donde le situó Casado, y pide disculpas “por los errores cometidos”. Algunos de ellos fueron muy sonados. Como cuando se opuso a la ley de plazos del aborto con argumentos excéntricos como que “los neandertales también lo usaban, lo que pasa es que esperaban a que naciera y, entonces, le cortaban la cabeza”. En aquel momento aseguró también que “en Nueva York se acaba de aprobar una ley por la cual se permite el aborto después del nacimiento”, unas declaraciones por las que se tuvo que disculpar después, una vez “un despacho de Nueva York”, dijo, le confirmó que aquella información no era correcta. Lo que permitía la normativa estadounidense es la posibilidad de practicar un aborto hasta la semana 24 de gestación o más adelante si el feto es inviable o la vida de la madre corre peligro.
Suárez Illana se afilió en 2002 al PP. Poco después, José María Aznar le incluyó en el Comité Ejecutivo del partido. En 2003, concurrió como candidato a la presidencia de Castilla-La Mancha, enfrentándose a José Bono, y tras la derrota se retiró de la política sin asumir siquiera su acta de diputado regional. 16 años después, Pablo Casado lo recuperó como uno de sus fichajes estrella, pero tras sus primeros traspiés el partido dejó de promover su proyección pública. A pesar de ocupar un relevante cargo institucional ―como secretario cuarto de la Mesa del Congreso―, llevaba de perfil bajo desde 2019. En este tiempo destacaron algunos de sus gestos, como dar la espalda cada vez que subía a la tribuna de oradores un diputado de Bildu. Ahora, en la nueva etapa encabezada por Feijóo, ha optado por volver a abandonar la política, en principio de forma definitiva.