El PP: “El problema de España es Sánchez”
Fuera del discurso oficial, voces del partido admiten que la jugada es “audaz” y “buena”
Casi al mismo tiempo que se anunciaba esta mañana que Pedro Sánchez remodelaría su Gobierno este sábado, sin que se tuviera conocimiento aún de cuáles iban a ser los cambios, el PP adelantaba ya su oposición. “El problema es Sánchez”, avanzaba Cuca Gamarra, la portavoz parlamentaria, a las 9.30 de la mañana, anticipando la línea de desgaste que iba a seguir el PP: los ministros no son el problema, es el presidente socialista, que debe salir de La ...
Casi al mismo tiempo que se anunciaba esta mañana que Pedro Sánchez remodelaría su Gobierno este sábado, sin que se tuviera conocimiento aún de cuáles iban a ser los cambios, el PP adelantaba ya su oposición. “El problema es Sánchez”, avanzaba Cuca Gamarra, la portavoz parlamentaria, a las 9.30 de la mañana, anticipando la línea de desgaste que iba a seguir el PP: los ministros no son el problema, es el presidente socialista, que debe salir de La Moncloa convocando elecciones anticipadas. Después, conocida ya la remodelación, los populares han puesto el foco en dos cuestiones: que el presidente ha destituido a su círculo más cercano y que no ha reducido el tamaño del Consejo de Ministros, con 22 carteras, uno de los más amplios de la democracia. “El problema de España es Sánchez, el que se tiene que ir es él”, zanja Pablo Casado.
El PP desdeña la remodelación gubernamental y carga contra la querencia de Sánchez por los cambios en su equipo. “Agota escudos humanos con 17 ministros purgados en dos años y cinco crisis de gobierno que dejan un Gobierno en crisis”, subraya el líder del PP. Los populares, igual que Ciudadanos, destacan también que el inconveniente, además del propio presidente, son sus socios dentro y fuera del Ejecutivo. “Más caos, despilfarro y radicalidad con los comunistas de su insomnio y los secesionistas mandando”, apunta Casado. Inés Arrimadas, líder de Ciudadanos, quien hace pocos días que ha vuelto a acercarse a las posturas de PP y Vox reclamando una moción de censura contra el líder socialista, señala: “Sánchez cambia algunos ministros, pero mantiene la misma hoja de ruta y los mismos socios. El problema es él y su alianza con Podemos, ERC y Bildu, que tanto daño está haciendo a España”.
El análisis del PP de los cambios destaca que Sánchez haya prescindido de su equipo más próximo de colaboradores, por la salida de la vicepresidenta primera, Carmen Calvo; del ministro de Transportes y secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, y del jefe de Gabinete de la presidencia del Gobierno, Iván Redondo. El portavoz de la ejecutiva nacional de los populares, José Luis Martínez-Almeida, ha tirado de juego de palabras y ha dicho: “El presidente ha hecho una moción de censura a Pedro Sánchez”. El mensaje es claro: “Cuando uno fulmina a su equipo más cercano, quien falla no es el equipo, es Pedro Sánchez como presidente”, proseguía el también alcalde de Madrid. Para el PP, Sánchez se “enmienda a la totalidad a sí mismo” por el cese de sus colaboradores más estrechos. “Aquellos que se han achicharrado ya saben cuál es la gratitud de Pedro Sánchez. Es un aviso para los nuevos: los dejará caer sin ningún tipo de misericordia”, ha enfatizado Martínez-Almeida. Al mismo tiempo, los populares inciden en que Sánchez no ha aprovechado la remodelación para reducir el tamaño del Ejecutivo.
Fuera del discurso oficial, en el PP hay análisis que reconocen a Sánchez la inteligencia del movimiento. “Mete en el Gobierno a una generación nueva, especialmente de mujeres, que le roba a Podemos el discurso feminista y de modernidad. Resuelve los conflictos entre [La] Moncloa y Ferraz cesando a las dos partes y lanza un mensaje de nuevo equipo para terminar la legislatura. Calviño tranquiliza a Bruselas”, apunta un exministro popular. “Luego vendrá el inevitable desgaste, pero a mí me parece que ha acertado”, puntualiza. “Ha soltado lastre”, reflexiona un barón del PP, que destaca el “reencuentro con el partido moderado (aunque sanchista)” y que el presidente “quiere profesionales” de la política y evitar traspiés. “Ha sabido tomar la iniciativa y nos deja con el pie cambiado con Calviño como vicepresidenta primera”, reconoce un diputado popular, que admite que es una jugada “audaz y buena”.
Con todo, el PP persiste en su línea de ataque: reclamar insistentemente a Sánchez la convocatoria de elecciones anticipadas. Tras el Rubicón de los indultos a los líderes independentistas y el ascenso del PP a la primera posición en las encuestas de intención de voto, el principal partido de la oposición no da tregua al presidente del Gobierno, y transmite que lo mismo le da que remodele o no su gabinete: el problema es él y debe marcharse.
El PNV, uno de los socios parlamentarios del Gobierno, analiza la remodelación gubernamental en clave de equilibrios internos del PSOE. “Entendemos que esta remodelación obedece más a motivaciones en clave interna del PSOE, a la necesidad de acompasar el Gobierno a la realidad del PSOE, que a la propia acción política del Ejecutivo”, señalan fuentes peneuvistas. El partido vasco no hace ninguna valoración, ni negativa ni positiva, de los cambios en el Ejecutivo, pero sí subraya que “mantiene intacta su vocación de diálogo y colaboración con el Gobierno de Pedro Sánchez”.
Otras formaciones, como el Partido Regionalista de Cantabria, sí ven problemáticos los cambios. Su presidente, Miguel Ángel Revilla, considera “sorprendente” la remodelación, sobre todo por la salida del Ejecutivo de la vicepresidenta Carmen Calvo, y ve con “preocupación” el relevo de José Luis Ábalos al frente de Transportes, por los acuerdos que estaban en marcha. Coalición Canaria lo valora como “otra mala noticia para Canarias”.