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Los desfiladeros más espectaculares de Europa

Lentamente, de forma tenaz y sin tregua, el agua se abre paso entre montañas, labrando profundos cañones, quebradas, angostos valles y precipicios que retan al vértigo o brindan paseos placenteros

La salvaje zona montañosa del norte de Portugal sería prácticamente inaccesible si no fuera por los Passadiços do Paiva . Estas pasarelas de madera recorren a lo largo de ocho kilómetros el curso del río Paiva, bordeando montañas y salvando importantes desniveles. Para completar la ruta se requieren varias horas y cierta forma física, sin olvidar de llevar agua suficiente. Están en el municipio de Arouca, en el distrito portugués de Aveiro, y son además un santuario natural de varias especies en peligro. Su recorrido es un viaje por la arqueología, la biología y la geología de esta región al sur de Oporto.SOPA (Getty)
Hace más de 2.000 años ya se usaba este angosto desfiladero como acceso a los puertos de los Alpes, aunque se hacía siempre de muy, muy mala gana por el peligro de que le cayera a uno una roca encima o se produjera una violenta crecida de las aguas. De ahí el nombre en retorrománico —Viamala— de esta garganta. Hoy este romántico desfiladero ya no da miedo y se ha convertido en un atractivo turístico más, en especial el puente colgante de 56 metros de largo que salva el valle.makasana (Getty)
En una noche glacial de invierno, cuando cuelgan de la piedra chupones como estalactitas, la visita nocturna con antorchas al Breitachklamm, uno de los cañones rocosos más profundos de Europa, es impresionante. La garganta va desde Oberstdorf-Tiefenbach hasta Kleinwalsertal, en la región de Algovia, al suroeste de Baviera, y se hunde hasta unos 100 metros de profundidad en la roca. El paseo completo por el desfiladero lleva unas dos horas, por senderos seguros entre acantilados cubiertos de musgo, a lo largo del Breitach, un cristalino río de montaña.Alamy
En el parque nacional de Durmitor se encuentra uno de los cañones más salvajes y bellos de continente, la garganta del río Tara, con paredes verticales de hasta 1.300 metros de alto. Para entender cómo pudo abrir tan tremendo tajo el río, el más largo de Montenegro, basta con hacer rafting en sus rápidos. Al final del descenso, el Tara y el Piva convergen en un nuevo río, el Drina, uno de los más largos de los Balcanes. Los últimos 15 kilómetros del descenso son los más emocionantes.FotoGablitz (Getty)
El agua de los Alpes escandinavos cae con un enorme estruendo y una fuerza indómita por esta imponente cascada de casi 200 metros. Para llegar hasta ella, el agua primero debe atravesarse el valle calizo de Måbødalen, toda una experiencia: se baja por 1.300 peldaños de piedra, por gravilla suelta y por un exiguo puente colgante de madera que cruza el arroyo. Voringsfossen es una de las muchas cascadas que existen en los fiordos noruegos, y probablemente, la más famosa. Desde hace un año, cuenta además con un espectacular puente de acero anclado a la roca (en la imagen), una atracción turística solo apta para valientes, que permite pasear a 150 metros de altura sobre el salto, por una pasarela que parece flotar en el aire.STIAN LYSBERG SOLUM (Getty)
Las gargantas del río Ardeche son una reserva natural nacional al sur de Francia, entre Montpelier y Lyon, jalonadas de localidades como Bourg-Saint-Andéol o Pierrelatte. La mejor forma de explorarlas es en piragua o kayak. Un recorrido de 32 kilómetros que comienza junto a un espectacular arco de piedra. La excursión completa lleva dos o tres días, y hay que llevar todo lo necesario para acampar.Juergen Sack (Getty)
En los montes Pieninos, el río Dunajec ha excavado una garganta de más de 300 metros de profundidad cuyas paredes de roca caen prácticamente verticales. El Dunajec es un río fronterizo entre Polonia y el norte de Eslovaquia, y aquí se contemplan algunas de las estructuras geológicas más interesantes de Europa. En otros tiempos, este río se utilizaba para transportar la codiciada madera de los montes Tatra en almadías hasta Gdańsk, pero hoy los paseos en balsa son una atracción turística. Si el río fluye con calma en su tramo inicial, cuando llega a esta garganta la cosa se anima.WOJTEK RADWANSKI (Getty)
El pueblecito de Tipova es el punto de partida de una serie de excursiones por los espectaculares desfiladeros de las montañas de Moldavia entre pequeñas cascadas y arroyos cubiertos de musgo. Cuando se abren los valles, la naturaleza muestra su cara más dulce, con verdes prados donde florecen amapolas púrpuras y blancas. Cerca de Tipova, al abrigo de un saledizo rocoso, se encuentra también un monasterio rupestre del siglo VI.Alamy
Subir a este barranco que atraviesa la sierra de Tramontana no es precisamente coser y cantar. Pero lo cierto es que este andar trepando por roquedos se ve recompensado cuando por fin descubres ante ti la playa y aparece entre las peñas el mar Mediterráneo. En verano, el Torrent de Pareis está muy transitado por excursionistas que descienden el barranco saliendo desde Escorca para llegar hasta Sa Calobra y su famosa playa.Aleh Varanishcha (Getty)
Se dice que Matera es uno de los asentamientos más antiguos del mundo. Y es muy posible. La prueba está en esta garganta que llaman La Gravina horadada por multitud de cuevas —las Sassi di Matera— que ya estaban habitadas hace 7.000 años. Hoy, sobre la roca y con fabulosas vistas, se levantan lujosos alojamientos, pero las antiguas viviendas trogloditas siguen siendo un lugar abierto a todos.Westend61 (Getty)
