Cae una red internacional de narcotráfico que transportaba la droga en falsos vehículos de conocidas empresas
La Guardia Civil detiene a 14 sospechosos, entre ellos un futbolista que jugó en Primera División
La Guardia Civil ha desmantelado un grupo que presuntamente se dedicaba al transporte internacional de droga por carretera en automóviles que camuflaban para que tuviesen la apariencia de vehículos comerciales de conocidas empresas. Los agentes han detenido a 14 personas en Madrid, Ciudad Real, Cádiz y Sevilla, y han incautado 9,5 kilos de cocaína.
El instituto armado ha concretado en una nota que los detenidos por delito...
La Guardia Civil ha desmantelado un grupo que presuntamente se dedicaba al transporte internacional de droga por carretera en automóviles que camuflaban para que tuviesen la apariencia de vehículos comerciales de conocidas empresas. Los agentes han detenido a 14 personas en Madrid, Ciudad Real, Cádiz y Sevilla, y han incautado 9,5 kilos de cocaína.
El instituto armado ha concretado en una nota que los detenidos por delitos de tráfico de drogas, usurpación de identidad y blanqueo de capitales son nueve hombres y cinco mujeres. Fuentes próximas a la investigación han indicado a Efe que la mayoría de detenciones se han practicado en Andalucía, y que entre los arrestados se encuentra un jugador de fútbol que ha llegado a jugar en Primera División.
La operación Marcaje, bautizada así por la presencia del futbolista entre los detenidos, se inició el pasado febrero con la identificación de un vehículo en el que la Guardia Civil halló una gran cantidad de dinero en efectivo, cuya procedencia el conductor no pudo justificar. Se abrió entonces una investigación en la que ha sido descubierta una presunta red dedicada al tráfico de drogas a nivel internacional. Los agentes han requisado, además de los 9,5 kilos de cocaína, casi un kilo de anfetamina, más de medio kilo de heroína y unos 25.000 euros en efectivo.
La organización serigrafiaba coches y furgonetas para hacerlos pasar por vehículos comerciales de conocidas empresas, entre ellas una de telefonía. Llevaban en ellos material propio de la empresa, como cables y herramientas, y sus conductores vestían los uniformes de los trabajadores de estas compañías para evitar controles policiales. Los miembros de la red tomaban muchas medidas de seguridad, sobre todo en los desplazamientos, durante los que intentaban asegurarse que no les seguían. La carga de droga y dinero se ocultaba en dobles fondos, espacios manipulados en un taller, propiedad de uno de los sospechosos, en la localidad sevillana de Tomares.
El grupo, según la Guardia Civil, movía gran cantidad de droga que procedía de Sudamérica, por lo que realizaban viajes frecuentes a Colombia y República Dominicana para organizar los envíos. Durante la investigación se comprobó que parte de los autores se trasladaba a Madrid con el fin de alejarse de otros distribuidores con los que mantenían una “enemistad manifiesta” y “posicionarse en un entorno más cercano de los principales proveedores de su red de distribución”.
Una vez que se identificó a todos los miembros de la organización y la función que desempeñaba cada uno, la Guardia Civil solicitó al Juzgado de Instrucción número 9 de Sevilla 12 entradas y registros en las provincias de Madrid, Ciudad Real, Cádiz y Sevilla, en los que participaron unos 200 agentes, que detuvieron a los 14 sospechosos.