Una mujer presidirá por primera vez una sala del Tribunal Supremo
Las magistradas Lourdes Arastey y María Luisa Segoviano son las únicas candidatas para ponerse al frente de la Sala de lo Social
El Tribunal Supremo tendrá por primera vez una mujer presidenta de sala. Las magistradas Lourdes Arastey y María Luisa Segoviano han presentado su candidatura a la presidencia de la Sala Cuarta (de lo Social) del alto tribunal, que quedó vacante el 25 de junio por la jubilación de su titular, Jesús Gullón. Es la primera vez en la historia del Supremo en la que hay aspirantes mujeres a la presidencia de una de sus cinco salas, pero, además, ningún otro magistrado ha presentado su candidatura, po...
El Tribunal Supremo tendrá por primera vez una mujer presidenta de sala. Las magistradas Lourdes Arastey y María Luisa Segoviano han presentado su candidatura a la presidencia de la Sala Cuarta (de lo Social) del alto tribunal, que quedó vacante el 25 de junio por la jubilación de su titular, Jesús Gullón. Es la primera vez en la historia del Supremo en la que hay aspirantes mujeres a la presidencia de una de sus cinco salas, pero, además, ningún otro magistrado ha presentado su candidatura, por lo que una de las dos alcanzará la presidencia y se convertirá en la primera mujer al frente de una sala.
La ausencia de mujeres en las presidencias de salas se había convertido en un lastre para el Supremo y el Consejo General de Poder Judicial, que lleva años reclamando mayor igualdad en la judicatura, pero esa apuesta no se plasmaba en los más altos cargos de su cúpula. La presencia de una mujer al frente de una de las cinco salas del alto tribunal era una de las metas pendientes, una vez que ya hay magistradas en la presidencia de salas de la Audiencia Nacional y de tribunales superiores de justicia autonómicos.
Esta elección, además, se plasmará también en la Sala de Gobierno del Supremo, en la que hasta ahora solo había una mujer (la magistrada de la sala Segunda Susana Polo) pero que por vez primera tendrá una magistrada que no provenga del cupo de miembros electos, al que pertenece Polo, sino de los llamados miembros natos, integrados por los presidentes de cada sala.
Pese a este paso, el Supremo todavía dista mucho de ser un tribunal paritario. De los 74 magistrados que integran el tribunal, solo 14 son mujeres. La Sala de lo Social, la primera que tendrá una presidenta, es también la más igualitaria: 5 mujeres de 11 miembros. La incorporación de mujeres se ha acelerado en los últimos años. Nueve de las 11 magistradas del Supremo se han incorporado en los últimos siete años, bajo el actual mandato del CGPJ que preside Carlos Lesmes. Entre estas incorporaciones se encuentran también las primeras mujeres en llegar a la Sala de lo Penal, que nunca antes había tenido una magistrada y ya cuenta con tres (de un total de 13 magistrados).
María Luisa Segoviano y Lourdes Arastey, las dos candidatas a la presidencia, son veteranas magistradas con 11 y 14 años de experiencia en el alto tribunal. Segoviano, que actualmente ejerce la presidencia en funciones de la sala tras la jubilación de su titular, ingresó en la carrera judicial en 1987 por el turno reservado a juristas de reconocida competencia. Fue presidenta de la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León con sede en Burgos entre 1997 y 2002 y presidenta de la Sala de lo Social del mismo Tribunal Superior con sede en Valladolid entre ese año y 2006, cuando fue nombrada magistrada del Supremo.
Lourdes Arastey es juez desde 1985, y desde 1989 ha estado destinada en el orden jurisdiccional social, del que tiene la condición de especialista. Magistrada del Supremo desde 2009, fue vicepresidenta primera del Grupo Europeo de Magistrados por la Mediación (GEMME) y presidenta de la sección española de esa asociación, así como miembro fundador de la Red de Expertos de Derecho de la Unión Europea (REDUE) del Consejo General del Poder Judicial.
La Sala Cuarta no es la única que tiene pendiente la renovación de su presidencia. La Quinta (de lo Militar) está vacante tras la jubilación del magistrado Ángel Calderón. En este caso son dos hombres los candidatos a sucederle y se da la circunstancia poco habitual de que uno de ellos, el ex fiscal general del estado Julián Sánchez Melgar, no es actualmente miembro de esta sala sino de la de lo Penal, a la que pertenece desde que llegó al Supremo en el año 2000. El otro candidato es Jacobo Barja de Quiroga López magistrado de la Sala Quinta del Supremo desde 2014.
El CGPJ renovará también en los próximos meses las presidencia de la Salas Tercera (de lo Contencioso-Administrativo), por lo que el órgano que dirige Lesmes habrá cambiado a los cinco presidentes de sala mientras está en funciones, situación en la que lleva desde diciembre de 2018 y que le ha generado fuertes críticas dentro y fuera del Consejo. El presidente de la Sala Primera fue reelegido en febrero de 2019 y el de la Segunda, en octubre de ese año.