El PSOE pide que el PP se siente en el banquillo por el espionaje a Bárcenas
El partido socialista, personado como acusación popular en el ‘caso Kitchen’, solicita 47 años y 10 meses de cárcel para el exministro Fernández Díaz
El PSOE, personado como acusación popular en el caso Kitchen, ha pedido a la Audiencia Nacional que siente al PP en el banquillo de los acusados por entender que este partido se benefició de la operación parapolicial de espionaje urdida en el Ministerio del Interior contra el extesorero popular Luis Bárcenas. Según consta en su escrito de acusación, los socialistas solicitan que, además de a los 11 procesados por el juez, se le abra también juicio oral a la formación conservadora como partícipe a título lucra...
El PSOE, personado como acusación popular en el caso Kitchen, ha pedido a la Audiencia Nacional que siente al PP en el banquillo de los acusados por entender que este partido se benefició de la operación parapolicial de espionaje urdida en el Ministerio del Interior contra el extesorero popular Luis Bárcenas. Según consta en su escrito de acusación, los socialistas solicitan que, además de a los 11 procesados por el juez, se le abra también juicio oral a la formación conservadora como partícipe a título lucrativo. En ese documento, la fuerza política encabezada por Pedro Sánchez plantea igualmente que se imponga una pena de 47 años y 10 meses de cárcel a Jorge Fernández Díaz, ministro del Interior de Mariano Rajoy y señalado como máximo responsable de la trama.
En el escrito, fechado este miércoles y al que ha tenido acceso EL PAÍS, el PSOE subraya: “No es posible entender, y mucho menos explicar aisladamente, las razones de la frenética actividad parapolicial que se pone en marcha en Kitchen sin ponerla en relación con una operativa mucho más amplia puesta en marcha por la dirección nacional del PP para defenderse de la acción de la justicia que investigaba Gürtel y sus diferentes ramificaciones territoriales”. La operación contra el extesorero popular se puso en marcha después de que se publicaran los papeles de Bárcenas y cuando este se disponía a tirar de la manta contra su propio partido en el caso Gürtel, sobre la caja b del PP y la corrupción en torno a las empresas de Francisco Correa.
Según el juez instructor Manuel García-Castellón, el objetivo de la trama “parapolicial” pasaba por arrebatar a Luis Bárcenas documentos comprometedores para altos cargos del PP. En esa línea, aunque la instrucción quedó circunscrita al Ministerio del Interior y la Policía, los socialistas inciden en que la operación irregular se acometió con Rajoy como presidente del Gobierno. “[Existía una] situación de extrema gravedad para lo máximos dirigentes del PP cuando se activan diversas iniciativas por parte de los procesados para llevar a cabo lo que posteriormente se ha venido conociendo como Operación Kitchen”, expone el PSOE. Entre sus maniobras, la cúpula policial captó al chófer de Bárcenas como confidente y le pagó con fondos reservados.
Por ello, los socialistas quieren que el PP se siente en el banquillo como responsable a título lucrativo y responda por todo el dinero de los fondos reservados que se gastó en la operación. La formación conservadora, actualmente liderada por Alberto Núñez Feijóo, ya acumula tres condenadas por el caso Gürtel.
En su escrito de acusación, el PSOE pide que se imponga más de 30 años de cárcel al resto de procesados: a Francisco Martínez, mano derecha de Fernández Díaz y ex secretario de Estado de Seguridad; a Eugenio Pino, jefe de la Policía con Rajoy; a otros siete comisarios e inspectores jefe (José Manuel Villarejo, Enrique García Castaño, José Luis Olivera, Marcelino Martín Blas, Bonifacio Díez, Andrés Gómez Gordo y José Ángel Fuentes Gago); y al exconductor de Bárcenas, Sergio Ríos. El extesorero popular ya presentó el martes su escrito de acusación, donde también pide altas penas de prisión para los implicados.
Los socialistas solicitan que declare en el juicio como testigo el actual consejero de Presidencia de la Comunidad de Madrid, Enrique López; así como otros excargos del PP, como Mariano Rajoy, expresidente del Gobierno y del partido; María Dolores de Cospedal, ex secretaria general de la formación y exministra de Defensa; y Juan Ignacio Zoido, exministro del Interior.