Perdido en el norte secreto Grecia, en el macizo del Pindo, es un tajo descomunal que raja la montaña a lo largo de 12 kilómetros. Las mejores vistas se disfrutan desde el mirador de Oxiá, al que se puede llegar en coche. Quien quiera adentrarse más en este paraje, puede tomar alguno de los muchos senderos que salen del agradable pueblecito de Monodendri. El cañón forma parte del parque nacional Vikos-Aoos, de 12.600 hectáreas.NurPhoto (Getty)
Incluso en la turística isla de Tenerife quedan rincones con encanto, aunque para encontrarlos haya que zigzaguear por carreteras endemoniadas. Pero la recompensa suele merecer la pena. Esto ocurre en Masca, que pasa por ser la aldea más espectacular de la isla: un pueblo encaramado en lo alto de un risco del parque natural del Teno, rodeado de montañas y que sirve de puerta de entrada al barranco de Masca. La carretera de subida al pueblo, que traza algunas curvas espeluznantes, es una de las grandes experiencias de conducción en Tenerife.Westend61 (Getty)
Unos 40 kilómetros al sur de Salzburgo, las aguas procedentes de los glaciares han horadado una imponente garganta en la piedra: Lammerklamm. Se siente nítidamente la fuerza indómita de la naturaleza cuando, desde la pasarela, se baja al puente sobre la corriente atronadora. En la parte más angosta y oscura, las paredes de la quebrada están separadas solo por unos pocos metros. Toda la región es una popular zona de vacaciones con prados y bosques y muchísimas casas rurales, perfecta para amantes del excursionismo.Wolfgang Weinhaeupl (Getty)
Para conductores noveles, es posible que la carretera del valle de Brasa no sea la opción más recomendable; para quien domine bien el coche resulta, en cambio, impresionante. La llamada Strada della Forraes es una de las carreteras más bellas y sinuosas de Europa, construida en 1913. La ruta comienza unos 400 metros por encima del lago de Garda, para ir luego bajando en incontables curvas cerradísimas que se abren a las aguas azules del lago. La carretera se interna en el corazón del barranco del río Brasa, por paredes que en ocasiones se estrechan tanto que apenas dejan pasar la luz.Marco Bottigelli (Getty)
El desfiladero de Avakas está considerado uno de los parajes más bellos de Chipre. La ruta senderista comienza en la localidad de Paphos, en la península de Akamas, en el lado griego de la isla. El paso entre las paredes verticales de esta garganta se va estrechando cada vez más. En los últimos 500 metros puede haber agua, así que mejor llevar calzado impermeable o escarpines.Steve Fleming (Getty)
El nombre de imponente garganta, situada en el parque nacional homónimo de la costa adriática croata, significa “pequeño infierno”. Pero resulta que aquí uno no encuentra purgatorios y diablos, sino una flora y una fauna exuberantes, y turistas de todo el mundo, por supuesto. Algo tendrá que ver el reclamo de la enorme cueva que llaman Manita Peć, la única abierta al público. Los platos fuertes son la escalada, el rápel y el senderismo.diamirstudio (Getty)
En 2015, Justin Bieber rodó en Fjadrargljufur, un impresionante cañón del sur de Islandia su videoclip para el álbum 'I’ll show you', haciendo que este rincón perdido en un remoto fiordo de la isla se pusiera de moda. Tanto, que se tuvo que restringir el acceso. El lugar merece la visita: sus rocosas y resbaladizas paredes, cubiertas de hierba y musgo, tienen una caída de 100 metros hasta el abismo. Al fondo de este corre el río Fjaðrá, cuyas aguas se alimentan de los glaciares y de las cascadas que se precipitan al vacío. El camino va siguiendo el borde superior de la garganta y ofrece unas vistas increíbles de esta sima tremenda.Ratnakorn Piyasirisorost (Getty)
El acceso al cañón de Tolmin es también la entrada al famoso parque nacional del Triglav, una zona estupenda para el senderismo. Si en este angosto desfiladero —cuyas paredes en algunos puntos no distan sino pocos metros— murmura el agua azul turquesa del Tolminka, en los abruptos acantilados predomina un verde extraordinariamente frondoso e intenso. Hay diversas pasarelas de madera y unas cuantas escaleras. También todo un sistema de cavernas, entre ellas la cueva de Zadlaska, o gruta de Dante. El punto culminante es un manantial de aguas termales que invita al relaxAldo Pavan (Getty)
Árboles de hoja caduca y arbustos que se agarran desesperadamente a la escarpada roca. Si miras hacia arriba, entre los húmedos acantilados no ves más que una exigua franja de cielo azul. Y es que esta cañada de Finnich (Finnich Glen), junto al lago Lomond, en Escocia, es un lugar mágico, especialmente en los rincones adonde llegan los rayos del sol iluminando la angosta quebrada con un halo de misterio. Es aquí, en Finnich Glen, donde se encuentra el llamado Púlpito del Diablo. Según la leyenda, en este altar de roca se reunían en secreto los druidas celtas. Está a solo unos 30 minutos de Glasgow, pero parece otro mundo.Westend61 (Getty)
El cañón de Rappenloch, cercano a la ciudad austriaca de Dornbirn, fue noticia en 2011 cuando los puentes de madera que lo atravesaban se vinieron abajo sin previo aviso. Afortunadamente, nadie resultó herido y dos años después, tras adoptar las medidas de seguridad pertinentes, se construyó una nueva vía. El camino se inicia en la pequeña aldea de Gütle para continuar entre túneles y pasarelas hasta el precioso lago Staufensee. Desde aquí, tras reponer fuerzas, podemos ampliar la excursión a otra cercana garganta, la de Alplochshlucht.Markus Keller (Getty)