El vocal Macías reprocha al presidente del CGPJ que no le permitiera defender en pleno que había que informar sobre la reforma de la sedición
Uno de los miembros del sector conservador envía una queja por haber podido participar en el último debate y advierte de que si vuelve a ocurrir abandonará la sesión
El vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) José María Macías, uno de los miembros destacados del sector conservador, ha enviado un escrito al presidente suplente, el progresista Rafael Mozo, en el que se queja de que no pudo participar en el pleno de este jueves en el debate sobre si el órgano de gobierno de los jueces debía pronunciarse sobre la reforma del delito de sedición aunque el Gobierno ...
El vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) José María Macías, uno de los miembros destacados del sector conservador, ha enviado un escrito al presidente suplente, el progresista Rafael Mozo, en el que se queja de que no pudo participar en el pleno de este jueves en el debate sobre si el órgano de gobierno de los jueces debía pronunciarse sobre la reforma del delito de sedición aunque el Gobierno no hubiera reclamado su opinión. Macías culpa al también progresista Álvaro Cuesta de interrumpirle “de manera constante, reiterada y persistente”, y reprocha a Mozo su “insólita pasividad” y le advierte de que si vuelve a ocurrir un episodio similar, abandonará la sesión y recurrirá cualquier acuerdo que se produzca en su ausencia.
El pleno del CGPJ, coinciden los miembros del órgano, suele mantener un tono mucho menos áspero y exaltado que el que se vive habitualmente en las sesiones del Congreso de los Diputados o el Senado. No obstante, algunas veces se convierte en un guirigay en el que hablan todos a la vez. Eso fue, según varios vocales lo que ocurrió el jueves cuando el pleno debatía la propuesta presentada por ocho vocales conservadores (entre ellos Macías) para reclamarle al Gobierno que le consulte antes de reformar el delito de sedición, por el que fueron condenados Oriol Junqueras y otros ocho líderes independentistas a entre 9 y 13 años de cárcel. La tensión mayor se vivió entre Macías y Cuesta. El primero defendía que, aunque la reforma legal se hubiera tramitado por la vía exprés, que elude la petición de informe al CGPJ y otros órganos, el Consejo debía pronunciarse, y Cuesta, mientras Macías hablaba, contraponía argumentos.
El vocal conservador reprocha la “mala educación y falta de respeto” del progresista, al que acusa de un comportamiento “ajeno a los usos de este órgano en los nueve años de recorrido de su actual mandato”. ”Tal fue su constancia, reiteración y persistencia que tuve que desistir de intervenir”, señala en referencia a las interrupciones de Cuesta. Pero también carga duramente contra Mozo. “De que yo tuviera que desistir de intervenir y de que no pudiera producirse un debate sosegado tú fuiste el único responsable por tu insólita pasividad frente a ese comportamiento”, subraya, y le avisa de que “si se vuelve a producir un hecho semejante” abandonará la sesión y recurriré cualquier acuerdo que se produzca en su ausencia por considerarlo una lesión del artículo 23 de la Constitución. Este precepto garantiza el derecho de los ciudadanos a “participar en los asuntos públicos” y, añade Macías, a “poder desempeñarlos en toda su amplitud, y más si se trata de un órgano constitucional”.