Fracasa la moción de censura de PSOE y Ciudadanos en Murcia
Los disidentes de Vox, cuyo voto ha sido decisivo, negocian entrar en el Gobierno del PP con la cartera de Educación
La sacudida política que se inició hace una semana en Murcia, con consecuencias en todo el país, ha acabado apuntalando más al Gobierno regional del PP. El presidente de la comunidad, el popular Fernando López Miras, ha superado por dos votos la moción de censura presentada contra él por PSOE y Ciudadanos. El voto de los tres tránsfugas de esta última formación, que retiraron sus firmas de la moción y aceptaron cargos en el Ejecutivo de López Miras,...
La sacudida política que se inició hace una semana en Murcia, con consecuencias en todo el país, ha acabado apuntalando más al Gobierno regional del PP. El presidente de la comunidad, el popular Fernando López Miras, ha superado por dos votos la moción de censura presentada contra él por PSOE y Ciudadanos. El voto de los tres tránsfugas de esta última formación, que retiraron sus firmas de la moción y aceptaron cargos en el Ejecutivo de López Miras, junto al de otros tres diputados disidentes de Vox y otro más todavía fiel a ese partido, permitieron derrotar la moción por 23 votos a 21. Uno de los parlamentarios de Ciudadanos que de momento no se ha desvinculado de la formación, el presidente de la Asamblea regional, Alberto Castillo, se ha abstenido. El líder del PP, Pablo Casado, ha asistido a la sesión y tras conocerse el resultado, en el mismo salón de plenos, se ha acercado a saludar a los disidentes de Vox, en compañía de López Miras. “Hoy aquí empieza la reconstrucción del centroderecha”, ha proclamado el máximo dirigente popular, en medio de un ambiente de euforia en sus filas.
Los antiguos miembros de Vox, que fueron expulsados del partido pero siguen ostentando su marca en la Asamblea regional, van a negociar con el PP su posible entrada en el Ejecutivo, con la mira puesta en la Consejería de Educación y la implantación del veto parental. El portavoz de esos tres parlamentarios, Juan José Liarte, ha admitido que esa es una de las consejerías que les interesan. Según el diario La Verdad, existe un primer borrador de acuerdo con el PP para que ese departamento lo gestione uno de los expulsados del partido de Abascal que facilitaron la derrota de la moción, la parlamentaria Mabel Campuzano. Fuentes del Gobierno regional señalaron que se trata de “un documento más” entre “las distintas propuestas” que se han intercambiado en los últimos días entre el PP y el grupo de Liarte, informa Elsa García de Blas.
Liarte lleva días insistiendo en que la prioridad absoluta para su grupo es dar a los padres la capacidad de retirar a sus hijos de determinadas actividades fuera del horario lectivo escolar, lo que Vox llama “pin parental” y que en su día ya había pactado con el Gobierno de López Miras. Tras la fuerte polémica suscitada por la medida, el Ejecutivo la rectificó parcialmente y aprobó una versión rebajada. “Para nosotros es un símbolo”, ha remachado Liarte, quien reclama además que se apruebe cuanto antes.
En el inicio de la segunda y última jornada del debate de la moción promovida por el PP y Ciudadanos, con la dirigente de esta última formación, Ana Martínez Vidal, como candidata a presidenta, se ha evidenciado la alianza en ciernes entre los populares y los disidentes del partido de Santiago Abascal, que se denominan a sí mismos “diputados libres de Vox”. Al entrar en la sala de plenos de la Asamblea, en Cartagena, López Miras se ha acercado hasta el fondo, donde se sientan esos parlamentarios, para saludar a Liarte e intercambiar unas palabras con él.
El asunto también ha saltado de inmediato al debate parlamentario. El líder socialista, Diego Conesa, ha acusado a los populares de permitir que Murcia se haya convertido en el “laboratorio de la ultraderecha”. “Y ahora puede ser la primera comunidad donde entran en el Gobierno”, ha añadido Conesa. Poco después, el propio Liarte ha admitido que los disidentes de Vox o “personas designadas” por ellos pueden acceder al Ejecutivo. Y de ese modo, ha destacado, la moción de censura tendrá un efecto paradójico porque servirá para “dar estabilidad al Gobierno”.
Ante las críticas de los socialistas, el portavoz del grupo de Vox ha asegurado que los promotores de la moción mantuvieron conversaciones con ellos, pese a que todas las partes lo habían negado hasta ahora. “Usted ahora nos llama ultraderecha”, ha dicho Liarte dirigiéndose a Conesa, “pero hasta ayer nuestros votos eran ambrosía”. El parlamentario ha dejado claro además que, en cualquier negociación, “lo primero de todo” para su grupo “es la libertad de las familias para elegir la educación de sus hijos”. El acuerdo del PP con los díscolos de Vox convierte a Murcia “en el referente” de un proyecto para unificar el centroderecha y “echar a Sánchez de La Moncloa”, según afirmó el portavoz de los populares, Joaquín Segado.
Como ya había sucedido el miércoles, el pleno ha comenzado con una fuerte bronca y nuevas acusaciones de los socialistas a un “Gobierno corrupto” que ha “comprado” a los tres miembros de Ciudadanos que habían firmado la moción y luego la retiraron a cambio de cargos en el Ejecutivo. Conesa ha atacado uno por uno a los tránsfugas y la bronca se ha desatado en la Asamblea cuando, en referencia a uno de ellos, Francisco Álvarez, antiguo jefe de ventas de una marca de embutidos, le ha espetado: “Usted ha pasado de vender chorizos a ser un chorizo con coche oficial”. A pesar de las protestas, el portavoz socialista se ha negado a retirar esas palabras: “El transfuguismo es corrupción y eso en términos coloquiales se llama choriceo”.
Al contrario de lo sucedido el miércoles, los tránsfugas se han quedado en el salón de plenos durante la intervención del portavoz de Ciudadanos, Juan José Molina, que ha derivado en una nueva bronca. Molina, notando que sus hasta hace poco compañeros estaban en la sala, les ha dicho a la cara lo que ya había afirmado el miércoles en ausencia de ellos: “Son ustedes unos sinvergüenzas”. Ante la inminencia de la derrota, Molina ha parafraseado el comunicado del Ejército franquista anunciando el final de la Guerra Civil, el célebre “cautivo y desarmado”. En una breve intervención final, López Miras ha acusado de “indignidad” a sus rivales por los “insultos” recibidos, que ha pedido retirar del diario de sesiones de la Asamblea. El presidente ha acabado con un mensaje más conciliador y ha mostrado su satisfacción porque la derrota de la intentona para descabalgarle supone que Murcia seguirá siendo “la tierra de la libertad”.